En horas de la noche, fui a ver cómo estaba Alma, al entrar me tope con la grata imagen de Pia cantándole una canción de cuna, era tan bonito, pensar que Muriel pudo ser la que arrullara a nuestra pequeña. - se ha portado bien?- Le pregunté acercandome, ella me sonrió y agachó la mirada. - si, Alma es una muy buena niña, es tan hermosa - Yo me acerque y me senté a su lado. - se parece mucho a su madre - Dije con algo de melancolía, acaricie la mejilla regordeta de Alma y sonreí un poco, ella y mi madre eran las que me tenían con los pies sobre la tierra. - puedo preguntar qué pasó con su esposa?- Me preguntó ella un poco tímida. - la asesinaron el día que nació Alma, fue, un duro golpe para mí, y para todos los que conocían a mi esposa - Ella asintio y arrulló a Alma en sus brazo