La oficina quedó en silenció una vez que todos salieron. Sólo quedamos mi padre, Luam y yo. Luam miraba atenta a mi padre y dice versa. Pero ahora tenía que presentar lo que mi padre tenía que decirme.
-¿Qué querías decirme papá?-Pregunté. Él suspiró.-
-Hija...yo no estaba enterado de lo que ocurría contigo...Ahora entiendo por qué rechazaban tanto a Connor...-Asenti.-
-No quería decir nada. Pero eso ahora no es importante.-Dije.-
-No. claro qué es importante Hannie...Estamos hablando sobre tú salud.-Mi padre se acerco.-Tu madre tenía lo mismo luego de que te tuviéramos.-Dijo.-
-Lo sé.-Respondí. Veía cómo los ojitos de Luam se cerraban solos.-
-Cuando Chanel dijo eso yo estaba muy sorprendido. no sabia que pensar ni que hacer Hannie...Si te perdía ya no sería el mismo.-Negué con la cabeza.-
Caminé hasta el sillón grande de mi oficina y acosté ahí a Luam junto con su manta. Le había puesto varios cojines para que no se cayera.
-Papá.-Dije.-Tu cambiaste el día que mamá murió.-Gruñí.-No esperaste a que el cuerpo de mamá se enfriará para luego meter a una mujer en la casa, cómo si no fuera poco embarazada. Dime papá ¿de verdad amaste a mi madre o sólo fue una mentirá?-Vi como mi padre apretó los puños.-
-Claro que la ame Hannie.La ame cómo no tienes ideas pero las cosas cambian. No me declaré inocente por meterme con chanel cuando tu madre estaba viva.-Ahora era yo la que tenía los manos echas puños.-Pero...no creas que no me dolió no haberme despedido de tu madre el día que murió. No sabes el dolor que sentí en mi pecho cuándo nos dijeron que ella también tenía cáncer, pensar que la perdería contigo estando una niña me volvía loco esa sola idea.-Sus palabras sonaban sinceras.-
Pero el daño ya estaba hecho.
-¿Y cómo creés qué me sentí yo al saber que mi madre murió eh?-Dije entre dientes.-¿Acaso no pensaste cómo me afectaría saber que te revolcabas con una zorra y que mi madre desconocía por que pensaba que su amado esposo le era fiel?-Él no respondió.-Quizás las cosas hubiesen sido mejor si no hubieras metido en tu cama a una zorra.-Buffet.-
-Hannie respeta a Channel.-Gruño mi padre.-
-¡Por un demonio no!-Mire rápidamente a Luam quién seguía dormida.-Me pides que la respete cuándo ella no tiene el mínimo respetó hacía a mí papá. Despierta esa mujer está loca.-La mandíbula de mi padre estaba tensa.-
-Solo pensé que ustedes se llevarían bien. Que serían amigas y esas cosas Hannie. Yo también tenía necesidades. necesitaba a una mujer en mi vida cuándo había perdido a la mujer que me acompañó por muchos años.-Dijo.-
-Pues pensaste mal papá...¿Sabes? Odio que te casarás con Chanel pero no de qué me dieran una hermana qué es tierna e inocente. No dejes que se repita la historia que yo vivía con ustedes papá.-Suspiré.-Adriana sufre y ustedes no se dan cuenta.-Mi padre me miró incrédulo.-
-No comprendo cómo dices eso.-Respondió.-Ha Adriana se le da todo lo que pide.-Negué.-
-Todo menos amor...-Dije.-Justo cómo conmigo me dejaste de lado cuándo más te necesité por darle cielo y tierra a Channel.-Le reclame bastante molesta.-
-Entiende que ella es mi esposa. Ella estará siempre primero en mi vida.-Entonces caí en cuenta de que no importa lo que haga. Mi padre estaba cegado. Cegado de un amor que no existía.-
-Con eso ya lo dijiste todo papá.-Me di vuelta.-Si eso era de lo que querías hablar puedes retirarte.-El se acercó.-
-Hannie.-Me miro.-Entiende que estuve muy preocupado por lo que pudiese pasarte...ahora ya no podras tener hijos propios.-Sonreí de lado.-
-En eso te equivocas papá.-Él frunció el ceño.-Tengo lo que más adoró justo ahora. Luam es hija de Gloria y cómo puedes saber ella murió. Ahora Luam es mi hija.-Dije.-
-Pero no es tu sangre...-Bufo.-
-¿Y eso que tiene que ver?, ¿acaso querías que dejará a una pequeña inocente sola en el mundo papá?-Frunció el ceño.-Luam ahora es mi hija, la criaré como mía y aún que no te gusté ya lo decidí así.-Mi padre asintió.-
-Entonces ya no se puede hacer nada. Hablaremos otro día con mas tiempo Hannie.-Asenti.-Cuida de esa niña.-Dijo frío.-
-Adiós padre.-Me despedí fría.-
-Adiós.-Sin más que decir mi padre se retiró y salió de mi oficina.-
Caminé hasta mi sillón y suspire mientras me dejaba caer sobre este. La plática había sido algo turbulenta pero ya había acabado.
Observé dormir a mi pequeña. Sonreí, ella era todo lo que tenía, ella necesitaba de mí necesitaba todo mi amor. Eso haría. La cuidaría y protegería siempre.
Ahora era mi pequeña bebé.
(...)
Me apresuraba todo lo que podía con la botella de Luam quién reclama a gritos ser alimentada. Luego de salir de la oficina más temprano de lo normal ya que una oficina no era el lugar para una bebe. Decidí que lo mejor era regresar lo más pronto posible. En el caminó Luam se despertó y empezó a llorar por un cambió de pañal. Pero cómo estaba en el auto no podía cambiarla ahí.
Por lo que inmediatamente llegamos corrí a cambiar el pañal de mi bebé. Luego se calmó pero la paz duró tan poco como llegó. Ahora Luam tenía hambre y yo preparaba su botella. Una vez más escuchaba el llanto de mi bebé.
-¡Ya voy bebé!-Grite mientras agitaba la botella de leche. Llegue a la habitación de Luam. deje la botella cerca y la tomé en brazos.-Ya sé que tienes hambre mi amor.-Dije mientras la acomodaba en mis brazos. Tomé la botella y la acerqué hasta la boquita de mi hija, quién con ansías recibió la botella y tomaba de está con mucha prisa.-
Oh nadie dijo que ser madre era fácil. Y yo era madre primeriza. Bueno al final de cuentas no importaba luam hacía de mi vida más interesante y agitada.
Luam había terminado su botella de leche. luego le saque los gases dándole palmaditas en su diminuta espalda. Cuándo un pequeño eructo salió estaba tranquila. Luam estaba más calmada.
-Hora de dormir bebé...-Susurré y deje un beso en la frente de mi hija. Luam poco a poco cerraba los ojos hasta tenerlos cerrados por completo. Su respiración era tranquila y profunda.-Bien Hannie creo que mereces una ducha.-Me dije a mi misma.-
Lo que más amaba eran las duchas. No importaba cómo sí fuese ducha o bañera yo amaba el agua. Ahora mismo estaba en un relajante baño de burbujas las cuáles cubrían todo mi cuerpo a excepción de mi cara y cabello.
Mis intensiones de relajarme se vieron frustradas cuando Ángel llego a mi cabeza. Lo que había pasado en mi oficina. ¡Oh Dios mío de no ser por Adriana no sé qué habría pasado después!. Mi cuerpo se estremeció de tan solo recordar como Ángel besaba mis labios, cuello y clavícula. Sus besos eran delicados tanto como apasionados.
Ya lo había visto sin playera una vez. Ahora había sentido parte de su cuerpo. Pero...me preguntaba ¿cómo sería desnudo estando frente a mi?
Me hundí en el agua al sentir mi cara arder por los pensamientos nada sanos sobre Ángel. Y es qué Dios del cielo ¿cómo no tener pensamientos lujuriosos con un hombre así?. En definitiva era pecado no pensar así de Angel.
Salí de mis pensamientos al escuchar el llanto de Luam. Mi pequeña se había despertado.
-¡Ya voy bebé!-Grite mientras me apresuraba a enjuagar mi cuerpo para entonces salir a buscar a mi bebé.-
Definitivamente Luam me mantenía ocupada de pensar en cualquier cosa. sobre todo Ángel y eso lo agradezco.-
-Hannie...-Separe la vista de mi libro al momento de escuchar mi nombre. Adriana estaba frente a mí.-
-¿Ocurre algo adri?-Pregunte.-
-No...bueno sí...la verdad no sé pero...-Mordió su labios.-
-¿Si?. sabés qué puedes decirme cualquier cosa.-Sonreí cálida.-
-Verás hoy...hoy cuando papá y mamá se presentaron en tu oficina bueno.-Hice una seña para que se sentará a mi lado.-Vi que mamá le coqueteaba a tu novio Ángel.-Mire sorprendida a Adriana.-
Esa zorra.
-Exactamente dime ¿que ocurrió Adriana?-Pregunte.-
-No escuche toda la conversación pero mamá dijo algo sobre de que el señor Brooks tenía que dejarte. Ella piensa que su relación es mentira.-Maldije una y mil veces.-
Lleve mis manos hacia ambos lados de mi cabeza. Chanel. siempre Chanel. Alguien qué me diga el día en el que podré descansar de ella. O quizás si desapareciera misteriosamente nadie la buscaría.
No era momento de pensar en planes para deshacerme de ella. pero tampoco estaba de más pensarlo.
-Adriana.-La mencionada me prestó atención.-Sabes que tu madre me odia ¿verdad?-Ella asintió.-Entonces ella es capaz de alejar a personas importantes para mi sólo para verme sufrir.-Dije seria.-
-En realidad no creí que mamá fuera capaz de hacer cosas tan malas...-Suspire. A nadie le gusta ver o escuchar que su madre es mala.-
Decidí que lo mejor era dejar ese tema. no quería que Adriana se sintiera mal por culpa de su madre.
-Vamos adri, mejor hablamos de otra cosa.-Sugerí.-Dime ¿te gusta alguien?-Mi hermana negó rápidamente.-
-No.-Respondí y me reí. a la edad de 17 años era adorable. Adriana ni siquiera había dado su primer beso. ni había tenido novio. Era adorable.-¿A qué edad tuviste novio Hannie?-Pregunto. Hice una mueca.-
-¿Yo?-Ella asintió. fruncí el ceño tratando de recordar.-Bueno fue a los 15 años.-Respondí.-
-¿Enserio?-Asentí.-¿Por qué sé separaron?-Reí un poco.-
-Las relaciones se me hacían aburridas. no siempre era así con mis demás novios hasta que maduré y entonces entendí que las relaciones son serías y no un juego. La primera vez que me rompieron el corazón fue a los 20 años.-Dije.-
-¿Por qué, que paso?-Levanté una ceja.-
-Una traición no es fácil de olvidar. sobre todo para nosotras las mujeres, no importa cuándo y cómo. todo lo que te diga un chico da muchas vueltas en tu cabeza. No importa si pasan días, meses o años. Lo que te dijo o hizo sé quedará en tu cabeza.-Adriana me miro confundida.-
-¿Por qué?-Preguntó.-
-Por que somos mujeres. Lo que para un hombre es fácil de olvidar para nosotras no. Te pongo un ejemplo. Sí los hombres sé pelean en cinco minutos literalmente ya son los mejores amigos. Mientras qué para nosotras podemos durar años sin hablarnos.-Adriana asintió.-
-Otra pregunta Hannie.-Asenti. acerque a Adriana hasta mi mientras acariciaba su cabello. Quizás ella nunca tuvo la oportunidad de estar así con la bruja de Channel y es qué ella seguramente estaba de compras todo el día mientras Adriana crecía.-
Quizás es mejor qué me pregunté a mí y no a la no capacitada mujer que era su madre, por no insultarla ahora mismo.
-Dime.-Respondí con una sonrisa ladina.-
-¿Qué son las relaciones sexuales?...
(...)
Llamada entrante de Angel.
Contestar
Si. No.
Sí
¿Hannie?→
←¿Angel?, ¿ocurre algo?
No tiene que pasar nada para tener que llamarte Hannie. Quería escuchar tu voz...→
←Oh...
¿Estás ocupada?→
←No. Justo ahora estoy libre. Luam duerme y Adriana cuidara de ella.
Me alegra escuchar eso. ¿Te parecería si tenemos una cita?→
←¿Una cita? ¿Tú, yo, esta noche?
Por supuesto. Será un tiempo a solas. ¿Qué dices aceptas?→
←Claro que si Angel...
Entonces es una cita. Paso por ti digamos ¿8:30 de la noche? →
←Estaré lista para entonces. Te veo a las 8:30 Ángel.
Hasta las 8:30 Hermosa, saluda a Adriana de mi parte. Adiós. →
←Claro, adiós Ángel...
Llamada finalizada.
Bien Hannie tienes una cita con un sexy doctor que a parte es un amor. Llegó el momento de la verdad pues quizás esta noche pase lo que en la oficina no.
-Está bien Hannie ha llegado la pregunta del millón...¿Que debería ponerme?