-¿Por qué carajos has decidido venir? -preguntó Caín a su mejor amigo. -Se acabó todo Es... -rápidamente el castaño volteó y calló al pelirrojo. -No me llames por ese maldito nombre, soy Caín y nada más. -gruñó el ojiazul. Su amigo rió y negó divertido. Conocía a Caín desde pequeños y a pesar de que Albert los había criado en esa basura, aprendiendo cosas malas, estaba feliz de tener un hermano. -¿Qué has hecho? Mira que me sorprendió que me hicieras buscar a esa chica. -murmuró Kyle. -Es mí vecina y un encargue de nuestro querido padre. Se supone debo ganarme su confianza. -explicó Caín. -¿Es guapa? -preguntó el pelirrojo. -¿A qué mierda viene esa pregunta? No será una de tus conquistas. -exclamó Caín. -Oh vamos. Quizás la chica esta muy buena y tu no quieres presentarmela. -ri