Olivia mira su atuendo en el espejo y suspira, desganada. Estas dos semanas su vientre se ha puesto un poquito más redondeado y duro, aunque no se nota aún su embarazo, ella siente que sus pantalones la aprietan más en la parte de la cintura.
Va hasta su closet y busca entre sus cosas algo que sea más suelto y regresa a su cuarto sin nada. Nunca ha tenido mucha ropa, porque no gasta ni tiempo ni dinero en eso, pero ahora realmente le hace falta. No le queda de otra más que aguantarse, al menos hasta que pueda conseguir dinero para comprar ropa de acuerdo a su estado.
Se peina su largo cabello en una coleta alta y se coloca maquillaje ligero para sus ojeras y baja al comedor. Hoy tiene exámenes en la universidad y no puede faltar.
Su suegra está como siempre, sentada, con una revista de
