-¿Caroline? ¿Estás allí? –preguntó al no oír respuesta. -Sí, lo siento Bianca ¿me decías? -Nada importante, yo me encargo de la reserva de mañana, te envío un mail con los detalles, y no olvides pensar en mi invitación -Claro, gracias -Nos vemos mañana, buen viaje -Adiós. -¿Está lista para ver el contrato, señorita Makis? –preguntó Collin, apoyado en el umbral de la sala, observándola fijamente. -Cuando guste. Trabajaron una hora completa en el dichoso contrato. Para finalizar, Caroline le dio los datos del hotel, y la reserva. -Desde aquí me encargo yo, gracias, señorita Makis -Me retiro, buen viaje, señor -Igualmente. Así de frío sería de hoy en adelante, no podía dejar de culparse, ella era la única responsable de la situación, y no le quedaba más que resignarse a ello. La