– Está bien Vivi –dice Ulises tratando de tranquilizarme, me toma la mano y camina conmigo dentro de la casa, entramos y mi padre lo recibe con un abrazo, siempre me pregunte porque papá se casó con mamá, ellos son tan distintos, papá es muy alegre y cariñoso, mientras que mamá pelea por todo
– ¿Te quedas a cenar Ulises? – dice mi padre y Ulises asiente
– Claro –dice Ulises con amabilidad, pensaba robármelo y tal vez seducirlo para que me haga el amor, pero mi madre lo ha echado a perder.
Ulises cena con nosotros mientras platica con mi padre, nuestras familias siempre han sido amigas, tienen muchos negocios juntos, y en el 2015 aún mantienen muy buena relación.
La cena termina y Ulises se despide de todos, lo acompaño a la puerta, me mira fijamente y me da un tierno beso en la boca, lo pego a mi cuerpo y hago más intenso el beso
– Vivi tu mamá nos puede ver –dice aun en mis labios, alzo los hombros dándole a entender que no me importa, por Dios, tengo 27 y muero porque me haga el amor, claro que con mi cuerpo de 17 no lo conseguiré fácilmente
– Te amo – digo cerca de su boca, sonríe con ese brillo en sus ojos claros, me vuelve a besar y sonrío al sentir sus manos en mi cintura
– Yo también te amo, te veo mañana –dice y asiento, me da un último beso y se aleja, sube a su moto, le lanzo un beso y él sonríe divertido, arranca el motor y suspiro.
Debo hablar con ese ángel, aunque Yumara dijo que no será fácil, lo hare, no sé como pero lo lograre.
Entro a casa y ayudo a mi nana a levantar la mesa, después subo a mi habitación, me doy un baño y trato de relajarme.
Miro el reloj son las 8 y media, Yumara dijo que debía hacer el ritual a las 12 en punto, y para eso falta mucho, decido llamarle a Claudia para platicar un rato.
– Clau – digo y ella responde
– Hola Vivi, ¿qué pasa? – dice con alegría
– Nada, solo quería saber cómo va tu fin - digo y ella contesta al otro lado de la línea
– Fantástico, papá me ha comprado el mp3 que quería, mañana te lo muestro –dice y sonrío, ya sabía que se lo habían comprado, estaba muy feliz, desde hace mucho quería uno, en este tiempo esos aparatos eran la moda entre los jóvenes.
Terminamos de hablar y colgamos, me pongo a pensar que he cambiado algunas cosas, hace 10 años yo estaba llorando porque había visto a Ulises y a la zorra de Martina besándose, lo habría visto en la iglesia en la mañana pero no habría hablado con él, se había acercado a mí pero me había alejado sin voltear a mirarlo.
Me había pasado toda la tarde en casa con Claudia y Catalina consolándome, y en la noche él había venido a verme pero no lo había recibido.
Pero como no me pelee con él en la fiesta, esta mañana hablamos en la iglesia, me dijo que trabajaría todo el día con su tío Charly, además me he pasado el día con Yumara, y después buscando información del supuesto ángel que me trajo a este año.
Ulises ha venido a buscarme, y ha cenado con mis padres, definitivamente puedo cambiar las cosas, puedo hacer que no muera en ese hospital.
Después de pensar en todo lo que he cambiado miro el reloj, son las 11:55. Faltan 5 minutos, me acomodo en mi cama y cierro los ojos, inhalo y exhalo tratando de relajarme, después de unos minutos mi respiración es lenta y pausada, en mi mente imagino un ángel, así como los he visto en los libros y los que he leído en la biblia, espero que esto de resultado.
Me siento relajada mientras imagino un ángel de cabellos rubios y rizados, no sé porque me lo imagino así, tal vez es por la imagen de cerámica que mamá tiene en la sala.
Han pasado casi 10 minutos y sigo sin sentir ninguna presencia, abro los ojos lentamente y miro la obscuridad de mi cuarto, esto no está funcionado.
– Hola, ¿estás ahí? –digo aunque no creo que de resultado
– Mira, me gustaría hablar contigo, si fuiste tú el que me trajiste aquí por favor dímelo – digo pero sigo sin recibir respuesta, me siento en la cama y suspiro
– Por favor, ¿me escuchas, porque me trajiste aquí, porque está pasando esto, porque Ulises muere? – digo un poco exaltada, necesito respuestas, si no me volveré loca
– Por favor háblame, ¿dime porque estoy aquí, puedo salvarlo?, dime que lo puedo salvar, no quiero que muera, por favor, por favor –digo con las lágrimas resbalando por mi mejilla, no quiero que Ulises muera, él es bueno, siempre lo fue, es cariñoso y dulce, es trabajador y responsable, generoso y bondadoso, es el mejor y muero al pensar que aunque lo intente no pueda salvarlo
– Por favor – digo y caigo sobre mis rodillas llorando con toda la impotencia que siento, no quiero perderlo, daría mi vida porque él no muera
De pronto siento un aire frio inundar la habitación, alzo la mirada lentamente y miro a una mujer parada frente a mí, tiene la piel blanca y el cabello largo y castaño, sus ojos son color azul intenso, tiene un vestido largo color blanco, acaso ella es un ángel.
– ¿Eres, eres Aniel? – pregunto y ella asiente, es verdad, los ángeles existen, me levanto temblorosa mientras limpio mis lágrimas, la bella mujer me mira tiernamente mientras proceso lo que está sucediendo
– ¿Eres, mi ángel de la guarda? –digo tragando salida, ella siente y sonríe tímidamente
– Si Viviana, soy tu ángel de la guarda – dice con voz dulce, tengo la boca abierta, esto es un sueño
– No tenía idea que existían los ángeles –digo y ella sonríe.
– Tu madre es muy devota– dice y asiento, mi madre tiene figuras de ángeles rubios por todos lados
– ¿Tú me trajiste aquí? –digo y ella vuelve a asentir
– ¿Por qué? – pregunto con rapidez, no sé porque su presencia me hace sentir paz y tranquilidad
– Por lo que pasó – dice y mi corazón se contrae, ella se refiere a la muerte de Ulises, no he estado soñando, esto de verdad está pasando
– Murió, lo vi, pero, ¿porque me trajiste aquí? –digo tratando de ahogar las lágrimas al saber que Ulises de verdad murió
– Porque caíste en estado vegetativo, la noticia te afectó mucho, si te dejaba en esa época, tu mente colapsaría y aunque tu cuerpo tenga vida, tu mente no estaría –dice y la miro boquiabierta, no dudo lo que dice, se perfectamente que no soportaría perderlo
– ¿Porque no me dejaste ahí? – digo y ella me mira con cariño
– Soy tu ángel de la guarda, mi misión es protegerte y cuidarte, pensé que si te traía a la época en donde eras feliz, saldrías de tu trance – dice y la miro aturdida
– ¿Quieres decir que en el 2015 sigo en estado vegetativo? – digo y ella niega
– Si todo sale como lo planee, podrás salir de eso –dice y la miro confusa
– No entiendo –digo más aturdida que nunca
– Si vuelves a vivirlo, estarás preparara, tu mente resistirá - dice y niego con rapidez
– ¿Tú, tú quieres decir que Ulises morirá de todas maneras? –digo con las lágrimas brotando de mis ojos, ella no dice nada, solo me mira
– No, ¿Por qué?, yo puedo cambiarlo, puedo hacer que no muera – digo y ella niega
– No Viviana, no puedes cambiar las cosas, no sabes a quien afectaría si él no muere – dice y la miro con rabia
– Me importa un cuerno, no voy a dejar que muera –digo con furia, como se supone que viva todo de nuevo sabiendo que lo perderé
– Escúchame Viviana, no te traje a esta época para que cambies las cosas y evites su muerte, te traje para que tu mente lo acepte y puedas salir de ese estado –dice y niego
– No me importa, no puedo dejar que muera, yo lo amo –digo pero ella no dice nada
– Voy a cambiar las cosas, él no morirá – digo y ella niega
– No lo hagas, ese es su destino, el tuyo es vivir, y salir adelante, no puedes cambiar nada, no sabes cómo afectara el futuro – dice con firmeza
– Si él muere yo también moriré, porque no puedo vivir sin él –digo sabiendo que es la verdad, que si no puedo salvarlo me iré con él
– No es así, no cambiaras nada – dice y desparece, el frio de la habitación también se va, y solo me siento en la cama a llorar.