? Dando Respuesta ?. ? Elijan ?

1043 Words
Después de unos segundos de lucha, yo por probar sus besos y ella con intencion de negármelos. _ Mabel, por favor, solo déjame amarte Susurré al apretar su mano, esa con la que intenta alejarme, pero creo mis palabras la vencieron ya que se propuso a besarme. Mi corazón. respondió agitado y la levanté en mis brazos, caminando con ella hacia el interior y al estar dentro de la casa cerré la puerta de un puntapié. _ Amor, estoy aquí porque te amo y así me lo pidas no podré irme porque el amar de este Greco es diferente a cualquiera que en esta vida hayas conocido. En ese momento le revelé que yo era un cuervo en forma humana, pero sin en realidad contar la verdad. Coloque sus pies sobre la alfombra de la sala y la miré a los ojos con deseo, un deseo que me llevó nuevamente a robar sus besos, uno que me hacía sentir un fuego ardiente. Entonces poco a poco deslicé una de mis manos bajo su vestido, sintiendo su piel suave y cálida. Sin decir más palabras la llené de caricias, sintiendo su cuerpo estremecerse bajo mis manos. Te amo, No puedo estar sin ti, es un tormento, solo se mía, te lo suplico Le susurré al oído, absorbiendo el lóbulo de su oreja, prometiéndome ami mismo que que nunca la dejaría _ Te extrañé tanto Elijan tanto que hacía tiempo que no sufría tanto. Agregó entre gemidos hinchando mi pecho, entonces la amé con el agitar de mi cintura repetidas veces hasta al fin terminar en su cuarto. Por un rato lo observo dormir, pensando cómo contarle el secreto que guardo y también viajando entre letras de libros que he leído para alargar sus años, porque tengo la certeza nuestro amor será único y eterno, aunque esté llegue a volverse una leyenda misteriosa para el mundo exterior. Con el cerebro colapsado entre tanto pensamiento, sin darme cuenta me quedé dormido. Entonces desperté en la mañana, con la luz del sol filtrándose por las cortinas, iluminando la habitación junto a Mabel que aún dormía. Observé su rostro nuevamente por unos segundos, pero no logré contenerme. estaba feliz por amanecer junto a ella. Entonces me acurruqué a su cuerpo caliente y la abracé con ternura, sintiendo su suave respiración en mi cuello. _ Buenos días, señor Greco Escuché su voz en susurro, pero no pude contestar. Sus labios se encontraron con los míos en un beso tierno y apasionado, y supe en ese momento que no había otro lugar en el mundo donde quisiera estar. Así que empecé nuevamente a explorar cada Rincón de su cuerpo con deseo y pasión, y en cada susurro de amor le entregué todas mis promesas, esas que hacía milenios que no entregaba. _ Tengo que ir al castillo a cerrar un trato, pero quisiera preguntarte si quieres salir a cenar o tal vez dar un paseo esta noche. Pregunté al finalmente quedar sin aliento, acurrucado bajo las sábanas, aunque satisfecho. Ahora yo deseaba más que su cuerpo en la intimidad de una habitación. Ahora yo quería pasar tiempo con ella, pasear Por la ciudad tomados de la mano, como una pareja normal. un deseo que jamás se había despertado. _ Me encantaría respondió a levantarse y, sin ningún pudor, caminar desnuda por la habitación en busca de un camisón. Yo la observé Como quien mira un ángel anonadado, _ Eres tan hermosa que creo que aún sigo dormido soñando con algún Ángel perdido. ella escuchar mis palabras, sonrío con sus mejillas sonrojadas y su cabello n***o brillante. Yo no mentía y ya me parecía tan hermosa y radiante que se me es difícil apartar la mirada de ella. _ Estaré lista a las seis, así que esperaré ansiosa Se acercó con gracia y esa elegancia que me conquista. beso mis labios, estos los sentí encender apenas y unirse a los de ella. Entonces me quedó confirmado. Mabel Bianchi en esta vida es el amor de la eternidad mia, del demonio que en mi habita. _ Buenos días, hermano! Qué sonriente estás! De dónde vienes? preguntó a Mel apenas y verme entrar al salón del castillo _ Vengo de amar y ser amado, amél de donde todo es perfecto Respondí feliz por haber pasado la noche con Mabel, una felicidad que solo podría sentir un humano en su pubertad. _ Bueno, espero que lo que te voy a entregar no cambie tu buen humor. _ Qué sucede Pregunté observando una de sus manos donde sostiene un sobre el cual ofrece, entonces vi que era una carta, observé su remitente y esta venía de las manos de Yanina. Después que con rapidez ley el remitente y ver de quién era dicha carta, decidí leerla después. A lo mejor Yanina no aceptaba nuestra ruptura, tal vez le atosigan los recuerdos del tiempo que pasamos juntos y a pesar de sentirme como un desgraciado, yo solo podía pensar y planear mi atardecer con mi amada. Dónde la llevaría? En qué restaurante comería con ella? En ese momento no me importó para nada Yanina ni sus sentimientos. _ Elijan, deberías leer la carta. No confío en Yanina. Siento que algo planea Irse sin luchar, sin quejarse, Así nada más. me parece tan sospechoso. Sentí las palabras de Amel como una punzada en la cien, pero aun así me negué a leerla. _ Yanina no se atreverá a tocarme, mucho menos a Mabel. No creo sea tan estúpida. ha sido advertida y te puedo asegurar que si llegara a hacerlo la destrozaría. Estoy enamorado Amel y no quiero ahora nada. Arruiné mi momento, después me encargaré de ello. _ De igual manera, no debes confiarte, las mujeres no son de fiar, no olvidan y eso las hace ser un enemigo del cual hay que cuidarse, Ya que su fragilidad y sus rostros de ángel son su arma mortal. Advirtió Amel con algo de preocupación en sus palabras _ Hermano: ella puede tener el arma que quiera, yo soy Inmortal Guiñó mi ojo para así sonreír con malicia. Pues yo no mentía. Si ella volviera a aparecer en mi vida o en la de Mabel con malas intenciones, consumiría su alma de la manera más dolorosa y cruel.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD