Edward despertó sobresaltado, como si hubiera tenido una terrible pesadilla. Todo estaba oscuro y en silencio, solo se escuchaba su respiración agitada. Entonces, Edward recordó. Había visto a Lucy? "Lucy?" "Lucy?" Edward quitó las sábanas de su cuerpo para levantarse y buscar a la escurridiza chica. El confundido hombre estaba seguro de que había estado con ella esa noche. Primero habían charlaron como antes, pero después la pasión desesperada por ella lo había consumido. Justo como lo habían hecho muchas veces antes, cuando eran novios. Edward recorrió todo el departamento, pero solo encontró el pequeño paquete en la mesa. El aroma del perfume característico de Lucy aún se podía oler ligeramente en el ambiente. Tomando el paquete con su mano, Edward se dispuso a abrirlo. Den