-Señorita Makis… Susurró sorprendido, al verla entrar en su despacho. -Señor Dermoth, como sabe, Lidia ha pedido la tarde libre, y me gustaría saber si tiene alguna cita pendiente o algo que desee que haga en su lugar. La observó, como si llevara meses sin verla. Estaba hermosa, como siempre, con un traje de dos piezas y unos pantalones negros, ajustados, absolutamente favorecedores. -Acércate, por favor Pidió con cautela, estaba demasiado lejos, y no conseguía ver sus ojos. Nerviosa, Caroline se acercó hasta su escritorio, estaba muy apuesto con su traje azul marino, a juego con una camisa y corbata negras. A penas la tuvo lo suficientemente cerca, abrió uno de sus cajones y de él sustrajo una caja, y la puso frente a ella. -Quiero que lo uses, no puedes seguir sin celular, es imp