La casa de los sueños blancos

las migajas de pan

Finalmente me pude sentir muchos más tranquilo. Fui hasta mi habitación y comencé a revisar todas mis cosas. Para asegurarme de que todo estaba bien.

Mi teléfono estaba descargado y a la vez húmedo no sabía qué hacer lo metí en arroz para que no se dañará lo seque un poco con la secadora de cabello lo sé que hice muchas cosas.

Y a las 3 horas pudo prender. Tenía muchos mensajes de parte de la abuela Karina preguntándome dónde estaba. E incluso de Mariana.

Pero el mensaje que más destacó entre todos era el de mi tío el que estaba en Canadá. Me respondió y dijo que dentro de 15 días venía. Hacia Venezuela. Dijo que quería hablar algo muy importante conmigo Que tal vez me iba a gustar Yo me alegré mucho le respondí diciendo que había pasado por un momento difícil pero que estaba bien.

Me acosté en mi cama y no me alegré tanto como ese día de verdad todo lo que pase fue sumamente extraño todo esos sueños se sintieron muy reales.

Pero una de las cosas que dije en el sueño si era real. Son las poses que oigo cuando a veces tú durmiendo. Ay, días en los cuales oigo a mamá.

Cómo si estuviese llorando. Preocupada por mí oigo ruido de,personas como si estuvieras en un hospital.

Hoy que tocaron la puerta y era la voz de Mariana. Dijo que si podía pasar y le dije que sí traía da una bandeja con una sopa y dos pedazos de pan.

—aquí te mando la abuela Dominga , dijo que te comerás esto para que no te resfríes.

—cómo saber abuela Dominga que yo llevé un poco de agua.

—la tía karina le contó que tuviste un pequeño accidente en el camino y te quedaste con tu amigo cerca de una tienda y se mojaron.

—ah, ya entiendo todo tranquila yo me tomo hasta sopa de pollo?.

—relativamente no sé si tomar o comer sopa no sé cómo se le diga eso tiene líquido y sólidos a mismo tiempo.

—yo creo que sería tomar y no comer esto tiene mucho más caldo que algo sólido y apoyo son pequeños trozos es que también tiene muchas papás.

—primo realmente lo que te estás comiendo es una pizca andina es el plato típico de aquí de Mérida.

—sí muchas gracias cómo estuvo tu día?.

—pues pasé todo el día acostada y leyendo libros, y también me pregunté dónde estabas.

—estuve como te dijo tu tía Mariana te puedo hacer una pregunta.

—sí claro puedes decirme lo que quieras.

—¿En qué momento oíste lo del tío Carlos me dejaste con la intriga cuando hablamos la última vez que me dijiste que sabías muchas cosas?.

—te parece si mañana cuando vayamos a la escuela te lo cuento todo?.

—está bien y espero que de verdad me lo cuentes todo.

Después que Mariana se retirara. Se pusiera a comerme mi plato de sopa me había caído muy bien. Pero a la vez pensaba, ¿Cómo iba a entrar a la habitación del tío Carlos y encontrar aquel documento que el detective Javier necesitaba?.