—Hola Davis, cómo va todo en la empresa?— Pregunte mediante la video llamada aunque tenía con el.
—Jade no te has ido bien ni 24 horas y ya estás preocupada?— Respondió Davis.
—Es mi empresa te recuerdo, debo preocuparme—
—Por cierto yo estoy mal, estoy sufriendo porque me dejaste—
—Davis no quiero hablar de lo nuestro, eso es cosa del pasado para mi—
—No sabes mentir Jade, llevamos cinco años de relación, me has amado tanto como yo a ti—
—Davis, tú no amas a nadie… Si de verdad me amaras hace mucho me hubieras pedido matrimonio y yo sería la única mujer que estuviera en tu cama, es imperdonable lo que me hiciste—
—Jade por favor, te pido que a tu regreso hablemos, se que lo hice muy mal pero en serio te amo—
—Davis por el bienestar de manos dejemos las cosas cómo están—
Tuve que colgar la video llamada con Davis, de tanta insististe sentía que me ahogaba, realmente su engaño me ha dolido, fueron cinco años donde le fui fiel, siempre pensé que nos casaríamos, que tendríamos hijos y que íbamos a ser una familia feliz.
Mientras me inundaba en mis pensamientos mi padre tocó la puerta de mi habitación lo cual me hizo reaccionar.
—Hija puedo pasar?— Preguntó mi padre.
—Si padre, pasa por favor— Le respondí.
—Iré junto a Regina a las cosechas de los frutos Para ver cómo va todo, te gustaría venir?— Preguntó mi padre mientras me extendía la mano.
—Por supuesto que si padre, me encantaría ver todo lo que tienes—
Salí de la habitación con mi padre, él realmente me hacía feliz y sin duda alguna era el amor de mi vida…
Para llegar a las cosechas debíamos de ir en vehículo ya que aunque estaba dentro de la misma propiedad estaba retirado de la casa principal.
Al entrar al vehículo no podía creer quien manejaba, era el indeseable de Luka… solo lo miré pero no dije una sola palabra, no me gustaba su presencia.
Después de unos minutos llegamos a las cosechas y realmente fue sorprendente para mi.
—Este año la cosecha será la mejor— Dijo mi padre mientras observaba a su alrededores.
—Padre esto es impresionante, de verdad que esto es hermoso—
—Lo es Jade, cada año nos deleitamos cosechando— Dijo Regina mientras ponía sus manos sobre mis hombros.
—Es precioso— Respondí.
Regina y mi padre se alejaron para observar algunas otras cosechas, Luka se acercó a mi en forma de burla.
—Algo nuevo para la señorita de la ciudad— Dijo Luka con sarcasmos y risas.
—Quien te pidió que me dirigieras la palabra?— Pregunté muy seria.
—Todo el que vive en la ciudad pierde el carisma, siempre está enojado—
—Luka no me interesa hacerte reír ni a ti ni a nadie—
—Tampoco espero que lo hagas Jade—
—Deja de estar metiéndote donde no te llaman y dime para cuando estarán estas siembras?—
—Bueno las manzanas estarán para para dentro de dos meses calculamos ta tienen casi cinco años desde que fue implantada—
—Wao! No sabia que tardaban tanto—
—Pues ya lo sabes, necesitaremos muchas manos para cosechar este año porque será bastante buena—
—Yo quiero ayudar— Le respondí con una sonrisa.
—Vaya!!! Pero si sonríes!— Dijo Luka con sarcasmo.
—Que te importa, sigue hablándome de los frutos?—
—Está bien! Las fresas estarán al mismo tiempo, las mandarinas y Cerezas también, por eso dije que necesitaremos muchas manos—
—Entiendo, creo que la pasaré bien aquí este verano— Le respondí a Luka mientras sonreía.
—Espero que si— Respondió Luka.
—Te agradezco que hayas tenido la amabilidad de explicarme sobre estos frutos—
—Es un placer! por cierto esta noche habrá un pequeño festival del fruto rojo, habrá mucha degustación, deseas ir?—
—Suena muy interesante, cómo llego allá?— Pregunté.
—Yo te llevo si quieres? Siempre me ha gustado ir—Dijo Luka.
—Bueno como ya casi no recuerdo nada de aquí no te diré que no, a qué hora debo de estar lista?—
—A las 8 te esperaré en la sala—
—Está bien, te agradezco de ante mano— Le dije mientras caminaba hacia mi padre y Regina.
Después de estar por varias horas viendo las cosechas, regresamos a la hacienda… Tan rápido como llegué subí a mi habitación para ver que podía ponerme y me di cuenta que no podía ir con ello que tenía así que sin pensarlo fui a casa de Katia para que me ayudara.
—Hola Katia, cómo estás?— Le pregunté mientras entraba a su casa.
—Todo bien Jade, te veo preocupada, que te pasa?— Preguntó Katia.
—Luka me llevará al festival del fruto rojo pero no traje nada que ponerme para ese tipo de evento, me llama de compra?—
—Luka te llevará? Eso si que es extraño—
—Solo lo hará porque ya no tengo idea de lo que se hará aquí, ademas sigo pensando que es un arrogante—
—Está bien, vámonos de compra—
Fui con Katia a algunas tiendas, no era lo que esperaba pero en realidad iba a conseguir lo que vestían las personas del pueblo…
—Se que no es lo que compras en la ciudad pero te quedará todo muy bien— Dijo Katia.
—Gracias, en realidad debí decir que me siento extraña pero deberé de acostumbrarme por el tiempo que estaré aquí—
Después de comprar regresé a la hacienda para arreglarme y poder estar acta para el festival del fruto rojo, quería ver cómo era, me parecía interesante.
Llegada la hora ya estaba lista, bajé las escaleras y Luka esperaba por mi tal como lo dijo a las 8 en punto.
—Estás muy bonita—Expresó Luka con un poco de sorpresa.
—Muchas Gracias— Le respondí ruborizada.
Luka y yo nos fuimos al festival…