P.O.V. AMANDA
Sin que yo dijera una sola palabra, mi padre ya tenía a Edmund contra la pared. La estúpida de Mónica Schulz intentó meterse en nuestros asuntos más de la cuenta y todos se le fueron encima.
No pude evitar reírme y sonreirle burlonamente a la desgraciada.
No sabe con quienes se está metiendo.
Sinceramente ya no me importa lo que Edmund haga con su vida. Admito que lo amé muchísimo, aún lo amo y me dolió mucho su traición. Aunque he intentado entender que fue lo que hice mal, simplemente no logro verlo.
Está maldita guerra nos separó. Soy consciente de que tal vez me comporté un poco fría algunas veces cuando estábamos en plena guerra, pero él también se distanció de mi.
Muchas veces yo lo busqué para charlar por lo menos, y el siempre estaba ocupado.
Si acaso solo un
