Neyret entró al salón de clases y Camila se le acercó emocionada. —¿Y? —le preguntó. —Bien, ya nos hablamos —respondió Neyret desplegando una sonrisa. —¡Qué bien! Por fin, no era bueno que siguieran peleadas cuando fuiste su primera amiga en el colegio —dijo Camila aliviada. —Sí, tienes razón. Gracias. —Ay, deja de ser tan cortés, Eliana fue quien quiso volver a hablarte, yo sólo di una ayudita —Camila dejó salir una risita. Comenzaba a gustarle lo amable que era Neyret, no sabía qué estaba pasando en su vida, pero el cambio se notaba a simple vista y eso era muy bueno. Como le agradaba siguió hablando con ella e hizo que se sentara a su lado. Sandrid se les unió para chismear un rato mientras esperaban al profesor. Eduar se alejó de Eliana y comenzó a limpiar sus labios ba