Me voy caminando hacia donde ella está, mis pasos son tan cortos que hasta los pies se me intentan torcer, está vestida tan elegante que hasta yo me veo informal, su figura se ve magnífica que me sorprende porque el interés de Mario se mostró y con ese escote tan controversial hasta a las mujeres se nos van los ojos. Llegó y el rostro de Lorena está perfecto se ve tan hermosa hasta un simple respiro le refresca sus expresiones, no me sonríe como siempre lo hace más bien continúa, con sus gestos tan esporádicos que cambia en cada segundo que transcurre, ¿por qué no es capaz de hablarme? sí, ya habíamos regresado a ser las mejores amigas del mundo. —Hola Julia, ¿Qué haces aquí? Ya no me tienes confianza, por eso prefieres guardar todo en secretos, sí sabías que no tiene sentido, puesto que