¿Esposa yo?

Que pasada es vivir en Odesa, Ucrania. Cualquier mortal que no vive en Odesa podría pensarlo o considerarlo, pero yo no. Odesa la perla del mar n***o, o así tienden a considerarle los turistas de todas partes del mundo, todos se maravillan por su puerto, emplazado a orillas del mar n***o, considerándose que tiene un paisaje exquisito, son miles las personas que deciden bañarse en Arcadia Beach, ¿pero yo?, ¡Lo detesto! El montón de turistas atestados ahí... Coexistiendo con el que busca estar en tranquilidad, o con las personas que solo queremos pescar un buen rollo. ¿Algunos peores que los pesados en Arcadia Beach? ¡También están! Los amantes del arte y de la arquitectura... Al notar que Odesa está marcada por una gran influencia neoclásica, moderna, postmoderna, e incluso constructivista, todo ello relativo al contraste con el estilo Mediterráneo de Odesa... ¡Y yo también los detesto! A mis 20 años, busco diversiones en mi vida, no una sala filarmónica, no una casa con una pared, no un jardín de esculturas. Para mí todo eso apesta. A mí me fascinaría vivir en Estados Unidos de Norteamérica, específicamente en Los Ángeles, rodeada de estrellas del espectáculo constantemente, gente realmente importante, no porquería de turistas que deciden venir a Odesa. ¿Por qué no te vas de Odesa?, son las preguntas que constantemente me hacen mis amigas cuando me escuchan despotricar de la ciudad. Sencillo, porque estoy a punto de iniciar mi carrera en leyes, no tengo muchas opciones, apenas me voy a mudar a vivir sola, y aun así me sigue pareciendo una ciudad aburrida para una joven como yo... Si se supone que en todos lados se va a estar rodeado de personas, yo prefiero que sea gente icónica y genial, como lo soy yo. Mi figura es realmente esbelta, y ni hablar de mi rostro, poseo el cabello más rubio, lacio, brillante, de todas las chicas que cursaron en mi colegio, estoy convencida de que puedo apostar por un chico guapo y maravilloso en la universidad, por el momento estoy anclada a ser la novia de Vanko, mi novio desde la secundaria... Lo amo mucho porque él a su manera me demuestra amarme también, es atento, me transporta a lugares maravillosos a través del sexo, es menos aburrido que el resto de hombres que conozco que son originarios de Kiev u otros sitios de Odesa distintos a donde yo vivo... Cualquiera se preguntaría porque digo que aspiro a tener otro novio en la universidad, y es simple de responder, porque él puede querer dejarme a mí... Mis amistades me preguntan, ¿Nyura, quién te dejaría a ti? ... Y a mí también me gustaría que fuera de esa forma... ¡Soy lo más icónico que alguien puede conocer! Pero para Vanko no es suficiente, nada de mí últimamente parece llenarle... Mientras que yo... He probado la marihuana por él, tomando en cuenta que no vivimos en Países Bajos, el único país de la Unión Europea donde es legal consumir el cannabis de forma recreativa... Técnicamente he cometido un delito por él, ¿le importa a Vanko? Realmente es un rotundo no. Mi historia con él, empezó parecida a la de muchas adolescentes en Odesa, ir al cumpleaños de una compañera de clases, compartir un par de opiniones respecto a las bebidas, la música, el comportamiento de la gente ebria, terminar dándonos una ronda de besos detrás de un mural, intercambiar w******p y luego el tiempo y la costumbre hizo lo suyo, nos convertimos en novios oficialmente... Por supuesto le parecí la chica más jodidamente atractiva que ha visto y bien me ha considerado una persona interesante cuando me conoció más a fondo... Y yo... Realmente accedí a estar con él, ya que no me llovían las invitaciones para ser pareja durante mi estadía en el colegio... ¿Por qué?, la respuesta suena fantasiosa, pero es real, me consideraban inalcanzable... Vanko no es el hombre más atractivo de mi antigua secundaria ante los ojos de cualquiera de mis amigas o de mis padres, es pálido, regordete, posee ojos verdes que no son para nada especiales o llamativos, pero para mí, es el más irresistible del mundo, o es la actitud que denoto cuando lo tengo en frente... Sin importar si luzco como una desquiciada, siempre intento llamar la atención de este, sea de la forma en que se suscite el momento. Mi madre en muchas ocasiones me ha sugerido que lo abandone, antes de que él lo haga por su propia cuenta, ya que eso afectaría la percepción que tienen los demás de mí, ¿pero acaso eso importa ahora?, a mí no. Mi madre y yo vivimos solas desde que mis abuelos maternos han muerto, y he visto a mi padre solo dos veces en toda mi vida... Mi mamá fue tan absurda que se quedó embarazada de mí en unas vacaciones a un país caribeño en Suramérica, eso no es demasiado icónico. En este momento no recuerdo ni siquiera el nombre del país, solo sé que de ahí son originarios muchos artistas del reggaetón y música urbana, la gente es morena, muy sexy y guay. No se respira aburrimiento ahí. Fui de visita a ese país cuando tenía 13 años, y conocí a mi papá. Él tiene una familia allá, todos me veían como un bicho raro, incluso cuando mi madre se encargó de que aprendiera decentemente el español para que no fuera demasiado complicada la cercanía con mis desconocidos hermanos, todo terminó siendo un desastre, y mi padre no hizo ningún esfuerzo en mejorar su relación conmigo, siempre me trató con indiferencia, no se mostró interesado por hacer las cosas más llevaderas o pulcras, al contrario, actuó como si yo fuera una completa extraña a la que intenta correr de forma educada... Su cariño y consideración no me han hecho falta, tampoco su dinero. Mi madre a pesar de no ser demasiado icónica, y ser más bien un poco histérica, excesivamente anticuada para lo joven y hermosa que luce, ha hecho un excelente trabajo como madre dándome todo lo que he necesitado para ser lo que soy ahora. A mi padre le pueden dar por el culo, me da igual. Volviendo al tema de Vanko, cabe destacar que mi madre le tenía muchísimo aprecio, nos llevaba juntos todo el tiempo, y hacíamos muchas actividades en familia... Todo era color de rosas, hasta que hace 1 año mi madre se enteró de que Vanko consumía marihuana de forma recreativa... Esto desencadenó que mi madre se pusiera completamente ofuscada, exigiera no volver a verlo cerca de mí, ni cerca de nuestra casa, aunado a que me dio un montón de charlas relativas a la adicción a las drogas... Yo solo llegué a probarlo, no me gustó en lo absoluto, no porque lo condenara, simplemente no sentí que fuera la gran cosa como para que te vuelvas dependiente a ella... Para mí fue como comer jamón, algo que sabe bien, pero que no representa algo por lo que no puedes vivir si te falta... Considero un absurdo la actitud que toman los dependientes del cannabis, no es lo más asombroso. Un capuchino de oreo puede resultar mucho más transportador y placentero... Pero en fin, desde el momento en que mi madre empezó a detestar a Vanko y a no querer verlo nuevamente como mi pareja, toda nuestra relación ante mis ojos se volvió más interesante, ya que el hecho de que fuera furtiva y a escondidas le daba ese toque de único y prohibido que tanto me gusta... El problema es, que para Vanko no fue así. En conjunto, él ha ido en descenso. Ya no me escribe como antes, y yo tengo que dejarle el buzón lleno de mensajes para que pueda responderme alguno excusándose por su apatía. Él ahora no se interesa en ir a restaurantes porque constantemente me quejo de que alguien podría vernos y decírselo a mi madre... Aunque eso es bastante exagerado, en mi país cada persona está pendiente de sus propios asuntos y diligencias, nadie deja de hacer su vida para ocuparse de lo que está ocurriendo en la vida de los demás, el chisme no es algo que sea muy concurrido en Odesa, o al menos yo no lo he experimentado... Vanko ya no me llama, y se enfada cuando me pongo insistente colmando su celular de insistentes mensajes de voz y llamadas, su excusa es que está ocupado, pero cuando deja de responderme y me apersono en su casa para poder constatar que es lo que hace que le da más importancia que a mí, termino viéndolo dormir o jugar un tonto videojuego... Sumado a todo lo que he dicho, he descubierto a Vanko en un par de aventuras con mujeres más jóvenes que yo... Quizás si no estuviera segura de que soy una mujer demasiado genial y espectacular, pudiera pensar que a mis 20 años empiezo a lucir vieja, y recorrería al milagro del ácido hialurónico para refrescar mi imagen... Pero estoy convencida de que no es el caso. El problema entre nosotros es la distancia que ha generado el disgusto y desagrado de mi madre hacia Vanko, nuestra relación era activa sexualmente desde que cumplí 16, ya que ya teníamos un año juntos... Sangré como una desgraciada cuando perdí la virginidad... Él estaba desesperado por penetrarme, ya que desde temprana edad actuaba como una calienta pelotas y le había prometido que cuando cumpliéramos un año de relación le permitiría acabar con mi virginidad y así fue... Lo hizo de forma tan rústica que estuve sangrando tres días después del acto, aún recuerdo hasta la ropa que usaba y como le mentí a mi madre diciendo que era la menstruación lo que tenía... Ni siquiera podía caminar derecha... Hoy en día a duras penas podemos tener sexo una vez por semana, y cuando se convierte en una posibilidad, Vanko está tan apresurado que no da tiempo a que ni siquiera yo pueda disfrutar. Odio esta rutina en la que se ha convertido nuestro noviazgo, porque es una de las malas, no es una de esas donde todo es tan sensacional que te fastidias de que solo te estén pasando cosas buenas, en este caso es un cronograma de esos que te hacen querer halarte los pelos hasta que no quede ninguno en tu cabeza o de tomar por el cuello adrede a una persona para descargar tu ira interior. A veces ni siquiera sé lo que digo. Mañana es el cumpleaños de Vanko, y debido a todas las preocupaciones que tengo encima, ya que hoy me estoy mudando sola... (Y él no está aquí para socorrerme siquiera...) No he podido organizar su regalo de cumpleaños (mis amigas me aconsejaron comprar lencería y modelarla), ni saber a ciencia cierta donde será el festejo, ya que para su mamá soy una más de las novias que ha tenido Vanko, y peor ha sido su trato para conmigo desde que se ha enterado de que mi madre no quiere ver a su hijo y que lo cree una mala influencia, por ende no tenemos esa relación de nuera y suegra que se la llevan fenomenal y tienen una comunicación espectacular, a tal punto de organizar la fiesta de cumpleaños juntas, hornear un pastel como en las películas americanas, y adornar la casa con luces para que sea una completa sorpresa para Vanko. No es en lo absoluto lo que yo obtendré. Subo los muebles poco a poco a medida que puedo, mi madre está demasiado ocupada en su consultorio. ¡Ah sí!, por si fuera poco, mi madre es cardiólogo. Solo conoce del corazón terminaciones clínicas y patológicas, ya que para ella es difícil concebir el amor como un concepto más allá del familiar, ni siquiera tiene amigos o amigas con quién pasar el rato. Ni entiende demasiado cuando los demás los tienen. Ha sido casi imposible que me dejara mudarme sola al otro lado de la ciudad, era la única manera de estar cerca de la universidad y estudiar más cómodamente. Y ni hablar del tema de tener pareja, su mejor amigo lleva media vida enamorado de ella, le envía cartas románticas, le lanza indirectas, me escribe para saber de ella... Y aun así mi madre está completamente renuente a darse la oportunidad de ver como podrían funcionar las cosas con él, solo está absolutamente cerrada a considerar el amor de pareja como algo irreal e inexistente, debido a que mi padre fue un completo patán. Mi motivo más grande de titularme y salir adelante fue las correcciones de mis abuelos... Ambos eran personas muy correctas y entregadas, continuamente vivían auspiciados con mi carácter e imponencia, alegando que había heredado el carácter latino de mi padre... Estoy cursando mi carrera en leyes, pero también deseo ser comunicadora social, ya que me parece una carrera más icónica y acorde a mi estilo y personalidad... Terminaré abogacía para cumplir con el sueño de mi madre, pero realmente puedo con ambas carreras, no soy la más brillante, pero si tengo la capacidad para avanzar con dos carreras universitarias si una de ellas me hace sentir conectada... ¡Tengo todo planeado! Menos el jodido regalo de Vanko. Nuestra relación está atravesando una severa crisis, por lo que tengo que planear algo que realmente lo sorprenda y reviva la llama de nuestra relación. Decido llamar a mi amiga Yara, ella siempre me proporciona buenas ideas cuando tengo la mente nublada. —¿Yara, hey?— —Hola, Nyura, ¿qué sucede?, ¿has concertado mudarte?—Sus palabras suenan un poco esquivas, pero no le doy demasiada importancia, Yara suele comportarse muy temperamental constantemente. —Sí, ya me he mudado, realmente ahora estoy organizando los muebles, mi ropa, y todo lo que he traído conmigo... —Yara me interrumpe abruptamente. —¿Y Vanko está contigo? ¿Ha ido a ayudarte?— —No, ha de estar muy ocupado con su madre posiblemente, no quise molestarle pidiendo su ayuda. —Miento adrede, no quiero ventilar mis asuntos personales, ni siquiera cuando se trata de una amiga cercana, lo mejor es siempre mantener a los demás al margen de tus problemas... Es la única forma de evitar los chismes. —Uh, lo entiendo Nyura, quizás es así, posiblemente arreglando detalles relativos a lo que sea que hagan por su cumpleaños. —Me responde Yara con ligereza después de haber estado callada por lo que percibí como un par de segundos. —Para eso te estaba llamando amiga, tengo la mente nublada... Pero... Quiero darle una buena sorpresa de cumpleaños a Vanko, ahora que estaré viviendo sola tendré más tiempo y espacio para él, ya que no estará mi hostigante madre encima de nosotros cuidando de que no nos veamos... Quiero que sea algo especial, en honor al tiempo que llevamos juntos y a su cumpleaños. —Relato emocionada. Yara se queda callada nuevamente, en esta ocasión por un espacio más prolongado de tiempo, espero no estarla importunando, o que no esté arduamente ocupada como para atenderme... —Considero que si quieres sorprenderlo deberías decirle que no podrás verlo mañana, nada va a sorprenderlo más que eso... Siempre estás ahí para él, te escapas de lo que sea para estar a su lado... Y bueno, aparece de sorpresa con algo que sea maravilloso y significativo para ambos. Primero asegúrate de que vaya a estar haciendo y de con quién estará, si va a estar solo en algún espacio del día, puedes llegarle de sorpresa con algún juego s****l que compartan. —Detalla Yara ante la línea con una risita atrevida que interpreto que es debido a lo que me está sugiriendo. Me parece una mejor idea sorprenderlo con una visita inesperada, si logro asegurarme de que va a estar solo por supuesto... Que citarlo y modelarle lencería... Ya que eso lo he hecho un montón de veces, Yara siempre sabe sacar de apuros... Se me ocurrió una excelente idea ahora mismo. —¡Gracias Yara, eres un sol!—Exclamo con entusiasmo. Finalizo la llamada y me concentro en darle forma a la idea que me ha dado Yara. Mm, a Vanko le encantaba decirme que soy su conejita... Nunca me he vestido de algo así. Y con un simple disfraz no me parece suficiente, tengo que explorar en algo más. Al entrar a las tiendas sexuales que se pueden encontrar sus perfiles en **, visualizo lo que necesito, una colita de coneja de las que se introducen en el ano... Es lo más natural y guay para sorprender completamente a Vanko, la colita ofrece ser un dilatador anal o algo así... Me la pondría en el baño de la piscina del área común del conjunto residencial donde puede que esté Vanko mañana... O mejor aún me colaré por su balcón, no puedo estar en público medio desnuda mientras espero a que abra la puerta principal, así que entraré a la toilette, me arreglaré ahí, y entraré de sorpresa a su habitación, ya he entrado a su cuarto de sorpresa en otras ocasiones. Espero poder pedirlo online a la tienda, a pesar de no ser demasiado penosa, me da un poco de vergüenza ir y pedir un objeto s****l anal... Decido preguntar a la tienda si está disponible a través de delivery y mientras tanto me decido en sí llamar a Vanko ahora mismo o en un rato para saber cuáles son sus planes para mañana, luego excusarme de que no podré ir... Y luego darle la sorpresa que estoy planeando, ¡sé que va a encantarle!, y yo no puedo evitar estar emocionada también, pues a mí también va a gustarme... La tienda me responde detallándome la disponibilidad del producto y la imposibilidad de traerlo hasta acá, solo están trabajando bajo modalidad presencial... Que terrible tener que salir. Antes de arreglarme le marco a Vanko, no recibo respuesta así que lo dejo para después. Me coloco mis vaqueros favoritos, un top verde esmeralda y unas bailarinas a juego... Luzco demasiado bien para ser real. Estoy lista, me aventuro en ir por la compra de mi cola de coneja... ¡Que pasada!