Los impulsos.
Creer que todo comenzó por un impulso mío, lo se lo sé.
Todos quieren saber de qué estoy hablando.
Soy Sarah Di y tengo 23 años, vivo y estudio en California, papá y yo nos mudamos hace un año luego de la muerte de mamá.
No paso mucho tiempo para encontrar un reemplazo, hoy en su boda lo único que pienso es en el "horrendo vestido de novia que alguien puede lucir con orgullo".
Megan la mujer de mi padre venía con un paquete ósea su adorable hijita Andrea, es una niña mimada que cambia de novio como de ropa interior.
El vestido que llevaba puesto era horrendo y me quedaba apretado, lo único que quería era marcharme de este lugar y descansar de todo este infierno.
Mientras me servía un poco de comida y observaba el lugar pude notar a mi hermanastra mirar a todos los lados mientras entraba al cuarto apartado del evento junto a Claudio, el niño mimado por papa.
Y me preguntaran porque me importa, la verdad no me importa, pero me da curiosidad dado que su cita se encontraba sentando al rincón junto a mis abuelos, se veía que era un chico tímido, usaba lentes, traje un poco chapado a la antigua, peinado soso, sus mejillas estaba más rojas que un tomate.
--¿Por qué miramos a la cita de la bruja?—frunciendo el ceño sonreí a mi prima Amanda quien come un poco de pastel.
--Es curioso—ella se carcajeo—Venga que es verdad, es la clase de niño que le presentarías a tus padres pero no a tus amigos, lo curioso ¿es que busca Andrea en esa relación?
--Fácil y sencillo, es el típico nerd de la universidad que ayuda a tu hermanastra a cursar cada clase de su carrera—note como pedía permiso a mis abuelos para ir al baño tan respetuoso, él era muy alto y de espalda ancha.
Era tan inocente, parecía un niño de 6 años maravillado por el gran jardín.
--Sarah?—observe a mi prima confundida por su voz—por qué sonríes así?
Me acerque a su oreja y le susurre algo que pronto recordare.
--¿Me podrías decir donde se encuentra el baño?—Amanda se carcajeo cuando su hermano Matías envió a chico tímido por el sendero oscuro y viejo del evento.
--Venga vamos por unos tragos y de paso te presento a unos amigos que acabo de conocer—asentí caminando a su lado.
Los dos chicos hijos de socios de mi padre eran tipo mimando y con un ego que llenaban el lugar.
Uno de ellos intento tocar una de mis nalgas y fue todo lo que pude soportar.
--Si lo vuelves hacer juro que cada uno de tus dedos están en tu jodido culo!—aparte su mano y este se sintió ofendido.
--Con esa boca comes?—me aleje de la mesa dejando sola a mi prima.
--Sarah cariño por favor busca de tu hermana, es hora de la foto familiar y necesito de ella—gruñí disgustada y fastidiosa por todo. Lo único que quería era dormir.--¿Sarah?
--Iré por ella, abuela—ella sonrió alejándose.
Revise las llamadas perdidas de mi teléfono, me aleje de todos buscando a mi hermanastra.
Sin darme cuenta tropecé con alguien, que al parecer estaba llorando.
Levante mi rostro para encontrarme con el chico tímido y frágil de mi hermanastra.
--¿Hola?—exclame confundida por sus lágrimas.
--Perdona no quise lastimarte—guarde mi teléfono.
--Claudio mmm si mmm!—fueron asquerosos esos exclamo, mis ojos jamás dejaron los de nuevo chico.
la decepción y tristeza jamás se marcharon de sus ojos.
--Pero que carajos!—exclame furiosa abriendo la puerta de la caseta de la iglesia.
Mi sangre se helo cuando vi a mi hermanastra casi desnuda encima de Claudio, los dos sorprendidos al ser descubiertos.
--Sarah j***r que rayos haces aquí!—negué asqueada tirándole su ropa, ella dejo de coger su blusa cuando una sombra gigante se asomó detrás de mí—Mierda!
El muchacho se alejó con la tristeza más grande del mundo, se podía sentir cuan afectado se encontraba.
--Alex espera por favor!—la detuve cuando estuvo en la puerta.
--Límpiate, das vergüenza así—ella maldijo soltándose de mi mano, cuando estuvo lista fue tras el chico tímido con el corazón destrozado.
Mientras miraba por donde se fueron los dos, pude escuchar carcajearse a Claudio, cruzada de brazos me gire y lo observe.
--¿Qué se te hace gracioso?—pasó un brazo por mi hombro como si fuéramos amigos de tantos años.
--Ese patético chico cree que ella esta con el por qué lo ama—era divertido, no dudaba eso.
--Vístete y mantente alejado de ellos—me marche, buscando a los tortolos.
--Por qué carajo haces esto ?—me pregunte fastidiada por ser la niñera de ella.
Mientras la buscaba iba golpeándome mentalmente.
Choque con alguien.
--Disculpa—exclame siguiendo mi camino pero me detuvo esa persona sosteniéndome de mi brazo, sorprendida recorrí la mano que me sostenía hasta llegar al rostro.
Mi piel se volvió fría.
--Sarah—aparte su mano de mi bruscamente alejándome de él, j***r porque tenía que volver!!!!—Por favor Sarah, dame un segundo..
--No te atrevas si quiera a tocarme Cole!—mientras iba detrás de mi suplicándome que me detuviera, pude notar a Andrea y al chico tímido discutir .
Me detuve curiosa.
--Sarah por favor déjame explicarte lo sucedido—me cruce de brazos con el ceño fruncido, totalmente enojada.
--Te doy dos minutos, luego de eso te puedes ir al carajo!—el asintió tragando saliva.
Comenzó a decir algo que jamás preste atención, su boca se movía pero mi mente estaba en la conversación de mi hermanastra.
--Por favor Alex entiéndeme que estoy perdida de alcohol y juro que lo confundí contigo cariño—podía notar como tocaba sus manos para ganarle.
--Eso es tan horrible como lo que acaba de suceder Andrea—susurro el tan bajo que casi no pude escuchar bien.
Andrea soltó sus manos fastidiadas, se limpió sus manos en el vestido.
--Oh venga ya Alex déjate de tonterías, borra lo que viste y ya!—por un segundo me dedique a observar el rostro del chico, debajo de esos lentes y esa casi barba, con su cabello horrible peinado el era simpático.
--¿Qué borre el hecho de ver a mi novia follar con otro tipo?!—exclamo abochornado de decir follar, pero note un poco de coraje en su tono y eso me gusto.
--Eso fue lo que sucedió y tu jamás me dejaste explicarte…..solo te marchaste y me bloqueaste en todo—volví a la conversación presente en la que no había prestado ninguna atención, no sabía qué carajo me había dicho.
--¿Qué?—exclame confundida.
--No te confundas Alex, ¡novia!? Jamás lo fui—voltee para ver la discusión de Andrea—Solo eres un amigo que quiero mucho, pero novia jamás….ja jajá por favor mírate y mírame a mí—las personas cerca comenzaron a murmurar y reírse del muchacho, sus mejillas eran totalmente rojas, sus lágrimas salían y el dolor en sus ojos aplasto mi corazón.
--Todo este tiempo me usaste?—susurro el con su voz quebrada.
--Deja el drama Alex, sabias que solo eras un amigo…
--¿Qué clase de amigo?—mi abuela se acercó a ellos intentando parar la escena que estaban dando en la boda.
--La clase de amigo que me ayuda en mis deberes y cuida de mis objetos mientras salgo con mis amigos de baile—exclamo ella con burla, note lo sorprendida que estaba la abuela al escucharla hablar de esa forma—Bueno esto ya me aburre, olvida todo lo que viste y volvamos a la fiesta—ella lo tomo de la mano pero él se apartó dolido—Alex?—por un segundo me vi en el, la misma situación y con el mismo corazón destrozado—Oh vamos hombre, quien carajo se iba a enamorar de tremendo monumento, debes agradecerme que te deje estar conmigo ¿ por qué crees que te respetan en el instituto? por ser inteligente no cariño, por mí!
--Baja la voz Andrea, es la boda de tu madre debes respetar el momento—la abuela intenta no hacer notar lo dramática que era Andrea.
--Que alguna chica aquí presente me diga si os parece guapo este nerd!—lo señalo con asco, todos comenzaron a reírse y murmurar.
Si se podía hacerse más pequeño él lo desearía, por algún motivo el corazón me dolía y la ira me mataba. Quería golpear a esa perra.
--Dame una respuesta Sarah—Cole tenia esperanza y mi menta estaba en el chico tímido siendo humillado.
--¿Quién podría besarte sin vomitarse?—no supe cuando mis piernas se movieron, pero ya estaba entrando en la discusión de ellos.
El chico tímido tenía la cabeza baja, notaba las lágrimas caer y sus puños fuertemente cerrados.
--¿Sarah a donde carajos vas?!—hice el dedo malcriado haciéndole saber que me parecía un culo todo lo que tenía que decirme.
--¿Qué haces aquí Sarah? Vi a Cole buscándote—sonreí tiernamente parándome frente y muy cerca del chico tímido, este noto mi presencia y levemente levanto su rostro—Sarah?—tome su rostro y levemente bese sus labios, atrayéndolo a mi jalando de su camisa, pude notar que lo tome por sorpresa.
Sus labios eran suaves y sus besos tenían un sabor salido y dulce, su respiración suave, por lo torpe que era podía notar que soy su primer beso y eso me lleva a que el muchacho era virgen y por algún motivo eso me gustaba más.
Cuando me aleje porque Andrea se interpuso, pude notar lo sorprendido que estaba el, se tocaba sus labios y jamás dejo de verme.
--¿Eres loca o que?!—sonreí como una perra apartando su mano su pecho.
--Soy la clase de chica que lo besaría una y mil beses—mi abuela cerro los ojos y me imagino que está regañándome mentalmente.
--Es mi nerd—exigió ella intento tomarlo de la mano para alejarlo, pero me puse frente a él impidiéndole llegar.
--Me importa un carajo lo que creas que es tuyo—gire levemente mi rostro para verle—Ahora es mi chico—le di mi mano esperando la tome, Andrea hizo lo mismo y sonrió pensando que él iba a tomar la suya y hasta tuve mi duda.
--Alex cariño sé que estás enojado, si vienes conmigo prometo que te lo recompensare—el observo su mano y luego mis ojos.
--No voy a prometerte fantasías—hable tan sincera que me sorprendió
—Pero puedo intentar mostrarte el mundo de otra forma.
Sonreí cuando tomo mi mano, cerré mis dedos en sus largos y gruesos dedos.
Nos alejamos, subiendo en mi auto le señale el asiento alado del mío.
--No muerdo—hable juguetona, podía ver lo difícil y avergonzado que eso le ponía, baje del auto y sostuve su rostro haciendo que vea el mío.
Eran tan azules, hermosos.
--No me conoces, ni yo a ti pero te prometo que te sentirás mucho mejor subir al auto y alejarte de todo esto—y por algún motivo volví a besar sus labios….eran adictivos sus labios, el calor de su cuerpo.
--Sarah Emily Di vuelve aquí ahora mismo!—me aparte de el, viendo a mi padre caminar furioso hacía nosotros.
--Es hora de marcharnos—exclame, el asintió subiendo al auto, encendí y me marche del lugar tirando el ramo de flores en el camino.
Me sentía feliz, era un sentimiento difícil de explicarlo….me sentía viva.
Note como temblaban sus manos, levemente fui tomando y entrelazándola con la mía.
Era una chica muy compulsiva y siempre me metía en problemas por ello.
Pero han tenido ese sentimiento o necesidad de algo, que algo sean suyo.
Mientras estacionaba frente a su casa, una casa humilde pero muy hermosa donde estaban sus padres y hermanos afuera haciendo una parrillada, el bajaba del auto cuando su madre se acercó viendo los ojos rojos de su hijo.
Cuando vi que debajo de esa nerd como decía Andrea hay un chico de hermosos sentimientos que abrazaba a su madre como intentando protegerla de su dolor supe que era lo que quería.
Mientras me miraba en el espejo me sonreí a mi misma.
--Eres mio—susurre bajando del auto.
Él iba a ser mío, nunca había querido nada como lo hacía ahora mismo.
--¿Quién es ella hijo?—él se sorprendió cuando me abrace a su cuerpo asentando mi cabeza en su pecho y entrelace sus dedos a los mios.
--Soy Sarah Di—levante mi rostro para ver el suyo sonriendo pícaramente—Novia de Alex.
Los ojos de su madre brillaron y me abrazo sorprendiéndome.
--Oh Dios mio gracias, gracias por hacer que mi muchacho consiguiera novia—las mejillas de mi chico se volvieron rojas—Max, Alex trajo una chica!
--Eso veo Cloe, eso veo ¿pero quién es?—el hombre se acercó dándome la mano.
--Es su novia—exclamo feliz la señora, es que parecía que fue el mejor regalo que se le pudo hacer—pero vengan por favor, conoce a la familia.
Ella intento jalarme pero me detuve.
--No quiero dejarlo solo—tire de el a donde su madre quería llevarme. La señora dejo salir un gemido de felicidad.
Me presento a todos sus hermanos, eran muy guapos y musculosos, todos tenían novias menos Trevor que era mayor por un año que Alex.
--¿Cuánto te p**o para hacerte pasar por su novio en el cumpleaños de mama?—sentí el puño fuertemente de mi chico.
el rostro de su madre se volvió triste mirando a su hijo.
--¿Te p**o por hacerte pasar como su novia?—el se intentó soltar de mi mano, pero apreté más fuerte mirándolo fijamente.
Me carcajee negando.
--Qué clase de hermano eres?—Trevor también sonrió sentándose frente a nosotros—Nadie me p**o nada, estoy aquí porque—levante su rostro sonriéndole feliz, bese la punta de su nariz disfrutando de su cercanía—Amo a Alex, es un chico maravilloso, respetuoso, cariñoso, es la clase de persona que quieres guardarla en su corazón para que el mundo no lo contamine de tanto odio o envidia.
--Cariño—exclamo su mama con nostalgia.
--Él es el mejor chico que podía existir y le agradezco señora por hacer de su hijo un buen hombre—Alex se sentó, y me senté en sus piernas pasando mi mano por su cuello feliz.
--Eso te ha dejado como un idiota jajaja –exclamo Patrick el hermano mayor de Alex que se carcajeaba de Trevor—Bienvenida a la familia Sarh, espero verte más a menudo por aquí.
--Bueno, bueno tranquilícense todos, la chica ya ha hablado y dejo claro todo—mientras servía la comida el papa de Alex exclamaba—a comer.
En toda la cena jamás deje su mano, estaba tan metido en sus pensamientos que cuando estuvimos solos se sorprendió cuando bese levemente sus labios.
--¿Por qué haces esto?—me encogí de hombre negando.
--Soy la clase de chica que te jodera la cabeza al intentar entenderla—sonrió y juro que fue la sonrisa más hermosa que había visto—Solo dejemos que fluya a ver a donde nos lleva esto.
Se hizo muy tarde y juro que no quería ir a casa y por algún motivo sus padres no pusieron problema alguno que durmiera en su habitación.
--Puedes por favor bajar el cierre del vestido?—el asintió tragando saliva, sus dedos temblaban mientras bajaba el cierre.
--Puedes ponerte una de mis camisa—asentí sonriendo cuando cerró los ojos al caer mi vestido, puedes abrirlos…no creo que tenga algo que no hallas visto antes, levemente me observo y se sonrojó.
Retrocedió cayendo en cama sentado cuando camine a él.
--¿Por qué te sonrojas?—trago saliva cuando me senté en sus piernas con tan solo bragas y sostén--¿No has visto a una mujer desnuda?
Negó sonrojado, pase la lengua por mis labios sedienta de él, el saber que fui su primer beso y su primera visión de una mujer bragas me prendía un montón.
Levemente comencé a besar sus labios recostándolo por completo en la cama, encima de el comencé hacer círculos mis caderas amando la fricción que hacia su cuerpo con el mío. Poco tiempo tuvo que pasar para sentirme húmeda y con mis senos tensamente, bese su cuello, lamiendo la zona sensible de su cuello, podía notar su pulso y lo delicioso que estaba disfrutando de mi toque.
Sus caderas comenzaron a levantarse con las mías, escuche su gemido y de pronto me detuvo tirándome en la cama mientras se levantaba de ella, asustado cubriéndose la parte de su pantalón, me sentí rara cuando el entro a su baño cerrando la puerta con él.
Confundida me senté en la cama buscando respuesta alguna.
--Loca iba a volverme—exclame despacio tomando su camisa para ponérmela pero algo en la cama me detuvo—Mierda!—él se había venido con mi toque y le fue bochornoso eso.
Me mordí los labios sonriendo feliz, eso quería decir que mi cuerpo le afectaba sexualmente.
Me vestí rápidamente, cambiando las sabanas de su cama, pude escuchar la ducha.
Él era virgen y no sabía cómo tomar esto.
--¿Por qué has cambiado mis sabanas?
-quise evitar reírme pero imposible, vestía un pijama de viejo, su camisa estaba abrochada hasta el cuello.
--Perdona, perdona es que jamás vi a un chico con un pijama tan formal-el rojo en sus mejillas volvieron-Por torpeza regué un poco de agua en las sabanas, así que las cambie.
Si el supiera que su semen había quedado en esas sabanas creo que jamás volvería hablar.
--Puede dormir en la cama, dormiré en el sillón...-- por algún motivo me gustaba su olor