El inicio
Mire a mi alrededor, todos los árboles moviéndose con el viento, la oscura noche solo un poco iluminada por la luna, que estaba tapada por la nubes.
«—Alyssa–» miré a todas partes sin encontrar rastros de alguien, o mejor dicho de un lobo
—Qué mierda quieres Luke?– gruñí molesta, aunque susurra me iba a escuchar. Podía intuir que estaba molesto, él odiaba que estuviera a esta hora por el bosque aunque esta manada es una de las más fuertes y seguramente no me iba a pasar nada, escuche una rama partirse, me gire rápidamente para encontrarme con un gran lobo gris, suspiré pesadamente reflejando mi molestia.
—eres un idiota, solo quería tomar aire– le reproché de mala gana.
«—y yo te he dicho, que no puedes estar a esta hora en el bosque–» dijo en el mismo tono que yo, no pude evitar que todo mi cuerpo se llenara de una ira, era consciente de lo que pensaba: Que era una humana débil. Hasta lo había dicho en voz alta, solo que lo niega.
Mire una vez más a esos ojos verdes sobrenaturales y sin decirle nada camine a paso rápido hasta la casa, era obvio que me seguía, sus pasos retumbaban haciendo vibrar el suelo. Llegamos a la manada, todas las calles estaban bastante movidas y alumbradas «una noche común dentro de una manada.» llegue hasta la casa y cerré de un portazo, seguramente le habia cerrado la puerta en la cara a Luke, pero a este punto no me importaba mucho.
—¿Alyssa?– Esa voz femenina, que me llamaba, no me gire para ver a Rose. No estaba de humor para que defendiera a Luke.
—Estoy bien, tranquila– sono brusco, pero solo seguí mi camino a mi habitación en el segundo piso. Por una parte no quería preguntas de Rose, y por otra no quería que Luke me pudiera interceptar antes de llegar a mi cuarto. A veces tener una familia de lobos no es fácil, ni es lo mejor de el mundo, se creen superiores «aunque sé que lo son» creo que es obvio que son MUY protectores, suspiré «son mi familia» me tiré a la cama, cerré los ojos cansada, me habia pasado todo el día peleando con Rose, y después esto con Luke era insoportable, a veces vivir en esta casa como humana eran muy agobiante más de lo normal, «Aunque no hablemos de normalidad, porque es algo que le falta a mundo entero.» No era la única humana en la manada, pero si la única humana que no estaba aquí por un mate, si no que vine aquí porque mis papás me adoptaron «o mejor dicho, me recogieron en el medio de el bosque» así que en cierto caso, no tengo a nadie con quién hablar de esto y seguramente si la tuviera no lo hiciera, extraño a mamá y a papá, mis pensamientos fueron interrumpidos por los golpes en la puerta amenazando que seguramente se iba a caer de lo fuerte que le estaban pegando, no me moleste ni en abrir un ojo.
—No Luke, no– hable sin cuidado, tiene oído sobrehumano así que sabía que me había escuchado, escuché pasos alejarse «no se había rendido, eso era bastante obvio», me arrope y deje ir toda esa ira para caer en el sueño.
—Maldita alarma–susurré inconsciente, odio tener que despertarme temprano para ir a clases «si fuera como ellos, seguramente no tuviera que despertarme tan temprano» ya que todos quisieron que tuviera una vida de humana lo más normal «"normal"» posible, aunque teniendo en cuenta que toda mi familia es hombre-lobos creo que eso es bastante difícil de lograr, y también porque según ellos ir a la escuela de la manada es muy peligroso para mí, me termine levantando con todo el mal humor de la mañana, entre al baño, mi cabello rojizo cobre estaba todo enmarañado y tenía la palidez de recién despierta, me despoje de toda mi ropa y entre a una ducha de agua caliente.
—¿Alyssa?– escuché la voz de Luke tras la puerta, lo escuchaba dolido, pero ya me había acostumbrado tanto que no me pesaba, y el solo lo hacía para chantajearme, rodé los ojos.
—Voy sola, gracias.– le avisé bruscamente, salí de mi ducha bastante corta pero relajante y me cepille los dientes, escuche como la cama chillo, así que entre al vestidor por la puerta de el baño, me puse el uniforme «que cabe recalcar me queda horrible» y era de esperarse, solo a algunas les queda bien esa ropa de porquería, salí y como me lo esperaba ahí estaba Luke sentado en mi cama, nunca aceptaba un no como respuesta de mi parte, agarre mi mochila pasando de él por completo, salí de mi habitación, caminé hasta la cocina sin prestarle mucha atención a Luke que me seguía agarre una manzana y camine hasta la salida.
—Alys.– volvió a insistir Luke, y lo volví a ignorar, salí de la casa, no había rastros de Rose por ninguna parte, ni de mamá y papá.
—Mierda– susurré deteniéndose en seco, aunque no servía de nada, Luke seguramente me había escuchado.
—Tu cabello tiene vida propia– canturreo tras de mí divertido al darse cuenta, me giré y lo mire mal —¿Hasta cuando Alys?– su voz sonó cansada, odiaba tanto que intentara hacerse la víctima para hacerme sentir mal, solo negué con la cabeza de mala gana y me giré, me acomode un poco el cabello con las manos «voy a llegar tarde» me volví a girar hacia Luke, tal vez aprovecharme del momento no iba a estar mal.
—¿Me puedes llevar?–dije lo más seria que pude, el solo sonrió «idiota» lo habia dejado ganar sin darme cuenta.
Ya en el auto, velozmente me puse el cinturón sintiendo como el auto arrancaba haciéndome impactar hacia atrás «a él no le afecta si chocamos» no se como puede manejar tan mal «lo más probable es que muera a manos de algún hombre lobo, por como maneja»
—Alyss– volvió a llamarme insistiendo, esta vez si lo mire, sus ojos verdes eran lo que más me impactan hasta el día de hoy. —¿Hasta cuando?– pregunto, pero esta vez de mala gana. Me recosté de el asiento, ya que era imposible estar un poco derecha por la velocidad en la que va este auto de porquería
—Hasta que dejes de tratarme como una humana débil– dije secamente, freno de repente haciendo que mi cuerpo fuera hacia adelante «si no fuera por este cinturón seguro estaría muerta» le iba a reprochar pero sabía que me iba a ver cómo alguien débil y no le voy a dar el gusto, me gire hacia el indignada, el cinturón me había dejado sin aire, y un moretón seguro.
—Perdón– susurró refiriéndose a como freno, me saque el cinturón de mala gana, se disculpaba por casi matarme pero no por lo que en realidad me molestaba agarre mis cosas y salí de el auto sin decirle una palabra «no me va a dejar tranquila hasta que le vuelva a hablar» lo conozco bastante bien, es mi hermano.
.
—¡Alyse!–escuché el chillido de la linda pelinegra, no pude evitar estremecerme ante ese nombre.
—LIN AMOR– chille igual que ella, ignorando por completo ese nombre, me acerque hasta quedar frente a ella.
—uff, tu hermano está como quiere– comentó mirando hacia atrás de mi, mi volteé y ahí seguía en su carro mirándome fijamente, le negué con la cabeza.
—es triste que está prohibido, y ignoralo–dije rápidamente volviendo a ella, al ver como el carro se iba a toda velocidad, la agarré del brazo y arrastrándome hasta la entrada, íbamos a llegar tarde a las clases.
—¡ADIVINA QUIÉN TIENE UNA BECA!– escuché decir a alguien detrás de mi, me detuve junto a Lin, me giré rápidamente para encontrarme con esa cabellera rubia
—¡FELICITACIONES!– chille y me lancé hacia Lincon, sentí sus brazos alrededor de mi dándome calor y apachurrandome.
—Eh, parejita, me dan asco– reí al igual que Lincon, por el comentario de Lin, me separé de Lincon y deje que Lin lo abrazara, Lincon es el gemelo de Lin y mi mejor amigo
—Ahora solo faltas tú Alys– comentó Lin mirándome acusatoriamente, , mire a Linc, que asintió en apoyo a Lindsay —¡Vamos a vivir juntos en otro país Alyssa!–chillo Lin, solo hice una mueca «creo que eso no va a hacer posible», los chicos me miraron sorprendidos
—¿No vas..?–dijo Linc en un tono bajo, negué con la cabeza
—no obtuve la beca, y ya no hay lugar–dije tratando de sonar triste, si había obtenido la beca, aunque ni siquiera se porque me postule, seguro estaba molesta con Luke, el problema es que yo sé desde que comencé en esta escuela y desde que inventamos los planes de irnos era que yo no iba a ir, porque vivo con una familia de hombres lobos que seguramente se cambiarían de manada solo por mi, y no quiero ser una carga para ellos y menos hacerlos cambiar de manada, país, ciudad y clima solo porque yo quiero ir a una universidad con los chicos.
—¡No puede ser Aly!.–escuche la tristeza de Lin en su voz, solo me encogí de hombros restándole importancia para que no se pusieran mal por mi.
—Vamos, se nos hace tarde, luego hablaremos de el tema– dije cambiando de tema, pero eso era lo que me gustaba de ellos, esto nunca se tornó incomodo , ellos solo asintieron y caminaron a mi lado, no quería hablar de esto ahora, y para ser sinceras sigo molesta con Luke aunque el no esté aquí, llegamos hasta el salón sin decir ni una palabra entramos los tres.
Ya habían varios chicos y chicas hablando, me senté en mi lugar y Lin a mi lado
—Dime que no es cierto– dijo rápidamente girándose hacia mi.
—No, Lin, no es verdad, es que tengo un novio vampiro en medio de el bosque y nos vamos a casar, es el amor de mi vida, por eso no voy a la universidad de mis sueños– dije tranquilamente, sentí como me daba un golpe en el hombro
—idota– susurró.
—te escuche– dije mirándola, ella solo sonrió victoriosa.
—esa era la idea– dijo entre dientes, escuché como se cerraba la puerta mire hacia al frente para ver al profesor, con una chica al lado «mierda» la mire fijamente, y al parecer ella sintió mi mirada porque su mirada conectó con la mia y solo me sonrió era bastante intimidante, pero solo le guiñe un ojo.
—chicos buenos días, ella es Michelle Montgomery, es nueva por aquí así que espero que la traten bien–dijo presentándola el profesor, yo seguía mirándola, había algo en ella que se me hace bastante familiar «tal vez ya la edad de 17 años me este afectando» puede ser, deje de escuchar al profesor y me puse a hacer garabatos en el cuaderno.
—Aly– escuche como me llamaba Lin, me giré hacia ella prestandole atención ella odiaba que no la viera a los ojos cuando me llamaba
—¿Que?– le pregunté, aunque era obvio lo que quería.
—¿Me pasas la tarea?–dijo lo más tierna que puede y me sonrió, me giré y saque el cuaderno de el bolso y se lo entregue.
—parafrasealo–le susurré, el profesor nos vio sobre su libro desde su escritorio, pero el volvio a poner su atención a su libro, ella asintió y me dio un beso en la frente como agradecimiento «no se como podemos ser tan amigas» negué divertida y seguí haciendo garabatos en el cuaderno, seguramente el profesor está haciendo lo mismo, ya que el nunca nos da clase, solo nos manda tarea, luego de una hora escuché como el timbre que indicaba el descanso, la mesa se movió bruscamente, haciendo que rayara el cuaderno con mis garabatos.
—ey, ten cuidado idiota– dijo furiosa Lin a mi lado, seguro le habia pasado lo mismo con la tarea que estaba copiando, mire hacia el frente y vi a la chica nueva saliendo rápidamente
—¿Me puedo sentir sola si tengo gente a mi alrededor?–me giré hacia Lin para ver qué me respondía ignorando el altercado minutos antes, ella me miró sorprendida. Casi la mitad de mi vida me había sentido así, estando con los chicos, ellos corriendo a toda velocidad y yo jugando con tierra.
—me encanta tu don de preguntar cosas random– dijo divertida y se giró hacia mi. —A tu pregunta, si, puedes hacerlo, el punto es no hundirte en la soledad, aunque es buena a veces recuerda que todo en exceso es malo– me recordó, yo solo asentí y me levanté agarrando mis cosas, ella hizo lo mismo guardando mi cuaderno.
—¿Y si algún día me hundo en ella?– le pregunté cuando ambas ya estábamos en el pasillo saliendo
—recuerdame estudiar psicología para ti, si un día te hundes en ella, grita, pide ayuda, no te conformes, no te quedes en un hueco oscuro, busca la luz, y recuerda que aunque dejemos de hablar voy a estar aquí para ti para ayudarte en todo–dijo apoyándome, yo solo asentí
—dudo que nos dejemos de hablar–dije divertida, ella empezó a caminar dejándome atrás.
—eso espero Alyssa, quiero que seas una persona en mi vida permanente, no una pasajera– susurro esperanzada, llegue hasta su lado.
—AWW es lo más tierno que me has dicho desde que te conocí– chille, recibí un golpe en mi hombro de su parte y una risita, salimos del salón, Linc seguramente ya salió con sus amigos.
Llegamos hasta el patio de la escuela entre empujones y risas de parte de ambas, llegamos al gran patio verde para encontrarnos con un círculo de gente.
—¿Vamos a ver?–me preguntó Lin, negué con la cabeza odiaba los revueltos entre humanos, caminamos directo a las gradas que daban al campo de entrenamiento —traje pan con chocolate ¿Y tu?– me preguntó mientras nos sentábamos «mierda» aunque suene asqueroso, el pan con chocolate de su mamá era algo realmente delicioso.
—Nada, salí de la casa tarde y molesta–dije mirándola, ella solo asintió entendiendo y me tendió la mitad de su sanduche.
—gracias– dije y empecé a comer el pan con chocolate —tu familia si que es rara– dije al terminar de comer el sandwich.
—Si nos ponemos a hablar de rareza, tu familia supera a todo el pueblo.– dijo mientras terminaba el último bocado de pan «nadie en este pueblo conocía a mis papás, y eso les parecía raro teniendo en cuenta que es un pueblo pequeño».
—Por eso somos tan amigas– comenté sin mucha importancia, ella solo asintió, luego de 10 minutos Lin fue a su clase y mientras a mi me tocaba esperar para mí clase, llegue a mi casillero.
—Quien iba a pensar que la chica nueva iba a llegar peleando– escuché a unos chicos que pasaban detrás de mí «creo que era de esperarse» abrí mi casillero sin prestarle mucha atención a toda la gente a mi alrededor, lo cerré y me giré miré a la chica nueva caminando, se le notaba la molestia.
—las cosas no funcionan así aquí.– Le dije bastante fuerte y amenazante, vi como se giro rápidamente hacia mí, sus ojos estaban llenos de furia camino a paso rápido hasta mi «pero no inhumano» sentí todo en cámara lenta, de como ella me agarraba con sus pequeñas pero fuertes manos por el cuello y me alzaba, solo le sonreí
—que linda mujer lobo, que idiota mujer lobo—canturree con el poco aire que me quedaba, ella solo me miró sorprendida y me soltó dejándome caer al suelo, agarre todo el aire que me hacía falta
—¿Qu...?– no terminó la frase porque la interrumpieron.
—SEÑORITA MICHELLE Y ALYSSA A DIRECCIÓN YA– escuché el grito de el profesor de química, yo solo le sonreí burlona a Michelle
—que idiota mujer lobo–dije burlonamente y le guiñe un ojo, su rostro mostro su miedo.
―¿Caza..― negué antes de que terminara la pregunta, y camine hasta el profesor de química que nos esperaba, dejando a la chica con la duda.