Demetrio había estado perdido en sus pensamientos, recordó a Alina, su novia de universidad, la mujer que amó y la que lo dejó unos meses antes de casarse porque estaba enamorada de Santino, el mejor amigo de Demetrio en ese momento y aunque Santino le dijo que veía a Alina como una amiga, Demetrio no soporto su rotura y p**o la rabia con Santino. Estaba absorto en sus pensamientos, cuando Evangelina se asomó por la puerta. Hoy lucía diferente, su ropa era anticuada, pero un poco más pegada, mostrando esos atributos que él conocía muy bien. —Tiene una videoconferencia —le entregó la taza de café y la laptop para que hablara con los socios chinos. Salió de ahí, apresurada, tenía un montón de trabajo que hacer, cuando se topó de nuevo con Tamara. —¿Has sido tú verdad? —Evangelina la miró