—Eee… en un momento, yo te busco – su amiga se alejo y ella volvió a quedarse sola con Bruno Orellana; su crush, cuando ella era una adolescente desgarbada y tonta, pero ya no lo era mas, su cuerpo cambio; se sentía bonita y sexy, con ese vestido n***o entallado. —¿Estas bien? – se agacho un poco para poder verla a la cara, no habría sido necesario si le tomara la barbilla y la obligara a mirarlo, pero no quería tocarla. Ella levanto el rostro. —Si, solo que… bueno, fue algo obvio que tu madre nos dejará solos, ella quiere que nos… tratemos, que nos conozcamos mejor. —Ya nos conocemos, te pasabas la mayor parte del tiempo en mi casa con Susan y tu también eras como mi hermana pequeña. ¿No recuerdas cuando te defendí de aquel chico que te molestaba? Aun que; ahora que lo pienso, tal vez