Cuando despertó, se sentía cansada, aún cuando había dormido la mayor parte de la noche y no había despertado ni una sola vez. Se dijo que tal vez si debió quedarse en cama a recuperarse después que regreso del hospital, solo que no quería pensar, así que, justo al día siguiente, ya estaba en la oficina. Tan solo de pensar que la madre de Octavio iría de un lado al otro de la casa, disponiendo de cada espacio para cambiar o reemplazar muebles, la ponía mas enferma; así que, no gracias, prefería la oficina. No importaba que al regresar, casi casi tenía que arrastrarse hasta su habitación. Cuando estuvo lista, decidió bajar a la cocina para tomar café y ver si Ana y Dalia, se llevaban bien con Gina, bueno con ella y con Manuel su marido. Cuando hablo con ellos les había dejado muy en claro q