Sander.
— ¡Más!, ¡más rápido!, ¡muévanse!
El grito del entrenador se escucha mientras este corre frente a nosotros, es una bonita tarde con viento y nosotros (el grupo de gammas) entrenando desde hace tres horas, lo cual, puede ser demasiado, sin embargo, como estoy acostumbrado a exigir a mi cuerpo, no siento tanto.
Te estás haciendo del interesante, humanito.
Sean, sal de mi lado, alguna vez.
No estoy en contra.
— Uff, me falta aire.
Resopla una gamma que va a lado de mí, la miro y hago señales de que debemos continuar o nos aumentarán el tiempo de corrida, esta hace un puchero y asiente con la cabeza para continuar corriendo con nosotros.
— ¡Una vuelta más a la manada!
Ordena el entrenador, suspiro de alivio porque por lo menos aguantaré eso, mis demás compañeros están que s
