Alejandome del Millonario.

Anda Ali, llegaremos tarde. Alison se había despertado adolorida, sentía un dolor en su vientre y feminidad, la noche anterior termino por caer en el juego de su novio. James tenía algunos meses como novio de Alison, él parecía un buen tipo ante los ojos de los padres de ella, por eso le permitieron salir con él, pero lo que no se imaginaba la chica era que por caer en la presión de sus supuestas amistades y su novio, que veían el tener sexo tan normal, decidió hacer el amor con James. La noche anterior fueron a un concierto de música para menores, no habría venta de alcohol, mucho menos estarían sin vigilancia, pues era un lugar pequeño y se cuidaba el orden. Ali estaba lista en casa esperando a su novio, a su padre no le hacía gracia el que su hija tuviera novio, sobre todo porque la mayor no los había tenido aun, Antonella, la hermana de Alison era una chica muy centrada, ayudaba a su madre con los quehaceres domésticos, pronto comenzaría a trabajar en la mansión de los Richmond, podría pagarse la Universidad para apoyar a sus padres, ella estudiaría medicina, una carrera costosa, pero que daba muchas satisfacciones. Cuando James llego a casa de Ali, sonó el timbre y Rodrigo, el padre de Alison atendió a James, no le agradaba que su hija tuviese novio, era aún muy joven, pero a petición de su esposa, quien decía que era mejor conocerlo que Ali tomara la decisión de verse a escondidas lo aceptaba. — Buenas noches, señor Petters, he venido por su hija, iremos a un concierto, cuidaré bien de ella. Rodrigo asintió y llamo a su hija. — Llegaron por ti Alison, no esta de mas que sepas muchacho que espero la respetes y cuides de ella, si intentas algo lo sabré y te aseguro que pagaras por ello. Pero el joven no se preocupaba. — Comprendo señor, no tiene de que preocuparse, Ali bajo y ella se veía hermosa, una falda café corta, un top y un saco color n***o. Su padre no amo el atuendo, sobre todo porque pensaba que esa falda era corta, pero su esposa con una mirada le decía que se tranquilizara, eran una linda pareja, no había nada de malo en como iba vestida, era la moda, además tenía a James que la protegía, confiaban en el chico. Ambos salieron rumbo al concierto, era un grupo joven, pero de música muy agradable, James abrazaba y acariciaba el vientre y bajo los pechos de Alison, ella se sentía un poco incómoda, pues había muchas personas ahí. — James, para... Le decía ella para que se detuviera, no quería que alguien los viera y sus padres se enteraran. Algunos amigos se unieron a ellos, Ali sintió como James se molestaba al no dejar que la tocara de la forma en que lo hacía. — Creo que hice molestar a James. Le dijo Ali a su amiga Marjoure, la chica era mas atrevida de lo que Alison había sido jamás. — Ya te lo dije Ali, si no le das la prueba de que lo amas terminara por dejarte, es solo sexo, no es nada, además siempre debes tener uno de estos amigos, si no lo haces va a dejarte, sabes que varias chicas están enamoradas de James, su familia esta bien posicionada, no es de sociedad, pero su padre gana bien, tiene un buen auto, siempre te invita a comer a lugares decentes, ¿Qué mas quieres? Sigue mi consejo, solo sufrirás un momento el dolor, después se olvida, además parece un caballero, será paciente ya lo verás. Alison le tenía terror a la primera vez, el sexo se decía era muy doloroso, temblaba solo imaginarlo, pero notaba que James cada vez era mas distante, eso le dolía, quizá su amiga tenía razón, debía dejar de ser tan cobarde, él era un buen chico, siempre la invitaba a lugares bonitos a cenar, sus padres la conocían, eran personas amables, pensaba en ello y terminaba triste al solo imaginar que él se cansara de ella, así que decidió después de meditarlo mucho que lo haría, pasaría su primera vez con su novio, lo amaba, y él a ella. — ¿Quieres que te lleve a casa? Pregunto James al ver acercarse a Alison, pero ella se negó. — No, yo quería disculparme, sé que en ocasiones puedo ser un poco insensible, pero quiero que sepas que te amo James, y que.... Dudo un poco, James se lo había pedido en tantas ocasiones que ahora que era ella quien tomaba la iniciativa era extraño. — ¿Te sientes bien? Dime que no bebiste de la botella de Marjoure. Pero Ali se negó. — No claro que no, es solo que, bueno, he pensado mucho en algo que me has pedido, y yo sé que me amas, que no debería dudar, pues siempre estarás para mí, yo solo... James comprendió a donde iba, o al menos eso imaginaba. Se acercó a ella y metió un mechón de su cabello tras la oreja, le dijo en voz baja. — En serio es lo que pienso, ¿Aceptaras estar conmigo? De verdad vas a... Ali sonrió a su novio, aceptaría estar con él, debería dejar de ser tan cobarde y hacerlo de una buena vez, seria como quitar una bendita, entre mas pronto lo hiciera mas rápido dejaría de sufrir por el miedo. — Lamento haber tardado tanto, es solo que me da un poco de miedo todo esto, sabes que jamás yo... bueno lo hice... Alison sentía su rostro arder, pero James tenía una felicidad en el rostro que enseguida la llevo con él a otro lugar. — Bien chicos, nos vamos, Ali y yo tenemos que ir a casa, los veré después. Alison veía a James tan emocionado que estaba feliz, él la amaba, solo quería estar con ella para demostrarle cuanto la amaba, ella respiraba agitada, nerviosa, pero James besaba sus manos, sus labios, la llevaría a un lugar donde pudiesen estar a solas. — Desearía poder llevarte a casa, pero mis padres están ahí, así que iremos a un lugar donde podremos estar solos hermosa, ¿De a cuerdo? Ali asintió, era lo mas apropiado estar a solas. Pero cuando James se alejó de la ciudad ella preguntó hacia donde iban. James le dijo que no estuviese nerviosa, solo no quería que alguien que los conociera los pudiese ver, Ali pudo ver un enorme letrero con luces, Hotel Vidaury, comprendió ahora a donde se dirigían, ella no estaba segura de esto, pero al ver a James tan emocionado no pudo negarse. — Sé que mereces algo mas, y algún día podre dártelo, pero ahora es lo que tenemos, ¿te decepciona? Alison al ver a James preocupado se negó. — No, yo creo que es lo mejor, aquí nadie nos conocerá, si mis padres se enteran me matarían. Dijo ella restándole importancia al hecho de que también estaba nerviosa, sobre todo al entrar al lugar, vio parejas extrañas salir de las habitaciones, mujeres que no parecían estar en buenas condiciones, quizá estaban bebidas, o algo peor. — ¡Si necesitas ayuda avísanos cariño! Grito una de las mujeres al ver pasar el vehículo con la mirada asustada de Alison, James tomo su mano y le dijo que no se preocupara. — Tranquila, son mujeres que buscan clientes, no te preocupes, pediré la mejor habitación, no queremos esos pequeños cubículos. Pero Alison estaba preocupada, había escuchado de las enfermedades de transmisión s****l, si alguno de esos lugares no era higiénico, ahora no sabía si era buena idea estar aquí. — James, ¿Estás seguro que esto estará... bueno, limpio? Él asintió y le confesó a Alison. — Mis amigos vienen aquí con sus parejas, soy el único que jamás lo había visitado, pero piden las habitaciones mas cuidadas, tranquila, nada malo va a suceder. Alison estaba temerosa, pero no podía negarse, le había dicho a James que lo haría, no podía solo decirle que no, él se molestaría y quizá ahora si la dejaría. Cuando entro el auto por una puerta con el número 16 bajo la cortina del estacionamiento, él abrió la puerta de Alison y la ayudo a bajar del auto. — Ven, es arriba en la planta alta. Subieron unas escaleras y al entrar Alison conoció por primera vez una habitación de hotel de paso, lugares que las personas solían utilizar solo para sus encuentros. — Deja tus cosas ahí, ven. Alison dejo su bolso y el móvil sobre una de las mesitas, James la tomo de la mano y la guio hacia la cama, Ali estaba sumamente nerviosa, James la ayudo a tomar asiento y estando frente a ella le dio un poco de alivio con sus palabras. — Si te sientes mal solo dímelo, yo... me detendré. Alison tomo cuanto aire pudo mientras James la recostaba quedando junto a ella, comenzó a besar sus labios, Ali se dejó llevar, temblaba, pero conforme James hacia los besos mas apasionados ella se relajó un poco, sobre todo porque él le había dejado claro que si algo no le agradaba se detendría, no tenía nada que temer, su novio era un caballero. — Dios, no sabes cuanto te deseo Alison. Los besos eran cada vez mas intensos, dejando a Ali sin respiración, las manos de James tocaban el cuerpo de la joven, comenzando a desprenderla de la ropa. Le quito su saco, su top, dejándola en su sostén, los besos continuaban, las manos de James acariciaban con desesperación el cuerpo de la preciosa joven a su lado. Él se quitó la camisa, los pantalones, quedando solo en calzoncillos, Alison fue desprendida de su falda, su sostén todo hasta quedar completamente desnuda ante la mirada llena de deseo de su novio. — Voy a hacerte mía preciosa, esta noche al fin vas a demostrarme que me amas. Alison intentaba cubrirse con la manta, pero James se la quito, deseaba verla acariciarla por completo. James completamente desnudo se posó sobre ella, comenzó a abrirse paso entre las piernas de Alison, ella estaba tan nerviosa que las lágrimas se derramaban, pero intento no sollozar, no quería que James se molestara. De pronto sintió el dolor mas espantoso de su vida, James la penetro con fuerza, sin siquiera medir el dolor que la joven experimentaría. — James por favor, James, Dios, James por favor detente un momento. Pero el joven estaba tan caliente que no pudo atención a las súplicas de su novia, Alison comenzó a llorar del dolor tan punzante y espantoso que aquel joven le provocaba, le había prometido detenerse si ella no soportaba, pero la engaño, fue una mentira para que ella estuviese tranquila. — No me pidas que me detenga, esto es increíble, eres tan estrecha, romperte fue increíble, ahora no pienso detenerme, así que tranquilízate. Alison sentía tanto dolor, deseaba que James saliera de dentro de su cuerpo, pero él estaba moviéndose tan a prisa, con intensidad y fuerza, ella no podía hacer nada, él era mas fuerte que ella, aun que intento alejarse de él, James no la dejo, estaba cegado por la pasión, tanto que ni siquiera se puso un preservativo. — James, necesitas un preservativo, yo no.... James la observo y pensó que era buena idea, se lo puso y cuando Alison intento levantarse para lavarse en la regadera él la recostó de golpe, casi lanzando a su novia de nuevo a la cama. — Tranquila, el dolor pasará. La penetro con fuerza de nuevo, sin pensar que la joven derramaba lágrimas por el dolor y la incomodidad que aún sentía, su primera vez estaba siendo horrible, peor de lo que pensó, siempre imaginas tu primera vez como un momento mágico, pero esto no era nada de lo que pensó, James estaba siendo muy rudo, ella sentía dolor tan fuerte que no podía dejar de llorar. — Alison intentaba respirar profundo para relajarse, pues James definitivamente no seria mas compasivo con ella, pero eso no funcionaba, de pronto James se detuvo de golpe, dejando caer su rostro sobre los pechos de Ali. Ella estaba tan incómoda, solo quería ir a casa, darse un baño y entrar a la cama, James al verla llorando le dijo que era hora de irse, que por ahora había sido suficiente, Alison no disfruto de ese maravilloso placer del que hablan, su primera vez había sido espantosa, tormentosa y llena de dolor, las cosas no eran lo que decían, intenso dolor al principio, pero ella aún lo sentía, su feminidad palpitaba de una manera que incomodaba. — ¿Puedes caminar? Pregunto James, Alison asintió solo con su cabeza, no deseaba hablar, pues su voz se quebraría y no deseaba que James la viera de esa manera. — Tranquila, mañana te sentirás mucho mejor. Decía James a Alison para tranquilizarla, Ali le dedico una media sonrisa, ocultando el dolor que sentía, era como estar sucia, un cúmulo de sensaciones tan extrañas. En el camino Alison estaba seria, James tomo su mano y le agradeció. — Espero que tú también hayas disfrutado de esto, gracias por hacerlo, tenía muchos deseos de ti. Sus palabras eran nobles, pero sus acciones hace unos momentos no coincidían con lo que ahora veía en él. — Sí, fue, lo que esperaba... Dijo Ali mintiendo para que su novio no se sintiera mal, ya que no deseaba que dejara de sonreír como lo hacía ahora mismo. Cuando llegaron a la casa de Alison James la ayudo a bajar del auto, ella se despidió de él solo con su mano, pero James la beso de nuevo con pasión, quizá si Alison no estuviese llorando y adolorida, él habría querido mas sexo esa noche. Alison entro y agradecía que sus padres ya estuviesen en su habitación, fue directo a su regadera, entro sintiendo que el grifo lanzaba agua muy tibia, ella al fin pudo comenzar a llorar con el dolor que su cuerpo sentía, lavo una y otra vez su feminidad, se sentía tan mal, como vería a sus padres a los ojos sin decirles lo que había sucedido, no comprendía por qué había sido tan salvaje James, pudo haber tenido un poco mas de cuidado. Por la mañana su hermana la apresuraba, hoy estaba mas lenta que de costumbre. — Lo siento Anto, me siento un poco mal del estómago, creo que algo me ha caído mal. Su hermana tocó su frente y le dijo que no tenía fiebre, la chica quería ser médico, así que le agradaba cuidar de sus hermanas, ya que tenía dos menores, Alison y Anastasia. — No tienes fiebre, que extraño, le diré a mamá. Alison tomo la mano de su hermana y le pidió no hacerlo, pero Antonella sabia que quizá Ali podría ponerse peor, así que lo hizo, la madre de Alison vino a revisarla y al ver su rostro lleno de dolor comprendió que su hija se sentía mal. — Te quedarás en casa, te llevaré al médico.....