Cuando Grayson vio a Xavier entrar en la sala de interrogatorios, nunca se había sentido tan aliviado de ver a alguien en su vida. Había estado toda la mañana en el departamento de policía respondiendo a preguntas, pero todo se había reducido a la misma: ¿Lo hiciste? ¿Mataste a Dima Franz? —¡Xavier! ¡Ya estás aquí! ¿Por qué has tardado tanto? —preguntó Grayson, aliviado de ver a su hermano. —He estado en la sala de espera con Ari. Me acaban de dejar entrar —Xavier lo atrajo para darle un abrazo y luego lo soltó—. ¿Cómo lo llevas? Grayson suspiró: —Estoy bien ¿Cómo está Ari? Xavier ladeó la cabeza y se sentó en una de las sillas: —Preocupada. Ella y yo estábamos esperando juntos —sonrió—. El oficial de policía no creía que Ari fuera tu esposa. La policía prácticamente le pedía un cer