Alexander subió al elevador para ir a su habitación al entrar escucho la ducha, se acerco y estaba su amada metida ahí —¡Amor otra vez allí! —Tenía calor —Oh, jajaja, nos olvidamos de prender el aire acondicionado —¡Con razón hacia tanto calor! Cuando Martha sintió unos brazos rodeándola por la cintura —Que rico hueles amor —Alexander, ¡que caliente estas! —Tú me tienes ardiendo —Me levanté y no te vi —Me desperté y me acordé de la señora de ayer de la cafetería, la cite para hoy —¿Ya resolviste eso? —Si amor, ya esta, mmmm, ¡estas sabrosa! —jajaja, que ocurrido, ¡bésame amor! Se besaron y volvieron a hacer el amor bajo la lluvia de agua de la ducha, se quedaron jugando videojuegos hasta las 5pm, se vistieron y salieron para seguir pa
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