Capítulo 77
La hija de la amante
Sam
Siento que las piernas me tiemblan. Frente a mí está la persona que me hizo tan feliz, pero también me destruyó. Como quisiera que fuera como antes, cuando llegaba de sus viajes de fin de semana y me recibía con los brazos abiertos para que yo me refugiara en ellos con tanto amor. ¿Por qué si solo han pasado algunos meses, siento que ya nada es igual? Aún me duele, pero tal vez mi corazón ha formado una coraza, que ese deseo de abrazarlo, ya no es tan intenso. Miro su bello rostro. Siempre tan atractivo, tan seductor. Lo veo y sé que nunca tuve oportunidad. Era inevitable caer ante su encanto. Pero tanta belleza escondía tanta mentira, tanto engaño, que me siento asqueada de haber dado todo mi amor sin esperar ninguna retribución. ¿Cómo p
