Heaven

Capítulo 13.

Estaba lista. Lista para mi cita con Ángel, esperaba que todo saliera bien pero ¿qué podría pasar?. Después de todo Adriana cuidaría de Luam. y si necesitaba ayuda la señora Britt iría de inmediato. Terminaba de verme en el espejo, creía que había quedado lo bastante bien. Como no sabía a dónde me llevaría Ángel llevaba puesto un vestido color rosa pálido. Una chaqueta negra y unas zapatillas con tacón. Decidí peinar mi cabello en un moño pero luego preferí dejarlo suelto. Mi maquillaje era casi natural. Si. creo que estaba bien.

Salí de mi habitación mientras tomaba mi bolso. Al salir vi que Adriana jugaba con Luam. Bueno en realidad le hacía muecas mientras que mi bebé reía a las gracias de mi hermana.

-Adriana, ya me voy.-Tanto Adriana como Luam me prestaron atención. Luam estiró sus bracitos hacía a mí. No evite chillar por ser tan linda.-

-¿A donde vas hermana?-Preguntó Adriana. Tome en brazos a Luam y empezaba a besar su regordeta mejilla.-

-Tengo una cita con Ángel.-Sonreí. Adriana levantó una ceja.-

-Oh, suerte en tu cita.-Dijo.-Si alguien trata de coquetearle a tu novio saca las garras.-Hice una mueca.-

-¿Sacar las garras?-Adrina se encogió de hombros.-

-Ya sabes es una forma de alejar a las mujeres que quieren robarte a tu novio.-Sonrió.-Ahora es mejor que te apresures, no quieres qué Ángel se quede esperando.-Dijo.-

-Sí. tienes razón.-Me encogí de hombros.-Adiós mi amor, pórtate bien.-Dije besando la cabeza de Luam. ella río en respuesta.-Tú también pórtate bien, y si necesitas ayuda con Luam llama a la señora Britt.-Deje un beso en la frente de Adriana. Ella tomó en brazos a Luam. Mi bebe por el contrario me miró con sus grandes ojitos. Sentía que si me veía ella lloraría.-

-Adiós Hannie.-Adriana había tomado la mano de Luam haciendo que se despida.-

-Adiós...-No despegue la mirada de mi bebe. Podría jurar que Luam había hecho un puchero. Camine hasta la puerta saliendo lo más pronto posible.-

Suspiré. Me era imposible estar lejos de Luam. Ni siquiera era mi hija de sangre y ya sentía como si lo fuese. Negué con la cabeza y decidí no darle más vueltas al asunto. Tenía una cita con Ángel y estaba ansiosa de lo que podría pasar.

De verdad esperaba con todas mis fuerzas que todo fuera perfecto y romántico. La atracción que sentía hacia Ángel no se podía explicar pero demonios era mucha. Y con lo qué me había dicho en la oficina era suficiente para saber que él también me deseaba.

(...)

-Hannie temí que no llegaras.-Sonreí al ver a Ángel. Traía puesta una musculosa blanca. Una chaqueta de cuero n***o. unos pantalones azules y unos tenis también negros.-

-No podría dejarte plantando.-Sonreí. Me acerque más a Angel y bese su mejilla. él sonrió más.-

-¿Vamos?-Asentí. Proseguimos a pasar al restaurante. tenía aires de elegancia pero también casuales.-

Perfecto.

-Gracias por invitarme.-Agradecí. Angel levantó una ceja.-

-Era la excusa perfecta para poder verte.-Algo de Ángel es que es muy directo. Bueno ese es mi parecer. Sentía cómo el calor subía a mi rostro, por instinto agache la cabeza.-

-Estas exagerando...-Susurre. Escuché la risa de Ángel. a su vez él llevó su mano hasta mi barbilla e hizo que levantara la cabeza.-

-Nunca debes agachar la cabeza Hannie. Eres hermosa nadie puede decirte lo contrario. Atraes todas las miradas, eres una hermosa mujer tanto por dentro como por fuera.-Mi boca se abrió pero ninguna palabra salió.-

"No eres nada más que una cara bonita Hannie. Solo mírate ¿Que hombre querría estar contigo de no ser por tu dinero?"

Las palabras de Channel llegaron a mi cabeza.

-Muchos hombres van tras de mí solo por mi dinero.No por que verdaderamente les interese.-Murmure mirando directamente los ojos de Angel. Él frunció el ceño.-

-Entonces son unos idiotas por no querer conocer a la Hannie que yo estoy conociendo. No me importa cuanto dinero tengas tu eres lo que eres y eso fue lo qué me llevo a querer estar cerca de ti.-Las palabras de Ángel eran muy sinceras.-

Chanel sé equivocaba. No todos los hombres eran como ella decía. Ángel era diferente.

Con el paso de los minutos estaba muy a gusto con Angel. Había mencionado que algo lejos tenía una casa de playa. y siendo médico no me extrañó que tuviera dinero. Lo que me sorprendió fue que dijera que quería que le acompañara, Luam obviamente iría con nosotros y si Adriana quería también. El invitaría a su amigo Max Stone. No lo conocía pero por como Ángel hablaba de él se escuchaba simpático.

No sé en qué momento pasó pero de la nada empezamos a hablar sobre nuestra vida amorosa. Cómo fueron nuestras parejas.

-Recuerdo qué mi primera novia fue a la edad de 18 años.-Sonrió Angel.-Muy dulce y tímida. recuerdo que nuestro primer beso parecían de esos de primaria, inocente y superficial.-Sonreí.-

-El primer amor no se olvida.-Dije.-

-¿Cómo fue tu primer amor?-Preguntó Ángel interesado.-

-Fue a la edad de 15.-Ángel levantó una ceja.-Muy lindo a decir verdad, se me declaro por una carta de por medio.-Sonreí recordando.-Esos detalles son muy lindos.-Él asintió.-

-Ya lo creo.-Respondió.-Recuerdo que me esforcé mucho con mi primera novia. incluso tenía curiosidad de ir más allá con ella. Llegue al punto de preguntarle a mi padre sobre las relaciones sexuales.-Reí un poco sonrojada.-

-¿Y que te dijo?-Pregunté curiosa.-

-Me explico lo que era claro...-Pauso.-Me explico sobre la abeja macho y la flor hembra.-No evite que una carcajada se escapa de mis labios.-

-Típico.-Seguía riendo. Ángel también se había unido a mi risa, pero me detuve al momento en el que sentí qué me observaban.-

-Tienes una risa hermosa.-Inmediatamente me había sonrojado.-

-¿Cuándo nos traen el postre?-Pregunte.-

-Pronto.-Dijo.-¿que ordenaste?-Preguntó.-

-Pastel de chocolate.-Me encogí de hombros.-

-¿Te gusta mucho no?-Asentí.-Ya somos dos.-Sonrió.-

Y como si hubiésemos convocado a la comida un camarero apareció con nuestro postre. Dos pedazos de pastel de chocolate. Se veían deliciosos sobre todo por la crema batida y la fresa encima.

Estaba a nada de tomar un poco con mi cuchara pero fui detenida por la mano de Ángel.

-Permíteme.-Lo mire confundida. Angel se acerco mas a mi y tomo la cuchara, la acerco a mi boca. Su rostro tenía una sonrisa divertida.-

-¿Qué...qué haces?-Hice una mueca.-

-Quiero darte de comer.-Mis mejillas dolieron.-

-No creo que...

-Insisto. puedes hacer lo mismo conmigo después.-Asentí.-Ahora di "ah"-Bufé con una sonrisa.-

Así fue cómo dejé que Angel me diera de comer pastel de chocolate en la boca. Viendo el lado positivo sí fue divertido, ya que yo también le di de comer a él.

-Tienes un poco de chocolate aquí.-Me quedé quieta cuando Ángel llevó su dedo pulgar a un lado de mis labios, había un poco de crema batida. Él la llevó hasta su boca deshaciéndose de la crema batida.-Mucho mejor.¿Ves? te dije que sería divertido.-Dijo.-

¡Hannie deja de tener pensamientos nada puros de Angel ahora mismo, es una orden!

-La próxima vez le daré de comer otra cosa además de pastel.-Me quede con la boca abierta.-

¡Al demonio tiene que ser ilegal ser tan sensual!

-Tengo que ir al baño.-Me levante rápidamente.-No tardo nada ¿vale?-Ángel asintió.-

-Toma tu tiempo.-Su sonrisa era coqueta en efecto.-

Camine lo más rápido que pude al baño. Llegue al lavamanos y me eche un poco de agua en la cara. ¿Era yo o de pronto hacía calor?. No importaba eso ahora. Angel lograba ponerme nerviosa en poco tiempo, incluso haciendo o diciendo la más mínima cosa.

Por Dios no era fácil que me pusiera nerviosa. Bueno con mis novios había una excepción claro. Con ellos era diferente pues dejaba que se acercaran y sabían cómo hacer que me sonrojara y esas cosas. ¡Angel lograba ese efecto en mi!

-Calma Hannie...calma respira profundo, este hombre te gusta mas de lo que imaginabas...-Susurra mirándome al espejo. Retoque un poco mi maquillaje y salí del baño. Claro que antes hice mis necesidades.-

Tome todo el aire que necesitaba para lo que le diría a Ángel a continuación.

"Me gusta mucho Ángel. No puedo sacarte de mi cabeza tan fácil como pensé...¿y si intentamos algo serio de verdad?"

Bien en mi cabeza se escuchaba fácil. ¡Já!no lo era para nada. Seguí mi camino hasta la mesa pero ahí se detuvo mi andar cuando vi que Ángel no estaba solo.

Una mujer de cabello n***o, piel blanca y aparentemente de ojos azules estaba charlando con él. Ésta bien eso no tenía nada de malo. Claro de no ser por que la mujer qué estaba con Ángel se había acercado mucho a él, tenía la clara intención de coquetearle. Decidí detenerla al momento en que la mujer acercó su rostro a Angel.

-Ángel vámonos de aquí. Podemos pasarla bien.-Escuche que dijo la mujer pelinegra.-

-Estoy con alguien ahora...-Respondió Angel.-

-No debe ser tan importante como yo...

Eso fue lo que me impulsó para estar frente a ellos.

-Ángel.-Llame su atención. Mire a la extraña en mi asiento.-¿Interrumpo algo?-Levanté una ceja.-

-Por supuesto que sí.-La mirada de la mujer cambió a una de molestia.-

-Claro que no. Paulina basta.-Con que así se llama la mujer.-

-¿Por qué debería hacerlo? a todo esto ¿quién eres tú?-La así llamada Paulina no estaba nada feliz con mi presencia.-

-Hannie Miller.-Respondí seca.-Lamento interrumpir tu conversación con Ángel pero necesito que te levantes de mi asiento.-Ella sonrió.-

-Si es por el asiento no te preocupes linda.-Respondió. Paulina tomó otro asiento y se había colocado entre Ángel y yo.-Bien ahora podemos seguir hablando.-Sonrió.-

Le di una mirada interrogativa a Ángel quien se encogió de hombros. Me decía con la mirada un "Yo no la llame." Bufe y me senté.

Tal parece que la tal Paulina era ex novia de Angel. Me molestaba que ella no desaprovechaba cada que podía coquetearle a Angel. ¡j***r estaba molesta! se suponía que estaríamos los dos solos.

-Dime Hannie ¿como conociste a mi angelito?-Mis manos ardieron por querer estrangular.-

-Lo conocí en el hospital.-Respondí molesta.-

-¿Así? que cosas tiene la vida. justamente ahí nos conocimos y nos enamoramos.-Paulina puso su mano sobre la de Ángel.-¿No es así angelito?-Rodé los ojos.-

-De eso ya hace mucho Paulina.-Respondió Ángel.-Paulina creo que lo mejor será que te retires, nosotros estábamos aquí en una cita.-Paulina abrió los ojos sorprendida.-

¡Já toma esa idiota!

-No veo que a Hannie le moleste que esté aquí.-Ella me dio una mirada lasciva.-

-Para que sepas Paulina. Angel y yo queremos estar solos.-Su cara cambio a una molesta.-

-Lo que dijo Hannie. Queremos estar solos Paulina.-Respondió Angel.-

-¿Que acaso es tu novia?-Ni Ángel ni yo pudimos responder a eso. Una cosa era fingir frente a mi padre, Chanel y Connor para que se alejaran. La otra era definir qué cosa teníamos nosotros.-Como lo pensé.-Sonrió Paulina.-

-Por favor Paulina luego hablaremos de esto.-Ángel estaba serio.-

-Vale. vale, no tienes porque enojarte angelito.-Ella se levanto.-Solo déjame despedirme de ti como lo hacía antes.-Ángel asintió.-

-Rápido.-Dije cruzada de brazos. Sabía que lo hacía apropósito, hablaba de un tema nuevo para quedarse.-

-Nos vemos luego Mi angelito.-Esta bien. esperaba cualquier cosa esta noche, esperaba que Ángel y yo saliéramos siendo algo mas que amigos o lo que fuera. Esperaba que la noche aquí fuera romántica. O incluso esperaba que el me llevara a casa y se despidiera de mí con un beso de buenas noches.-

Pero lo que no esperaba era que esa Paulina literalmente sé abalanzó sobre Ángel y lo besara con pasión. Tampoco esperaba que Ángel le correspondiera. Ni esperaba que mi corazón doliera cómo lo estaba haciendo ahora. El colmo de los colmos es que el no hacia nada para separarla.

Mi respiración se volvió agitada. El aire me faltaba, sentía que en cualquier momento me echaría a llorar por lo que veía.

Me levanté de mi asiento y salí corriendo. No quería seguir mirando. Quizás Angel nunca quiso estar cerca de mi. Quizás sólo se acercaba para tenerme en su cama y luego olvidarse de mi. Quizás él es igual qué Connor y los demás...

Quizás estoy destinada a que las cosas siempre salgan mal. Estaba sola, y me estaba haciendo un mundo color de rosa con Angel Brooks.

Deje que las lágrimas salieran...

(...)

-Hannie Ángel ha estado preguntando por ti desde hace una semana. ¿por qué no quieres hablarle?-Adriana entro a mi habitación.-

-¿Luam está dormida?-Pregunté fría. Adriana asintió.-Bien, luego será hora de que coma. Tengo muchos papeles en la oficina y trabajo por hacer.-Adriana frunció el ceño.-

-Hermana ¿que ocurre contigo?-Pregunto.-Cada vez que menciono a Angel sales con un tema diferente. Es como si quisieras evitarlo.-Dijo Adriana cruzándose de brazos.-

-Quizás sí quiero evitarlo...-Me limité a responder.-

Como había dicho Adriana había estado evitando a Ángel desde hace una semana. Él ha estado llamando y enviando mensajes. Incluso hay veces en las qué sé aparece en la empresa justamente en la entrada. Por mi parte me las arreglo para evitarlo.

-No digas eso. es tu novio.-Trague con dificultad.-

-Adriana...la verdad es que Ángel Brooks no es mi novio. nunca lo fue.-Mi hermanita me miro sorprendía.-

-¿Cómo qué no es tu novio?-Asentí.-¿Por qué mentiste Hannie?-Pregunto.-

-Tenía que buscar la forma en la que mi padre y los Blair me dejaran en paz. Ángel aceptó ser parte de todo esto.-Respondí.-

-Pero...yo pensé que de verdad eran novios. Las miradas que se daban se veían tan verdaderas.-Me encogí de hombros.-

-Pero no lo era.-Suspire.-Lo mejor es hacer como que nada de esto pasó. Qué Ángel Brooks nunca llegó a mi vida.-Dije triste.-

Sobre todo que nunca me rompió el corazón.

-Pero hermana...solo tienes que mirarte, estás sufriendo como si de verdad hubiesen terminado. Tienes ojeras, estás triste y de mal humor. Lo único que puede sacarte sonrisas es el estar con Luam.-Sonreí sin gracia.-

-Es mi hija. ella es lo único que puede animarme Adriana.-Ella asintió.-

-Intenta resolver las cosas con Angel.-Suplico.-

-No puedo y no quiero. Tienes que entender eso Adriana.-Ella bufo.-

-Hannie tal vez yo no entienda esto del amor pero sí sé qué se tiene que luchar por lo que sé quiere. Si no luchamos entonces ¿de qué valió todo ese tiempo?, ¿Para qué sirven todos los recuerdos entonces?. El corazón te grita cuándo sabe que esa persona es la indicada, lucha por estar junto a él.-No sabía qué pensar.-

-La vida no es color de rosa Adriana. La vida y el amor duele, sobre todo cuándo sabes qué nunca significaste nada para esa persona.-Ella frunció el ceño.-

-¿Y si nos equivocamos?Somos humanos Hannie nos equivocamos y cometemos errores. También merecemos una segunda oportunidad. Angel no ha dejado de preguntar por ti desde que te alejaste. Está bien. No son novios de verdad ¿eso qué?. Pueden serlo de verdad. Si no luchas por el entonces perderás la oportunidad de estar con ese alguien que de verdad quieres...-Adriana salió de mi habitación cerrando la puerta detrás de si.-

Odiaba admitirlo pero tenía razón. Al final de cuentas no Angel y yo no somos nada. Intentaría estar con él y ser una pareja de verdad.

Mi atención fue a parar hacia mi teléfono. Con pereza estiré mi mano hacía donde estaba mi teléfono y lo tomé. Miré la pantalla, entonces mi corazón se aceleró.

Llamada entrante de Angel.

Contestar.

Si. No.

No.

Suspire. no estaba lista para hablar con él. No ahora pero sabía que tarde o temprano Ángel se aparecería por aquí.

Llamada entrante de Angel.

Contestar.

Sí No.

No.

Llamada entrante de Angel

Contestar.

Si. No.

Si.

Hannie...→

←¿Qué te ofrece Angel?.

Quiero hablar contigo por favor. Déjame explicarte.→

←No tienes nada que explicar nada Angel...No hiciste nada para separarte de ella.

Lo sé. Sé que hice mal en no apartarla pero...Necesito hablar contigo, explicarte y verte.→

←Ya te dije que no tienes que explicarme nada. No somos nada después de todo...

Entonces permíteme ser tu pareja. Esta vez de verdad.→

←¿Qué?...

Lo que escuchaste. De verdad quiero estar contigo Hannie. Déjame verte, dame una oportunidad y si no quieres volver a verme entenderé...→

←Ésta bien...

¿Qué?→

←Dije qué ésta bien Angel. Nos veremos en el centro comercial.

¿De verdad?. Muchas gracias de verdad no sabes lo aliviado que estoy.→

←El tiempo corre Angel...

Haré lo que sea posible para que me perdones. Y si tengo que conquistarte lo haré Hannie. Nos vemos pronto hermosa.→

Llamada finalizada.

-Angel...odio que aceleres mi corazón. Pero ¿qué puedo hacer?, creo que ya estoy enamorada de ti...-Una diminuta sonrisa apareció en mi rostro.-