La Loba Rota

Capítulo 9

—Me gusta como suena eso, Sus Majestades —me dice Seth mientras coloca su dedo debajo de mi barbilla y la levanta mientras se inclina y me besa suavemente.

Que me llamen Su Majestad es extraño y se siente mal, pero el beso se siente tan bien, que lo olvido por completo. En el momento en que nuestros labios se tocan, empiezan a hormiguear y casi arden, pero no dolorosamente. Seth es tan grande e imponente que realmente me sorprende lo suave que es su contacto cuando está conmigo. Se aleja y suelta mi barbilla, deslizando su mano por mi brazo hasta llegar a mi cadera y coloca su frente contra la mía.

—Eres mía —me susurra y asiento con la cabeza—. Estaba enojado porque estabas saliendo con ese Alfa sin emparejar —me dice.

—Lo siento. No le di importancia, pero lamento que te haya molestado —le digo honestamente.

—Por favor, no estés a solas con nadie hasta que estés marcada. No quiero que te pase nada —dice, pasando sus dedos suavemente por el lugar donde iría su marca, enviando escalofríos por todo mi cuerpo.

—No lo haré, lo siento —me disculpo nuevamente—. Estaba tan emocionada de que alguien realmente quisiera ver lo que he creado, que olvidé las reglas.

—¿Las reglas? —me cuestiona y me doy cuenta de que, en su enojo, se perdió todo lo que estaba detrás de él.

—Sí. Es posible que no hayas notado al Alfa Randall y al Alfa Robert detrás de ti, pero los superaste para llegar a mí —le digo con una pequeña risa.

Seth levanta una ceja confundido.

—¿Te refieres a tu padre y hermano?

—Sí, pero estaban enojados y definitivamente venían hacia mí como Alfas dominantes —le digo—. Parecieron relajarse un poco cuando viniste con nosotros, y nadie me ha conectado mentalmente para regañarme —sonrío con malicia.

—Me gustaría mucho si me mostraras los jardines por la mañana. Escuché que has trabajado duro aquí, pero si soy sincero, no me di cuenta de cuánto. Sistemas como este realmente podrían ayudar a algunas de nuestras manadas más pequeñas y menos acomodadas algún día —Realmente me conmueve que él estuviera escuchando e interesado.

—Sí, podemos recorrer los jardines por la mañana de camino a las cataratas si el Rey lo aprueba —le ofrezco con esperanza.

—Estoy seguro de que lo hará. Creo que en realidad está bastante emocionado de poder pasar un tiempo contigo. Ambos lo estamos —me responde y me hace sentir bien que estén interesados en conocerme a pesar de que no soy la pareja ideal.

Escuchamos el cuerno y me doy cuenta de que debimos haber perdido la noción del tiempo y hemos estado aquí abajo durante bastante tiempo. El cuerno señala la carrera de la luna llena, donde toda la manada, o al menos aquellos en la manada que pueden transformarse, corren afuera en forma de lobo. Esto ayuda a fortalecer a sus lobos y los ayuda a unirse. Los hombres lobo pueden transformarse en cualquier momento cuando es necesario, pero hay algo especial en la carrera de la luna llena, y no es común tener tantos Alfas juntos en un solo lugar, especialmente con la familia real también.

—Deberías salir —le digo—. No te lo quieres perder.

—No quiero dejarte —respira mientras me aprieta en sus brazos.

—Estaré bien, Seth. Puedes acompañarme hasta mi suite, solo necesito agarrar unos ingredientes primero —le digo y él me suelta, retrocede un paso y me permite ponerme de pie. Lo llevo primero a la despensa y lleno mis brazos, luego al refrigerador y él también llena sus brazos.

—¿Qué planeas hacer esta noche exactamente? —me pregunta mientras mira el lío que he creado.

—Los muffins favoritos de mi papá. No te preocupes —le aseguro con una sonrisa—. También habrá suficiente para ti.

Estamos a punto de salir cuando me detengo y regreso a mi oficina, regresando con el resto de la botella de vino abierta. Seth se ríe y sacude la cabeza.

—¿Qué? Será una noche larga —le digo. Caminamos por el pasillo hasta mi suite, abro la puerta y entro, pero me doy cuenta de que Seth se ha detenido en el umbral—. ¿Todo bien? —me giro y le pregunto.

—Sí, simplemente no estaba seguro de que estuvieras bien con que esté aquí.

—¡Por supuesto que sí! —le digo y finalmente cruza el umbral y echa un vistazo alrededor.

—Es muy tranquilo aquí —dice.

—Gracias. Eso es lo que buscaba —le digo, apreciando que alguien más lo encuentre tranquilo, aunque no dejo entrar a muchas personas aquí. Cuando me mudé a habitaciones sin ventanas, decidí optar por la oscuridad y hacerlo lo más relajante posible. Las paredes son de un gris más oscuro para que no muestre tanto las sombras y tengo plantas por todas partes, con muchas luces de crecimiento. Seth me sigue hasta la cocina y coloca los objetos que tiene en la encimera junto a mí.

Parece estar luchando cuando se acerca y me aprieta contra su pecho.

—¿Estás SEGURA de que estás bien estando sola? —me pregunta y puedo decir que está preocupado por mí.

—Estaré bien. No es mi primera luna llena y mi familia tiene todo un plan establecido. Si ocurre algo, ABSOLUTAMENTE cualquier cosa, llamaré mentalmente a papá y a Robbie de inmediato. Creo que uno de ellos suele quedarse bastante cerca de la casa de la manada por si acaso —le digo y pongo mis manos en su pecho—. Es lindo que te preocupes, pero te lo prometo, estaré bien. Honestamente, estoy bastante emocionada de beber el resto de ese vino y hacer el desayuno para ti mañana. Estaré dormida incluso antes de que todos ustedes regresen.

—De acuerdo, pero necesito que cierres la puerta antes de irme. Buenas noches, Molly. Ha sido maravilloso conocerte hoy —dice y se inclina para besarme de nuevo. Este beso no es tan suave como el último, pero está lleno de emoción. Se aleja y me susurra:

—Si me pides que me quede, lo haré.

—Deberías irte, Seth. Ve con los otros lobos —digo con un pellizco de tristeza.

Él me suelta y camina hacia mi puerta mientras lo sigo. Sale y se vuelve hacia mí.

—Nos vemos por la mañana —dice.

—No puedo esperar —le digo honestamente—. Buenas noches —afirmo mientras él se inclina hacia adelante y me besa una vez más.

—Buenas noches —dice y me suelta para cerrar la puerta. Cierro la puerta como me pidió y puedo escuchar sus pasos mientras se aleja cuando el cuerno vuelve a sonar, señalando que la carrera está por comenzar. Me quedo en la puerta esperando a que su olor desaparezca por completo antes de volver a la cocina.

Otra luna llena sola, pero esta vez no es tan malo. Cuando era pequeña, llevaban a todos los niños a la casa de la manada y los niños mayores nos cuidaban. Cuando Robbie y yo éramos los mayores cuidando a los más pequeños, conseguíamos refrescos y golosinas, hacíamos palomitas de maíz y simplemente teníamos una gran fiesta cada vez. Las lunas llenas no siempre fueron terribles, tuvimos algunas realmente divertidas de pequeños, pero a medida que crecía y me di cuenta de que no tenía una loba y nunca cambiaría de forma, se convirtieron en un momento de soledad para mí.

Al principio, mi madre intentó mantenerme con los niños, pero a medida que seguía creciendo y aún no había cambiado, finalmente accedió a dejarme quedar en otra parte de la casa de la manada sola. Solía vivir en la habitación de arriba al lado de mis padres y salía al balcón por un rato y los observaba a todos: felices y enérgicos, pasando tiempo como manada. Sin embargo, se volvió cada vez más difícil de ver, ya que cada luna llena me hacía sentir más alejada de ellos. Una vez que me mudé abajo, se volvió un poco más fácil lidiar con ello, ya que no tengo ventanas, así que no puedo oírlos ni verlos ahora. Sé que me están dejando afuera, pero duele menos que ver lo que me estoy perdiendo cada vez.

Comencé a hornear mucho durante este tiempo. Me ayuda a sentirme conectada a la tierra, incluso si no cambio de forma como todos los demás. Es mi propia manera, supongo. Empiezo a juntarlo todo para hacer muffins para la mañana y a pensar en todo el día.

No debería haber huido cuando Robbie vino a buscarme. Seth parece ser un chico realmente agradable y debería haberle escuchado, pero tenía tanto miedo. Y él sigue diciéndome que no me rechazará. Incluso me llamó suya. Pero hay tantas formas en las que no estoy preparada para ser una pareja y mucho menos la futura reina. Pero cuando nuestros labios se encontraron por primera vez, empecé a olvidarme de todas esas cosas y a sentir que él es realmente mi pareja. Tal vez debería enumerar los problemas de manera que él pueda tomar una decisión informada y estoy segura de que ni siquiera ha considerado que ni siquiera puedo marcarlo, lo cual parece bastante problemático para el Rey.

Mi papá no siempre ha sido muy comprensivo con mi amor por la cocina, pero al final terminó aceptándolo. La mamá de Oliver me enseñó a hacer estos muffins y la primera vez que los hice para mi papá, le encantaron y a veces me pedía que los hiciera. Sé que intentaba entender y estoy agradecida de que mi mamá le ayudara a entender. Papá es el Alfa y lideraba la manada, pero mamá es definitivamente quien dirige a nuestra familia. No importa cuánto discutamos papá y yo, o incluso papá y Robbie, mamá siempre está ahí para ayudar a resolver las cosas.

Finalmente termino de hornear y decido irme a dormir. Me meto en la ducha y luego me pongo unos pijamas y me acurruco en la cama. Rápidamente me quedo dormida, pero después de unas horas me despierto con el olor de Seth. Se va rápidamente después de que despierto y me doy cuenta de que el vínculo puede ser más fuerte de lo que pensaba. Tal vez, solo tal vez, sea lo suficientemente fuerte como para que él me acepte.