Habían entrado en casa sin hacer ruido, yendo directo a la habitación de Lucas. El acomodó las cosas de Helen como si nada pasara, ella por su parte se mantenía de pie al lado de la cama mientras él caminaba de un lado a otro organizando las cosas que ella había comprado esa tarde.
-Debes estar cansada, siéntate. - Helen se sentó en una esquina de la cama mientras Lucas le retiraba los zapatos. - ¿Por qué no tomas un baño y te pones una ropa más cómoda? Esos vestidos floreados que compraste te deben de quedar espectacularmente bellos.
-¿No vas a decir nada? - Despues de aquello en el coche, Lucas no había vuelto hablar sobre el tema, pero en su rostro ella podía ver que algo él estaba tramando, algo feo se avecinaba.
-No, tú trata de descansar. Hoy cenaremos en la habitación, si no t
