—Jon hace, pero mucho, mucho frío— Dije tiritando de pies a cabeza.
Jon detuvo el caballo de inmediato. Desacomodó su gabán de su cuerpo colocándolo sobre mis hombros. Ajustó de nuevo su espada al pecho.
—Si usted no está con vida Jon... ¿Por qué el abrigo aún esta tibio, como es eso posible?
No tenía idea en qué consistía ser un inmortal de su especie. Necesitaba saber que ocurría realmente con él.
— ¿Qué insinúa princesa? — Preguntó, acicateado a Galimatías para que continuara avanzando, pero esta vez más lento; un leve trote.
— ¿Jon, usted está vivo o muerto? Para mi punto de vista parece más vivo que muerto.
Sonrió inevitablemente.
—Creo que es un poco de ambas. Me mantengo de pie de día, y parezco un ser normal común y corriente, por las noches mi naturaleza es distinta, mi p
