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Mientras Thor y Gwendolyn paseaban por los campos de flores, subiendo y bajando las colinas, se maravilló de lo bien que se sentía al estar con ella. También sintió la alegría de ella. No era la alegría que ella solía tener, esa risa exuberante y la sonrisa que iluminaba todo a su alrededor. Habían sido sustituidas por algo más sombrío, más austero, desde la muerte de su padre.
Caminaron a través de campos llenos de color, un arco iris de rosas y verdes y púrpuras y blancos, y Krohn corría a su alrededor en círculos, rugiendo y saltando, parecía aún más feliz que ellos. Finalmente llegaron a una gran colina, y al llegar a su cima, Gwen se detuvo, y Thor también. Se detuvo, asombrado al ver lo que había delante de él: allí, en el horizonte, había un enorme lago de agua azul y blanc
