Nuevo Alfa

Manadas

Dylan atrapó a su hijo entre sus brazos revolviendo su cabello mientras que el menor reía divertido. Los de la manada del castaño veían esa escena con unas sonrisas en sus rostros. Ver al castaño convivir con esos cachorros hacía que sus corazones se entibiaran, cualquiera que los viera podría ver el profundo amor que el mayor le tenía a esos chicos y los cachorros también amaban con todo su corazón a Dylan. Ellos podían no compartir un lazo sanguíneo pero eran una familia bastante unida y llena de amor.

- Bar es demasiado inteligente – dijo Oliver divertido viendo con orgullo a su hermanito – Por cierto, papá habla todo el tiempo de ustedes y de las cosas que pasaron aunque siempre habla más de Tyler

Tyler esbozó una gran sonrisa inflando su pecho con orgullo al saber que el castaño hablaba de él con su manada.

- Alfa, deja al cachorro – dijo Howard divertido viendo con el cachorro reía

Los de la manada del castaño estaban acostumbrados al ver al castaño convivir con sus cachorros, además de que los hacían sentir completos. Dylan no solo era su alfa sino que era la persona que los había salvado, les había dado un hogar, un lugar donde pertenecer, al cual volver; daría todo por su alfa, porque siempre mantuviera esa sonrisa que podía alegrarlos en los peores días.

- ¿Podemos quedarnos en el territorio? – preguntó Dylan viendo a los otros dos alfas ya más tranquilo pero aún tenía a su hijo enganchado a su cadera

- No hay problema Dylan, este también es tu hogar y puede que ya tengas tu manada pero siempre serás familia – dijo Tyler esbozando una sonrisa revolviendo el cabello de Oliver

- Opino igual que Tyler, no importa que seas un alfa, este sigue siendo tu hogar – dijo Scott tratando de ignorar que el castaño no le dirigía la mirada desde que había vuelto al pueblo

- Gracias, prometo que no causaremos problemas. miró a Tyler - ¿Aún eres dueño del edificio dónde estaba tu loft?

- Si. He rentado algunos de los departamentos, tengo uno bastante grande que podría servirles

- ¡Sería genial! El lugar donde nos quedamos solo permiten una semana y no había encontrado algún lugar donde pudiéramos estar todos, después de todo no podía llegar y meterlos a todos en la casa de mi padre y menos ahora que está con Ian

- Pero no nos dejaste buscar a nosotros, podíamos haber ido – dijo Matthew poniendo los ojos en blanco

- Son un desastre, no conocen el pueblo y no quería que me llamara mi padre desde la estación diciéndome que unos chicos estaban tras las rejas por alguna clase de estupidez que se les ocurre – dijo Dylan levantando una ceja al ver como sus betas se reían

- ¿Cómo es que terminaste teniendo cachorros peores que tú? – preguntó Ian divertido

- Será mi karma – dijo Dylan acariciando el cabello de sus hijos 

- Alguien debía de darte los problemas que tú dabas – dijo Colton divertido

- Tan graciosos como siempre Col – le respondió el castaño divertido – Pero debo decir que ellos me han causado problemas desde el inicio ¿no Matt?

El azabache rio nervioso mientras ambos recordaban como se conocieron.

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Dylan corría detrás de un sospechoso que habían encontrado en una de las escenas del crimen. Uno de sus compañeros iba detrás de él pero se detuvo agotado diciendo que llamaría a los refuerzos, el castaño ni siquiera se detuvo. Llegó a un callejón donde pudo al dispararle al chico en la pierna deteniéndolo de inmediato.

- Cuando te dicen que manos arriba no debes de correr – le dijo Dylan acercándose a él poniéndola unas esposas

Mientras llamaba a los demás por el radio diciéndole que había atrapado al sospechoso y necesitaban una ambulancia, riendo cuando su compañero le decía que debía de dejar de dispararles a todos. Había pasado ya un año desde que lo había mordido y seguía siendo un alfa sin manada y estaba bien por el momento aunque jamás espero que si primer beta cayera del cielo, literalmente.

Frente a Dylan cayó un chico azabache cubierto de sangre y quejándose, el castaño alzo una ceja viendo al moribundo.

- ¿Pero qué mierda? Cuando creí que por fin me había salvado de situaciones extrañas el universo parece sorprenderme

Dylan se agacho frente al muchacho volteándolo con cuidando viendo sus heridas, la mirada del chico mostraba temor y dolor.

- ¿Puedes hablar? – el chico negó - ¿Quieres vivir? – asintió – Voy a hacer algo, puede que no sea lo mejor pero solo de esta forma podrás sobrevivir, prometo cuidarte

Dylan se transformó acercando la muñeca del azabache mordiéndolo con fuerza ignorando los gritos del que había esposado. Al terminar vio que al parecer no había reacciones de no aceptar la mordida así que lo ocultó un poco para después tomar al otro hombre.

Cuando su compañero llegó se llevó al hombre que veía con terror a Dylan, los demás se retiraron dejando al alfa solo. Cuando se fueron tomó al chico entre sus brazos y se dirigió a su hotel con cuidado de que nadie lo viera, después de todo sería algo bastante extraño que lo vieran con un chico sangrante e inconsciente.

Unas horas más tarde el chico despertó confundido y algo alterado, Dylan se encontraba viéndolo desde el sofá enfrente de él.

- ¿Me recuerdas? – le preguntó Dylan

- ¡TÚ! Me salvaste, gracias aunque debo decir que no me esperaba eso

- Me llamo Mieczyslaw Stilinski, soy un hombre lobo y ahora tu alfa – mostró sus orbes carmesí

- Matthew y debo decir que esto es lo más increíble que he visto

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- Fue la mejor forma para conocerme – dijo el azabache orgulloso

- Cubierto de sangre y cayendo del cielo, en serio me sorprende como puedes meterte en problemas que nadie se imagina como aquella vez que fuiste perseguido por todos los perros de un vecindario

- Los perros están locos – se defendió el otro

- A veces cariño, me das algo de pena – le dijo Caleb divertido al ver la cara de indignado de su esposo

- Me agradan tus betas, Batman – dijo Erika divertida, sabía que se llevaría bien con ellos más con Matthew