Estambul le miró regresar, no tenía intenciones de hacerlo pero al final el destino ya estaba sellado y terminó haciendo lo que él deseaba y no lo que ella necesitaba. Había dormido durante la noche aunque no se había pesado de sueño a la expectativa. Tenía el cuchillo debajo de la almohada temiendo que Kerem hiciera algo en su contra. Era de esperarse, pero no luego de las palabras de Osman, su líder de seguridad y quien tenía posada toda su lealtad. Apenas y pudo dormir él de la misma forma que ella debido a que su cabeza le estaba jugando malas pasadas. Estaba ofuscado y con justa razón, pues el guardaespaldas le había lanzado una advertencia. El vuelo había sido calmado para ella, pensó que terminaría vomitando o algo similar pero por suerte eso no ocurrió aunque Kerem notó su cara