ALIANNA
Pero cuando estaba en la escuela secundaria, el negocio estaba pasando apuros. La nueva dirección de los restaurantes cambió a nuevos mayoristas. Los antiguos clientes habituales empezaron a reducir el tamaño de sus pedidos. El dinero escaseaba. Fingí no saberlo, pero papá le pidió dinero prestado al padre de Andre dos veces cuando yo estaba en la escuela secundaria, solo para mantenernos a nosotros y al negocio apenas a flote.
—Sí, recuerdo que el almacén no estuvo tan bien por un tiempo—, admitió Andre con un toque de culpa en su voz. —Solía escuchar a mi papá hablando con el tuyo por teléfono—.
—Está bien. Todos sabían que estábamos luchando. Simplemente fueron misericordiosos y fingieron no hacerlo—, me encogí de hombros, tratando de parecer alegre aunque mi cara ardía por
