—Mi lobito espérame aquí hasta que arregle unos asuntos y voy a buscarte una habitación en Palacio para que estés ahí —¿Vas a sacarme de aquí?, ¿tanto…me quieres? Drácula le agarro los cachetes y dijo —Claro que te quiero y mucho, entonces quédate aquí y yo mismo regreso a buscarte, ¿si? —Claro que si Drácula —Entonces vamos a bañarnos El Rey lo agarro cargándolo riéndose hasta el baño y así abrió la ducha, les cayó agua a los dos a las risotadas de los dos y juntos se bañaron, se secaron se vistieron y Drácula se fue. Llego a su despacho, estaba firmando algunos papeles y tocaron a la puerta —Pase —Majestad, disculpe, ¿me mando a llamar?—dijo Samira —Entra Samira, cierra la puerta. Ella entro se sentó y lo miro fijamente esperando alguna orden y Drácula manifestó —Samira,