Fui abriendo mi ojos poco a poco mire todo a mi alrededor y me di cuenta que está no era mi habitación mire a todos lados, volví mi vista a la cama y estaba David durmiendo se veía tan lindo que no quise despertarlo. Me dirigí al cuarto de baño, me lave la boca, me enjuague la cara y ya estaba lista. Fui a la puerta la abrí con mucho cuidado para no despertar a David, baje escalón por escalón para no despertar a nadie. Cuando llegue a la cocina estaba una chica más o menos de mi edad y me miro entre asombrada y furiosa.
-Tú quién eres?.- Me pregunto yo me quede helada no sabía que responder y justo cuando iba a hablar apareció Mathias.
-Ella es mi novia Verónica.- Que me está usando para echar a la pelirroja está.
-Mucho gusto Verónica Lazcano.
-Oh por Dios eres Verónica la dueña de la empresa Sexy top Model's, yo no lo puedo creer yo soy tu fan me encanta tu trabajo, de hecho me he inscrito para ver si soy tu siguiente modelo, Pero me han dicho que no te encontrabas.
-Que bien que te guste mi trabajo.
-Dios ni que lo digas me encanta.
-Jajaja que bien y tu cómo te llamas?
-Soy Lucinda Lars.
-Un gusto, bueno yo venía por un vaso de agua.
Me iba a despedir cuando siento que me agarran del brazo y me besan en los labios.
-Espérame en mi oficina cariñó.
-Está bien.
Me salí de allí, él no me ha dicho dónde queda su oficina. Me da igual seguí caminando por todos los alrededores de la casa hasta que encontré una habitación de libros. Una biblioteca. Agarre un libro titulado "La vida". Escuche la puerta abrirse así que coloque el libro en su lugar y gire sobre mis talones.
-Verónica, te puedo explicar lo que pasó allá abajó.
-No te preocupes yo entiendo, lo hiciste para deshacerte de Lucinda.
-Pues veras estuve saliendo con ella un tiempo y es muy superficial para mí. Así que terminamos y no le gusto y ahora aparece en mi casa cuando quiere y yo le dije que tú eras mi novia. Discúlpame.
-No hay problema.
-Sobre el beso...- Lo interrumpí antes de que dijera algo.
-Olvidémoslo.
-Que hay si yo quiero repetirlo.
-Lo siento no acostumbro a besar hombres que no conozco.
-Pero ya te conté todo de mí, que eso no es conocer?.-
-No me refiero a eso, nos conocimos ayer, no llevamos tiempo haciéndolo.
-Entonces nos conoceremos con el tiempo. Cambiando el tema pensaste mi propuesta?
-Si yo... Veras tengo una condición.
-Cuál es?
-Yo me hare cargo de los gastos solo eso. De esto me puedes ayudar
-Trato hecho.
Nos dimos la mano y luego fuimos a desayunar. La señora nos trajo unos panqueques con mermelada y jugo de manzana. En el desayuno se nos unieron Anne y David.
-Como haz dormido David?
-Bien, Grace cuando nos vamos?
-Veras después de desayunar hablare contigo.
Comimos todos callados, creo que este es el desayuno más tranquilo que he tenido en toda mi vida.
-Matt mañana cumple una amiga me dejas ir?.- Pregunto Anne a su hermano.
-Solo si yo te llevo.
-Está bien, es a que Sofía.
-Bien.
Esa fui la única plática que transcurrió en el desayuno. Espere a que David terminara de comer para que habláramos.
-David podemos hablar.
-Claro.
-Veras se lo he contado.
-Qué cosa?
-La verdad a Mathias y se a ofrecido para ayudarnos. ¿Qué te parece?
-Genial.
-Bien, ya puedes subir a ver la tele.
-Gracias Verónica.
Sonreí amo a ese niño sentí que alguien me miraba así que voltee, hay estaba Mathias observándome con una mirada penetrante, si no lo conociera me daría miedo.
-¿En qué piensas?.- Me preguntó.
-Nada en especial.
-Ven quiero mostrarte algo.
-Está bien.
Caminamos juntos hasta el patio de su casa, había muchas plantas, se veía hermoso el paisaje. A lo último había como una casa en un árbol.
-Subamos.
Subimos, era toda de madera, había muebles de colores, fotografías, juguetes y por último una ventana con una vista a todo el vecindario. Era espectacular este lugar
-Qué te parece mi casa del árbol.
-Es bellísima.
Después de conocer toda su casa que debo decir es gigante sin contar el patio que tenía quede asombrada. Me quede pensando mientras miraba el paisaje en el hombre que me está ayudando a salir de este problema.
"Mathias, alto, tez blanca, ojos azules, labios provocativos, cabello castaño". Que hombre más guapo creo que... me estoy enamor....
-Verónica... ¡Hey! Me estas escuchando.- escuchaba que su voz me llamaba a lo lejos así que tuve que salir de mi ensoñación con él, 'Si Supiera', pensé.
-Disculpa, es solo que me quede pensando en todo lo que he vivido hasta hoy, gracias a dios encontré un hombre como tu.- le dije con una sonrisa.
-Como yo?- Se me quedo mirando.
-Si como tú, amable, bondadoso, inteligente...- "Guapo y para más soltero" pensé.
-Gracias.- Sonrió.- Sabes ya que te quedaras a vivir un tiempo con nosotros. Necesitas comprar cosas para ti y David... no lo sé ropa y cosas que necesites.
-Si lo sé. Tengo que llamar a Scarlett para que me traiga dinero. No quiero mover yo mis cuentas no vaya a ser que este monitoreando las cuentas.-
-Bien, ya va siendo hora de cenar. Que te parece si entramos ya está haciendo frío acá afuera.- Desde que salimos no me había dado cuenta del tiempo que estuvimos afuera.
Después de haber cenado me dispuse hablar con Anne sobre lo que me dijo Mathias, sobre comprarme ropa para mí y David y lo que necesitemos.
-Anne, disculpa sé que saldrás pero quería preguntarte... si no es mucha molestia... que me acompañes al centro comercial a mí y a David.- se me quedo viendo y luego dejo escapar una sonrisa.
-Claro, me encantaría acompañarte, lamento quedarme así es que tú eres Verónica Lazcano y me estas pidiendo a mí que te acompañe a ir de compras.- Salto emocionada riendo, me eche a reír con ella.
-No soy pretenciosa, ni superficial como dicen las revistas, es solo una imagen que hacen ver de mí para venderlas y hacer que las mujeres sean así.
-Bueno, mañana a las 10:00am te parece. Le podemos decir a Mathias que nos preste su chófer o el auto y tú conduces.
-Claro, como quieras. Buenas noches a todos.
°
Me desperté por unos rayos de sol que se colaban por la ventana. Baje a desayunar y solo me encontré con Anne y David, Mathias no se encontraba qué raro; pensé.
-Buenos días.- Dije dándole un beso a David y sonriéndole a Anne.
-Buenos días, vero.- Me respondieron los dos al mismo tiempo, sonreí y me senté al frente de David. Lo observe por un momento ya no se notaba tan delgado como hace unas semanas atrás. Se veía espléndido con esos ojos verdes y su cabello brillando y una hermosa sonrisa adornando su hermoso rostro.
Comíamos sin apuros y cada uno en sus pensamientos, hasta que vi en el umbral de la puerta a Mathias solo con un pantalón de pijama de cuadros, se veía tan bello con su dorso descubierto, me quede embelesada observándolo; dios ese hombre estaba mejor que cualquier modelo que he usado en mis revistas. Parecía un dios griego y recién levantado se veía más hermoso con su cabello revuelto y unas pequeñas marcas de la almohada y eso labios tan carnosos me provocaba....
-Buenos días.- si no es por que escuche su voz, no fuera salido de mi burbuja soñadora, camino frotándose los ojos y se sentó justo a mi lado.
-Buenos días.- Respondimos todos.
-Sra.Mary, ya puede servirme el desayunó.- espero paciente, hasta que la señora le puso el plato en la mesa.- Gracias.
-De nada señor Mathias.- Contesto la humilde señora.
Todos en esta casa le tenían un respetó impresionante a Mathias, debe ser un buen jefe y muy estricto. Trate de no voltear a verlo muy seguido si no se daría cuenta de cómo me lo comía con la mirada me concentre en mi platillo que consistía en unas tostadas, tocino y huevo frito con un jugo de naranja recién exprimido. Terminamos el desayuno sin nada que decir simplemente decíamos lo necesario hasta que Anne empezó a preguntarle cosas a su hermano.
-Matt, nos puedes prestar tu auto?.- Pregunto Anne sonriente, pero al ver la cara que puso su hermano dejo de sonreír.
-No recuerdas la última vez que lo hice cierto.- ello lo miro y luego agacho la cabeza algo avergonzada.- Bien lo supuse, sabes que tienes un chofer él puede llevarte a donde quieras.
-Está bien, solo iré de compras con Vero y David.- le dijo y salió de la cocina a su cuarto como rayo.
-Así que irán de compras con Anne?.- me pregunto Matt.
-Si... bueno iremos a comprar algunas cosas es solo eso.- le conteste levantándome.- David ve arreglarte tu también vienes.
-Bueno David si hay algo más malo en la vida es acompañar a una mujer a ir de compras que no se te olvide campeón.- se levantó le paso la mano por la cabeza a David y me dio un beso en la mejilla.- Adiós, y diviértanse.
Sonreí ese hombre era encantador... creo que poco a poco me iba enamorando... ... de... el.
David se fue arreglar y yo hice lo mismo no quería pasar mucho tiempo comprando me daba miedo un poco salir a lugares públicos.
°
Si antes de salir de la casa de Mathias me hubieran dicho que salir con Anne de compras iba hacer lo más estresante que he hecho en mi vida, me hubiera reído en su cara, comprar ropa siempre fue ir y comprar lo que sea que me gustase y para atrás. Pero ahora que lo estoy viviendo con Anne pienso que voy a morir en cualquier momento ella es demasiado indecisa y eso que solo hemos estado en tiendas de niños. Teníamos dos horas en el centro comercial y nada más le hemos comprado a David 3 pares de zapatos, unas pantuflas para andar en casa, y ropa para salir y también para estar en casa y una pijamas que me encantaron; una era de cuadros roja, otra azul de carros y la última de animales.
Anne no me dejaba entrar a ninguna tienda porque y que no había ropa linda en ellas. Para mí la ropa son solo trapos que deben taparte lo esencial, pero para ella parece que no, sacaba muchos peros.
-Anne, por favor entremos a esa tienda y compremos solo unas mudas de ropa y ya está.- le dije a modo de súplica.
-Mira allá esta la tienda que quería mostrarte y allí podremos comprar todo lo que necesites de una vez y nos vamos ¿Qué te parece?.- Me dijo ignorando mi comentario de hace un rato. Suspire y tome a David de la mano, ella se encargó de decirle al chófer de que llevara las cosas al auto y nos esperara allí que no tardaríamos mucho, "pobre de el" pensé estará un largo rato esperando sentado allí.
Entramos a la tienda y David salió corriendo a sentarse a jugar con el teléfono que Anne le había prestado.
Empezamos a ver toda la ropa, zapatos, accesorios y otras cosas. Hasta que empecé a medirme unos vestidos, mientras yo los escogía colores claros, Anne me loa pasaba colores oscuros y me mostró muchos rojos, creo que ese es su color favorito en la ropa. Luego me medí unos conjuntos de falda y otros con jeans, unas bragas largas como también unas cortas que me pasaba Anne, elegí una pijama larga que era de nubes y se la pase a la chica que iba poniendo todo en el mostrador, también le dije la talla de los zapatos que quería, junto con los accesorios.
-Vero que te parece esta?.- Anne me mostró un pijama demasiado corta para mi gusto pero linda.
-¿Es para ti? Está muy bonita.- le conteste sonriendo.
-Bien menos mal que te gusta porque es para ti.- se la entregó a la chica y me jalo del brazo a la parte de lencería.
-Anne ese pijama es demasiado corto para mí, ¿Que pensaran en tu casa? .- le hice ver.
-Nada mi hermano le encantaran saber que su novia se vista atrevida para el ahora anda vamos a elegir la ropa íntima.
Me quede pensando Anne pensaba que yo era novia de su hermano, después debería que hablar con Mathias.
Anne me pasaba solo conjuntos de encajes que si rojos, negros, vino tintó. Mientras que yo escogía colores claros que si blanco, rosa, lila, azul, verde y otros colores pasteles.
-No lo entiendo verónica, eres una mujer demasiado atractiva, porque no te gustaría usar uno de estos y así sorprendes a mi hermano.- me guiño un ojo y sonrió, bien yo sabía que era una mujer atractiva, de un buen físico ya que pasaba la mitad de mis horas del día haciendo ejercicio, con algunos modelos que trabajan para mí, pero no me gustaba andar exhibiendo mi cuerpo en revistas o ha cualquier hombre, debería dar el ejemplo como dueña y jefa de la empresa Sexy top Model's.
-Gracias por tus halagos, pero no lo sé ... ... nunca me ha gustado exhibir mi cuerpo, y dado que trabajo con modelos tengo que dar el ejemplo, paso la mayoría del tiempo haciendo ejercicio. Nunca me interesó formar parte de ese vínculo vestir ropa atrevida, o soy más sencilla, me conformo con diseñar la ropa, claro hay veces que me usan como modelo cuando no puede participar alguna chica, pero me ponen peluca no me gustaría que dijeran que ahora seré modelo, solo me encanta diseñar.- me sentí bien al hablar con Anne acerca de mi vida.
-Vaya nunca pensé de esa forma, aunque algún día querrás sorprender algún hombre con uno de estos, así que te lo llevas.- me dijo y luego agrego.- y espero que sea con mi hermano.
Sonreí negando con la cabeza esa chica era única. Después de comprar todo lo que pensamos sería necesario para nuestra estadía en la casa de los hermanos Gozzo, nos marchamos a su casa. Cuando llegamos aquella mansión ya era de noche, bajamos todas las cosas con ayuda del chófer. Después de que cada uno acomodara sus cosas en su cuarto, fuimos a cenar. La cena transcurrió callada hasta que Mathias empezó a preguntarnos.
-¿Cómo fue su día? .- dijo.
-Bien.- respondimos todos con el ánimo por los suelos estábamos agotados.
-Supongo que están muy cansados.- Nos dijo Mathias.
-Si.- Volvimos a responder los tres.
Ninguno volvimos a hablar, estábamos demasiado cansados, la cena fue callada. Terminamos de cenar y cada uno se fue a su recámara a descansar.