Lander llego a casa de Emily, una de las empleadas le abrió la puerta. - ¿Y Emily? –pregunto - En la cocina Sr. Maine –dijo la empleada - Gracias –le sonrió Lander Lander se adentro a la casa y llegó a la cocina, al ver a Emily y Adam no pudo contener las carcajadas. Emily estaba llena de harina y Adam llegó de salsa chupándose los deditos. Lander no podía parar de reirse. - ¿Qué ha pasado aquí? - No te burles –dijo Emily - Es que…jajajajajaja n-no puedo jajajaja –reia Lander Emily se acerco peligrosamente a Lander. - ¿No me saludaras? ¿No me darás un abrazo? –dijo Emily - No gracias –dijo Lander retrocediendo - ¡Vamos! ¡Dame un tremendo abrazo! –dijo Emily - No…así estoy bien –dijo Lander retrocediendo - ¿Seguro? –dijo Emily - Muy seguro –dijo Lander –ademas…te doy demas