Zararé

Capítulo 20

En la primera cita de Katrina ella se había tomado un baño eligió y tomo su vestido en ese momento ella tendía su cama escuchaba la radio, pero al escuchar la música decidió apagarla.

Amanda: —El desayuno está listo vamos.

En eso que la escucha Katrina se encontraba acostada en su cama ella se levanta y corre bajando las escaleras en ese momento aun su tío David no se casaba con Eva siendo que él era el que cocinaba para que ese día les preparo a sus hijas unos huevos con jamón y una malteada de plátano con leche.

Amanda: —Sabes si hoy volverá Cristóbal.

Katrina alza los hombros sin saber.

Katrina: —No lo sé tiene pendientes en la ciudad ¿Por qué debería saber lo? Le sigues haciendo la luchita.

A lo que Amanda se dio cuenta dejando la conversación pues ella había sabido que Valentina y el habían terminado y tenía planeado confesarle a Katrina.

 Katrina: —Gracias debo ir me veré con Lucas.

En eso que van caminando juntos Lucas lleva su bicicleta él pregunta:

—¿Qué quieres hacer hoy?

Katrina:  —¿Vamos por un helado?

En eso van a la heladería el sube a la bicicleta y ella sobre los diablos al llegar piden un helado de vainilla para Katrina y de tuna para el en eso se sientan a la mesa que se encuentra hay

Lucas: —Regrese a la banda. —. Era el guitarrista del grupo de música que se presentaba cada noche en el bar.

Katrina: —En serio que bien.

Katrina sonríe al pensar en eso, fue cuando en esa heladería el pregunto si quería que ella fuera su novia Katrina acepto un noviazgo que se convirtió en una etapa que para los dos disfrutaron con amor terminando en una amistad madura sin dejar de quererse mutuamente.

Continúan por carretera Cristóbal pasa su mano sobre el cabello de Katrina que se encuentra dormida siendo que su cabeza se encuentra en el muslo de él recargada quien se encuentra manejando es su primo Amado.

Sierra: —Detente tengo ganas de vomitar.

Amado se detiene ella baja corriendo a vomitar a un lado de la carretera en eso despierta Katrina al sentir que se mueve Cristóbal preguntar:

—¿Qué pasa?

Amado: —Creo que Sierra se mareo y le dio ganas de vomitar.

En eso Katrina y Amado ven que Cristóbal alza el cabello de su hermana mientras vomita y el señor Toruno bajo a verlos hablaban en eso termina de vomitar vuelven a la camioneta.

Katrina: —¿Te sientes bien?

Sierra: —Siento a verte despertado Katrina, pero estoy bien.

Katrina: —No te preocupes, pero toma este chicle.

Sierra lo toma y come mientras mastica desapareciendo el mal aliento de su vomito.

Cristóbal: —En todo el viaje venias bien y ya que vamos a llegar vomitas.

Katrina voltea a ver a Cristóbal.

Cristóbal: —Si ya vamos a llegar con los abuelos.

Quedaba poco para llegar a otro pueblito recorriendo esas calles tiendas y negocios de todo tipo mientras Cristóbal le indica por donde ir a Amado porque por un momento perdieron de vista la camioneta en la que va su hermano, Sara y su padre al llegar a casa de los abuelos una casa grande en eso ellos ven que llegaron primero el señor Torino, Sara y Mateo una señora ya abuelita, pero fuerte y bien arreglada los recibe abrazando a cada uno siendo que Sierra decidió irse directo al baño en seguida sale el abuelo de Cristóbal a saludarlos y bromear al ver los abuelos a Katrina la reciben con alegría dejando a su nieto Cristóbal en vergüenza pues los abuelo habían conocido a Katrina desde chica cuando la esposa de su hijo le enseñaba inglés e italiano y de algún modo sabían que ella terminaría siendo la novia de su sobrino que aman, a la hora de la comida los abuelos tenían listo todo, asada que prepararon todos se encuentran fuera de la casa disfrutando del día comiendo y riendo en familia Katrina mira el gato que juega con otro gato.

Cristóbal: —Amor que te parece ir mañana a la playa.

Al escuchar eso voltea a verlo antes de responder Amado y Sierra intervienen al decir:

—Claro primo hay que ir.

Cristóbal barre los ojos pues su idea era ir a solas con su novia a lo que Katrina le da un codazo.

Cristóbal: —Si mañana vamos.

Abuela: —Hija ¿Cómo está tu tío David?

Katrina: —Muy bien señora les manda muchos saludos.

Abuela: —Gracias, pero no me digas señora soy María.

Katrina asiente ella ve que se levanta Cristóbal yendo solo adentro de la casa continúan comiendo en eso el vuelve a lado de ella siente el brazo de el a su espalda al nivel de su cintura mientras todos están en sus propias conversaciones.

Katrina: —Cristóbal ¿Estas bien? —. Pregunta.

Cristóbal: —Bien nena recuerdas a Eduardo, — ella asiente. —Me llamo para decirme, que mejor vamos a caminar.

Katrina: —Esta bien.

Terminan de comer las chicas ayudan a recoger a la abuela María al terminar Sierra y Katrina suben a la habitación donde ambas dormirían al igual que Sara consistían en tres camas una gran ventana que daba para mirar el jardín que se encontraba en la parte trasera de la casa sus maletas se encuentran sobre las camas abre cada una la suya en eso Katrina saca unas botas negras que se pone al quitar se los tenis que traía.

Sierra: —¿A dónde se vas a ir con mi hermano?

Katrina: —Vamos a caminar solo que no quiero estropear mis tenis.

Asiente Sierra en eso que Katrina tiene su maleta abierta Sierra nota un color azul se acerca sin miedo y lo toma una ropa de encaje trasparente y azul.

Sierra: —Katrina que traviesa.

En eso voltea al no saber de qué habla ve que tiene entre sus manos el body que su prima guardo y que ella olvido sacar de la maleta.

Katrina: —No debías a ver visto esto.

Sierra se lo entrega mientras ella lo guarda.

Sierra: —No te sientas incomoda es normal hacer el amor con tu novio, aunque yo soy virgen sé que mi primera vez será especial.

Katrina: —Lo será Sierra, pero yo también soy virgen deseo lo mismo.

Sierra: —Te digo lo mismo.

En eso se abrazan amabas saben su secreto y se comprenden en eso entra Cristóbal las ve.

Cristóbal: —Katrina vamos ¿Ahora ustedes? Suelta a mi novia.

Sierra le susurra al oído a Katrina:

—Él es virgen.

A lo que Katrina asiente, pero presiente que no es cierto.

Cristóbal: —Vámonos.

En eso se despiden de su hermana y salen juntos si la casa Toruno tenia jardines la casa de sus abuelos tenia terrenos a su alrededor de sembradíos con aspersores de agua algunas encendidas otras apagadas recorren el lugar mientras escucha a Cristóbal sobre la llamada de Eduardo:

—Sobre los Catire parece que solo asistirán algunos, pero no el señor Fabricio.

Katrina: —Que mal para Emilia.

Cristóbal: —Si, — en eso mira a Katrina con una mirada encantadora arquea la ceja al sonreír de mejilla a mejilla. —Te voy a robar.

Katrina gira al verlo rascando se la parte de atrás de su cabeza.

Cristóbal: —Reserve una habitación de hotel. —. Dice a su oído a lo que ríe Katrina.

Katrina: —Mi novio esta loquito.

Se miran y besan mientras las manos de Cristóbal habían rodeado la cintura de ella sienten cada centímetro de sus bocas y pequeños ruiditos que provocan los dos acompañados de la naturaleza cuando Katrina solo tiene sus manos sobre el pecho de él siente las manos grandes de él recorriendo su cuerpo en ese instante Cristóbal está cargando a Katrina sosteniendo la y ella rodeando sus brazos alrededor de su cuello y sus piernas en la cintura de el  continuando con los besos en movimiento mientras ella juga con su cabello y el la siente en cada respiración sin despegarse continúan sintiendo se ambos era lo que ambos querían entre besos comienza a decir Katrina:

—Amor…

Cristóbal: —¿Si bebe?

En eso pequeña conversación donde solo los dos se entienden se sienten mojados dejan de besar se cuando ven aspersores encendidos que los mojan escuchan risas a lo lejos ambos miran y ven que son Amado y Sierra a lo que Cristóbal baja a Katrina.

Katrina: —Parecen niños chiquitos.

Cristóbal: —Ya vuelvo amor.

En escena Katrina ve que trae a Sierra cargando como costal de papas mojando la cuando siente Katrina que alguien la carga similar es Amado corriendo con ella aquella tarde los cuatro quedan empapados cuando vuelven a casa caminando riendo al llegar los ven.

Mateo: —¿De dónde vienen?

Cristóbal: —estábamos paseando por haya. —. Señala que por el lado izquierdo.

Sierra: —Hubieran venido les dimos una buena mojada a Cris y kat.

Amado: —También ellos a nosotros.

Abuelo: —Vayan a cambiarse.

María: —Vallan a bañarse si no se van a enfermar.

En eso todos van a sus cuartos mientras se quedan solas.

Katrina: —Cierto porque no fue Mateo y Sara.

Sierra: —Parece que andan o siguen peleados a parte ella está dormida.

Sierra y Katrina la mira dormir.

Katrina: —Ah vas a bañarte. —. Dice quedito.

Sierra: —Si, pero ve primero.

Katrina: —me daré solo una ducha.

Katrina entra y Sierra mientras elige su ropa esperando a que salga ella, pasan algunos minutos y Katrina sale lista solo para vestir con un short y su polera con la palabra LOVE en ese momento Sierra es la que entra y Katrina decide salir del cuarto al ver que continúa dormida Sara Katrina se encuentra bajando por las escaleras cargando su laptop al ver la sala de estar sola y un sillón grande color vino ella decide ir a él y sentarse poniendo su computador portátil sobre sus piernas deseaba conectarse y hablar con su amiga Paola siendo que en ese instante quien saludo primero fue su amiga.

Paola: —Como te va con tus nuevos abuelos.

Katrina: —Mensa no empieces necesito que hablemos de los Catire ¿Sabes de los que van ir?

Paola: —A la boda solo sé que Fabiola y su familia irán solo eso aparte ya mañana nos vamos nosotros a Marzano.

Katrina: —Bien genial entonces haya nos vemos.

Paola: —Si vas a venir creí que te quedarías haya de tus abuelos.

Katrina: —No nos quedaremos igual pasado mañana nos vamos por suburbano para de ahí tomar el vuelo a Marzano y eso que el señor Toruno hizo venir a Abel y Luis por las camionetas para llevarlas a Zararé.

En ese momento llego Cristóbal sentando se a lado de Katrina sobre uno de los apoyabrazos saluda a Paola, pero en eso ella se despide.

Cristóbal: —Katrina que haces sola aquí.

Katrina cierra la laptop al ver a Cristóbal al decir:

—Quería algo de privacidad, pero dime ¿Qué quieres hacer?

Cristóbal: —Salgamos al pueblo solos.

En eso vuelve a su habitación a guardar en el estuche su computador y ambos jóvenes salen para disfrutar del día que queda. Recorren el centro del pueblo parándose debes en cuando para ver sus artesanías comprar una que otra cosa y probando los dulces de la región fue una tarde agradable e inolvidable.