[ANAHÍ]
Al día siguiente: 3 de junio
Una suave sensación en mi espalda me hace abrir los ojos, aunque la luz del sol colándose por la ventana tampoco me deja seguir durmiendo mucho que digamos… al hacerlo, lo primero que veo es mi mano apoyada sobre la almohada y los dos anillo que llevo en esta, al menos por ahora para no perder ninguno de los dos. Esto me hace sonreír, pero más cuando siento sus manos masajeándome —Buenos días mia vitta— Me susurra.
—Buenos días, entonces ¿no fue un sueño todo lo de anoche?— Le pregunto mientras que él sigue con su tarea.
—No, no lo fue… supongo que el vino no te ha borrado la memoria ¿no?— Inquiero y rio.
—No, recuerdo muy bien tu romántica proposición de matrimonio, nuestra noche en esta cama y nuestro momento pasional con el gelato… y la ducha, c
