«Me está besando, me está besando» pienso una y otra vez. Reacciono ante mis latidos acelerados y alzo mi rodilla hacia su entrepierna. ¡¿Cómo se atreve?! Golpeo levemente tal y como me enseñó Carter en caso de que él no pudiera defenderme de un depredador y solo busque neutralizarlo para correr. Actúo por inercia y cuando golpeo mi rodilla con su mojada entrepierna él se aparta de mí para gruñir de dolor. ─¡¿Por qué hiciste eso?! ─Exclama cubriéndose la entrepierna y recostándose de la pared de ducha mientras hace un mohín de dolor. Lanzo la toalla hacia él para no ver su desnudez. Trago con dificultad y me siento un poco culpable, pero no tanto. Es algo que puedo superar rápidamente. ─¡No me vuelvas a besar! ─Grito señalándole con mi dedo y salgo de la ducha toda empapada, quizás en