Adara. Oscuridad… es lo primero que me envuelve, miro hacia atrás, Lexia se ha alejado un poco más, pero, sigue allí, creo haber caminado los diez metros, pero, mi corazón se siente más tranquilo cuando veo a Sander parado frente a mí, esperándome, al verme, sonríe y copio la acción. — Bonita. Se acerca a tomar mis manos y besar mi frente, cierro los ojos respirando profundo, luego siento sus brazos rodearme en un abrazo. — Sander, ¿por qué tenía que venir aquí? — Para evitar miradas curiosas, recuerdo que tú no quieres aún que muchos sepan… de nosotros. — Pero si nosotros no… — Bonita, no lo digas. Me interrumpe alejándose a ver mi rostro, acaricia mi mejilla. — Soy consciente de eso, pero, ya haré algo para remediarlo. Arrugo el entrecejo no entendiendo sus palabras, per