Heaven

Capítulo 21.

←Explicate Chanel, ¿Qué fue lo que le sucedió a mi padre?.

¿Que acaso me ves cara de que tengo que cuidarlo todo el tiempo?. Tu padre ya es lo suficientemente mayor como para que yo tenga que cuidarlo. →

←¡Se supone que eres su esposa!.

Su esposa, no su niñera.→

←Ni siquiera para eso sirves.

Ven cuanto antes. Tu padre quiere hablar de no sé que contigo.→

←Voy para allá.

Llamada finalizada.

Dejé el teléfono en mi mesita, suspire y me levante. Parece que mis planes de descansar serán para otra ocasión.

Me levanté y caminé hasta mi baño. Antes tomaría una ducha. Pero me atormentaba pensando que había pasado ahora, que había provocado el accidente de mi padre. Diablos sólo pasé un fin de semana con Ángel y esto sucedía.

Terminé de ducharme y cambiarme. Vestía  con unos pantalones finos de color piel y una elegante blusa color blanco. Dejé mi cabello suelto, sólo me maquillé un poco. Tomé todo lo necesario y salí de mi habitación. Al salir de está me encontré con Adriana quien tenía puesta su pijama.

-¿A donde vas Hannie?.-Pregunto.-

-Al hospital.-Suspire.-

-Oh...te verás con angel.-Adriana sonrió y negué.-¿Entonces?.-Me miró confundida.-

-Adriana necesito que seas fuerte pase lo que pase bien.-Ella asintió aún confundida.-

-¿Que ocurrió Hannie?, ya me estas asustando.-Se puso nerviosa, y no debía culparla.-

-Chanel llamó desde el hospital, me dijo que papá sufrió un accidente que casi le cuesta la vida.-Pude notar que el pánico sé apoderó de ella.-

-¿Cómo pasó?, ¿él está bien verdad?, ¿se recuperará no es así?.-Sostuve a mi hermana de los hombros.-

-Chanel no me dio detalles, sólo dijo que papá quería hablarme de algo. Aún no sé qué tan grave es el asunto.-Dije. En éste momento tenía que ser fuerte. Adriana me miró preocupada.-

-Quiero ir contigo Hannie.-Murmuró. Abracé a mi hermana.-

-Pequeña...necesito que te quedes aquí con Luam, ¿vale?.-Ella asintió.-Te mantendré informada en caso de que algo grave suceda.-Adriana suspiró mientras se separa de mi.-

-Espero y esté bien.-Adrián se encogió de hombros.-Puede que ellos ya no me traten como antes pero los sigo queriendo y me preocupo por ellos.-Lo bueno de Adriana era que era pura e inocente. Ella aún no conocía que tan malas llegaban a ser las personas.-

Esperaba y nunca alguien se atreviera a lastimarla.

-Entonces será mejor que me de prisa, si Luam llora llamas a la señora Britt. ¿vale?.-Mi hermana asintió.-

-Adios, dale un beso a papá.-Asentí y tomé camino a la puerta.-

El día sería largo al parecer.

(...)

-Señorita Miller, pasé me avisaron que vendría.-La enfermera se levantó de su asiento y se paró justo al lado de mí.-

-¿Que tan grave es la situación de mi padre?.-Pregunté sería.-

-No le mentire señorita...-La enfermera me miró seria.-Su padre sufrió un ataqué cardíaco. Desconocemos qué pudo haber sucedido, pero afortunadamente los médicos lograron estabilizarlos.-Me quede en sorprendida, un ataqué cardíaco no es cualquier cosa, miles y miles de personas mueren por esto, algunos por sobre peso u ataques al corazón.-

Lo cual era raro ya que mi padre mantenía muy buena forma.

-Creemos que posiblemente necesite un descanso.-Asenti.-

-¿De cuanto tiempo?.-Pregunte.-

-Tres u cuatro semanas.-Dijo.-Le vendrá muy bien descansar.-Asenti. bueno prácticamente mi padre había dejado de lado la empresa para darle cielo y tierra a su esposa,Haciendo que yo tuviera que hacerme cargo de la empresa por completo.-

¿Y si trabajaba en otras cosas y no me mantenía informada?.

Eso era posible. Ahora que lo vería podría hacerle tantas preguntas como pueda.

-Por favor lléveme con mi padre.-La enfermera asintió. La seguí por los pasillos, tuvimos que tomar el ascensor. Lo bueno de los hospitales privados era la calma que sé sentía en el lugar.-

Esperaba que mi padre se recuperara pronto. Debía admitir que me había asustado que algo pudiese pasarle.

-Es aquí, señorita Miller.-Las puertas del ascensor se abrieron dejándonos en un pasillo.-Habitacion 221. Si necesita algo no dude en llamarme.-Asenti.-

-Gracias.-Dije.-

-Permiso.-La enfermera tomó rumbó por otro pasillo. por mi parte buscaba la habitación.-

No muy al fondo pude ver a Chanel. pero no estaba sola, al contrarió estaba muy bien acompañada de uno de los enfermeros, éste le sonreía coqueto mientras que mi madrastra actuaba cómo una adolescente coqueteando descaradamente.

«Zorra.»

Caminé hasta donde se encontraba la zorra de Chanel. Al llegar me crucé de brazos e hice una tos falsa.

-A ver Channel. Mientras mi padre se muere lentamente,  tú ya ¿Estás buscando su reemplazo?.-Levante una ceja.-

-Callate y metete en tus asuntos estúpida.-Gruño.-

-Creo que al director del hospital le encantará escuchar como los enfermeros se distraen con zorras en lugar de hacer su trabajo.-El enfermero me miró con pánico.-

-Con permiso tengo trabajo que hacer...-Sin esperar respuesta escapó. Chanel gruño.-

-Lo hiciste a propósito.-Asenti.-

-En lugar de hacerle ojitos a otros concéntrate en tu esposo, deja de ser una zorra por una vez.-Chanel empezó a rabiar.-

-Eres...

-¡Le digo que estoy bien doctor, tengo trabajo que hacer no estoy para descansar por algo sin importancia!.-La voz de mi padre sé escuchó al otro lado de la puerta.-

Miré a Chanel con burla y entré a la habitación. Ella está detrás de mí. 

Mi padre estaba discutiendo con el doctor.

-¿Algo sin importancia?.-El doctor frunció el ceño.-Señor miller por Dios, estamos hablando de su salud.-Mi padre negó.-

-Cuatro semanas sin hacer nada. ¿Eso es lo que quiere que haga, nada?.-Gire los ojos.-Yo soy un hombre trabajador.-Renego.-

-Y yo digo que algo de descanso no te sentaría mal papá.-Mi padre puso su atención en mí.-

-Alguien razonable al fin.-Suspiró el doctor.-

-¿Sucede algo?.-Pregunte.-

-Si. su padre se niega  a descansar, de tanto estrés a sufrido un ataqué cardíaco. A la próxima que tenga tanto estrés no sólo será su corazón sino que también su vida. Y entonces ahí descansará le guste o no.-Mi padre frunció el ceño.-

-¿Como se atreve?.-Gruño.-

-Lo que dice el doctor es verdad papá.-Dije.-Estamos hablando de tu salud lo cual es importante y debes cuidarte más.-Fruncí el ceño.-

-Dios me ayude pero Hannie tiene razón cariño, tu salud es primero.-Rodé los ojos. Chanel sólo aseguraba su dinero con mi padre.-

-Bueno, ya está bien. soy mayor y puedo cuidarme solo.-Miramos mal a mi padre. Él suspiró.-Digame que tengo que hacer.-El doctor asintió y empezó a darle un sermón a mi padre sobre lo importante que era para él tener un descanso y esas cosas.-

Prestaba atención ya que a parte de la charla que el doctor le había dado, yo también pondría mi parte y le regaña.

Luego de unos minutos el doctor terminó y se retiró. Chanel inventó una excusa de que se iría a descansar, me alegré de que se fuera, así yo hablaría con mi padre, quien a decir verdad estaba serio.

-Papá.-Lo llamé.-

-¿Que sucede Hannie?.-Pregunto.-

-¿No hay algo que quieras decirme?.-Entre cerré los ojos.-Según entiendo me dejaste la empresa a mi cargo, pensé que ya no trabajabas.-Mi padre suspiró.-

-La verdad es que...tengo una empresa más hija.-Mire confundida  a mi padre.-Tengo mucho a mi responsabilidad, con Golden & Diamond no era suficiente y para cuándo había nacido Adriana ya estaba fundada y en movimiento.-Asentí.-Para ése tiempo tu...-Le interrumpí.-

-Para ese tiempo yo estudiaba.-Mi padre asintió.-¿Por qué no me dijiste?.-Fruncí el ceño.-

-No pensé que pudieras con dos empresas.-Gruñi.-Lo siento hija, puede que suene como un viejo machista pero no creó que una mujer pueda con tanta responsabilidad, un hombre sería más capaz.-Mi enojo creció.-

-Por Dios papá, estás muy equivocado, le he dedicado mi vida a esa empresa, ¿¡Y tú me dices que no puedo con ella!?.-Grite.-

-Sé que puedes pero un hombre sería más capaz. por eso quería que te casarás con Connor.-Negué con la cabeza.-

-Pues saca esa idea de tu cabeza papá, Ángel y yo somos una pareja.-El levanto una ceja.-Esta vez sin mentirás, me lo ha pedido de verdad, el fin de semana la pasamos juntos.-Mi padre gruñó.-

-Terminaras matandome si sigues con eso.-Rodé los ojos.-

-Es mi vida papá, deberías apoyarme.-Dije.-

-Es que no creo que un simple doctor pueda con estar con una mujer cómo tú Hannie, ¡Él no sabe de negocios, no sabe del mundo del que tú vienes, sólo abre personas y ya!-Resople.-

-No importa si él lo entiende o no, lo importante es que él de verdad quiera estar conmigo.-Dije firme.-

-¿Y crees que Connor no quiere estar contigo hija?.-Preguntó.-

-Papa entiende que Connor sólo está detrás de mí porque no puede tenerme, no quiero nada con él. Él no me quiere por que de verdad esté interesado en mi, busca dinero.-Mi padre negó.-

-Es un hombre que no se rinde y busca lo que quiere.-Buffet.-

-Tu y yo vemos las cosas de maneras diferentes papá.-Suspiré. no tenía sentido que lo hiciera entrar en razón. Él nunca aceptaría mi relación con Angel.-

-No sé en que éstas pensando...Primero me contradices, adoptas una niña que no es de tu sangre y ahora éstas enamorada de un doctor de quitan.-Veía el enojo en los ojos de mi padre.-

-Pues te guste o no papá Ángel es mi novio. Luam mi hija, y sabes que nada me hará cambiar de idea.-Dije.-

-Te propongo algo.-Esto  no me gustaba.-

-¿Que?-Lo mire desconfiada.-

-Tomarás la presidencia de Miller Corporation. Sí, dejas a ése tal Angel.-Sentí que un balde de agua fría me caía encima. No lo creía.-

De verdad mi propio padre llegaría hasta lo más bajo.

-¿Me estas chantajeando papá?.-Lo mire indignada.-

-No lo mires así, sólo es un acuerdo, toma la presidencia a cambió dejas a tu novio.-Dijo como si nada.-

La sangre en mis venas empezó a arder. ¡Esto era una estupidez!, ¡no dejaría a la persona que ha logrado hacerme sentir viva por unos dolares! Jamás.

-Papa...esto es lo más bajo que has podido hacer en la vida. No te interesa mi felicidad, no, no dejaré a Ángel por una presidencia.-El se mostró molesto al respecto..-Odio que quieras controlarme, que quieras intercambiarme por unas asociaciones. Pero ¿sabes que?, eso no funcionará no importa cuanto insistas. Traté siempre de hacer lo que tú querías pero veo que fue un error. Sólo eres un egoísta.-Tome mis cosas.-

-Hannie a ¿donde vas?, esta conversación no ha terminado.-El rostro de mi padre estaba rojo.-

-Hazle caso al doctor y trata de descansar.-Mi mano toco el pomo de la puerta.-

-Hannie...-Advirtió.-

-Otra cosa papá.-Me di vuelta.-Estoy segura de que Ángel será un buen esposo.-Vi como se quedo sorprendido, su boca se abrió pero no salió nada.-

Salí de la habitación al momento en el que resoplaba por lo molesta que estaba.

-¡Hannie!-El grito de mi padre se escuchó pero no le hice caso.-

Las cosas ahora eran diferentes.

(...)

Llamada entrante de Angel.

Contestar. 

Si. No.

Si.

←Angel...

Lamento llamar a estas horas amor, ¿estabas dormida?.→

←No, descuida, no podía dormir. ¿Dónde estás?

Acabo de salir de mi turno. no es tan tarde.→

←Son las una de la madrugada...

Lo sé. oye...→

←¿Qué?.

Abre la puerta.←

←¿Qué, qué?.

Que abras la puerta nena.→

←Ángel, tú...

Así es.→

Llamada finalizada.

Me levanté de mi cama y caminé a la puerta de la sala, olvidándome por completo que llevaba un pijama diminuto y que el frío era insoportable al ser de madrugada.

Miré por el ojo de la puerta y efectivamente ahí parado con el teléfono en mano estaba Angel. Abrí la puerta y mi novio sonrió.

-Hola...-Sonreí.-

-Hola.-Susurré.-

-¿Me harás pasar o haremos el amor aquí en tu puerta?.-Mi rostro se volvió rojo cuándo dijo eso último.-

-Pasa.-Ángel asintió y entró.-Pensé que no nos veríamos mañana...-Mis palabras quedaron en el silenció cuándo fui callada por los dulces y suaves labios de Ángel. Me tomó de la cintura pegandome a su cuerpo, no evite seguirle el beso al contrarió. Como pudimos cerramos la puerta y tomamos caminó hasta mi habitación.

-Esta noche hermosa te haré mía hasta el amanecer...