24

820 Words

24 Después de un par de rondas más de llenarla por completo, Barbara se dió por vencida y me pateó lejos de ella. — Ya no puedo más — Me dijo. Yo agarre su tobillo y la acerque a mi, abrí sus piernas y mire su coño, que estaba rosado he hinchado, y lleno de mi. — Una más — Le pedí. — Ya no tengo energía para más — Me dijo. Yo la acerque más, y con la punta de mi p*lla empecé a jugar en su entrada, se sentía tan resbaladizo. — Déjame entrar por última vez, quiero ver cuánto de mi leche sale — Le pedí. Barbara puso los ojos en blanco y después asintio con la cabeza. — Eres un pervertido — Me acuso. Y si, claro que era un pervertido, está niña había presionado todos los botones correctos en mi, me tenía loco, jamás en mi pu+a vida había deseado tanto a una mujer, como lo hacía con e

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD