Larissa lo escuchaba callada, pero tenía ya sus ojos llenos de lágrimas, Drácula se dio cuenta, pero tenía que hacerle ver que el Rey es Él y que se acostumbre a lo que hace y deshace como Rey.
—Mira Larissa, a ti te amo me voy a casar contigo por eso, sin embargo Marietta es mi concubina, ella esta debajo de ti, pero no puedes darle órdenes ni decidir nada sobre ella, ¡solo Yo tengo ese derecho!, ella es mía, solo mía, esta para servirme solo a mí y ella hará lo que le dé la gana en el Reino y jamás tampoco te ordenara a ti ni a mí, además al ser la Reina y mi esposa gozaras de privilegios sobre ella, solamente Yo estaré sobre ti al ser el rey y tu esposo, siempre estarás conmigo donde vaya, serás la Reina, en cambio Marietta jamás será presentada a nadie solamente será mi concubina.—dij
