Con los cachorros a salvo, las manadas se dirigieron hacía donde Dylan les había dicho que Leonard iba a estar. En la cabeza estaban Tyler, Dylan y Scott, los tres alfas se veían bastante serios y fieros. Los betas iban detrás de ellos de manera silenciosa y solo concentrándose en los latidos de sus compañeros de manada y sus parejas, sabían que la batalla a la que iban iba a ser dura y aunque sabían que sus alfas no dejarían que nadie saliera herido pero también sabían que no eran inmortales e invencibles, había cosas que simplemente no podían controlar. Matt y Caleb sabían lo que podía ocurrir y no dejarían que Dylan agotara su poder y saliera herido, ya habían cometido ese error antes y estuvieron muy cerca de perder a su alfa, los cacorros lo necesitaban y ellos también. Al llegar pud