Sophia vendo con cuidado la herida de aquel muchacho, al terminar se quedó mirando fijamente el rostro de aquel muchacho, Enora al ver que su hermana estaba embelesada con el rostro de aquel muchacho le cubrió los ojos y le dijo. _ Si le sigues viendo de esa manera me temo que vendrá a tu mente el pensamiento de llevartelo a casa, así que vámonos. Sophia retiró la mano de su hermana y le dijo. _ ¡No podemos dejarlo aquí!, pronto anochecerá, algún animal salvaje podría venir y comérselo. _ Eso significaría que su destino es morir. _ ¡Enora! _ Ya sabía yo que esto pasaría, Sophia debemos volver a casa antes de que se den cuenta de que no estamos, asi que vamonos, ya has hecho todo lo que podías por él. _ ¡Enora! Sophia la miraba con ojos de borrego recién nacido, al final Enora no tu