CIEGA OBSESIÓN

CAPITULO 9

Despierto en una cama grande con sábanas de algodón, las paredes son blancas es una habitación bastante extraña llevo un camisón blanco y tengo un brazalete electrónico en el tobillo izquierdo, me siento a la deriva confundida cuando recuerdo que tuve la oportunidad de denunciarlo y no pude hacerlo y en la segunda oportunidad el pudo escapar, ahora me siento como si mi vida flotara en la súperficie de un océano, sin dónde huir.

Me empiezo a preguntar por Ryan espero este bien si el despierta podria testificar estoy segura el es mi única esperanza.

La puerta se abre y entra Jhon atraves de ella.

-Que bien , ya te despertaste- dice Jhon sonriendo.

- Que mierda quieres de mi.- respondo viendolo con desprecio.

-No te apresures hermosa, lo sabrás es su debido momento.- dice Jhon acercándose a mi y acariciando mi cabello.

Realmente me repugna este hombre, sin escrúpulos.

-Sabes tu piel es tan perfecta debe ser sublime sentir la inexperta sensación cuando te corté tu hermoso rostro.- dice Jhon acariciando mis mejillas.

Me asusto y me alejo de él lo más rápido que puedo.

-No temas si hubiera querido matarte hace mucho lo hubiera hecho aunque no me decido que castigo darte por haber fingido ser ciega todo este tiempo.- exclama Jhon su mirada es siniestra.

- Te lo suplico, no me hagas daño.- respondo con lágrimas en mis ojos.

-Muy bien, ves ese dispositivo en tu tobillo te monitorea las 24 horas y 365 días del año, si intentas averiarlo o forzarlo a quitartelo tiene unos sensores que me avisa inmediatamente, solo yo puedo hacerlo así que si intentas huir y salir de la puerta principal morirás comprendes.- dice Jhon sonriendo con una mirada vacía.

- Si te pasa tan solo la idea de huir por tu mente piensatelo bien, por qué te rompere el cuello de tal forma que tus vasos sanguíneos explotarán hasta que los oiga crujir.- dice Jhon serio.

Estoy tan asustada que con costo puedo tragar saliva.

-Ya quita esa cara, sonríe.- dice Jhon sonriendo.

Es un maldito loco, este hombre está transtornado.

- ¡Te dije que SONRÍAS! -Grita Jhon agarrándome con sus dos manos de las mejillas.

Estoy temblando maldita sea , hago una sonrisa forzada o si no esté enfermo mental es capaz de matarme.

- Escuchame solo a mi, y todo estará bien entre nosotros.- exclama Jhon con ojos de loco.

Tomo su muñeca, con mis manos temblorosas.

El me observa detenidamente.

Me suelta y se levanta de la cama.

- Duchate, que apestas.- dice Jhon.

Sentí como si verdaderamente iba a morir, tomo una ducha dentro de la habitación hay un baño, cuando salgo hay ropa en la cama .

Me pongo un camiseta blanca con pantalones negros y pantuflas hasta ropa interior de mi talla consiguió, salgo de la habitación me está esperando afuera.

Ahora me obliga a que me arrastre a limpiar su casa es un maldito loco, quiere una esclava o que, está casa es enorme, me exigió que cociné y desayunemos juntos aunque me hace comer en el suelo.

Es un enfermo, me hace arrodillárme y comer en el suelo mientras el está en el comedor no me permite subir mi mirada, la atmósfera se torna completamente aterradora, me tiene haciendo los quehaceres cotidianos de la casa como una sirvienta y solo espera que cometa algún error como si necesitara castigarme , como si necesitara desquitar su odio con alguien.

Ese odio lo puedes entender con tan solo ver su mirada, en ese momento el toma cualquier cosa sin vacilación alguna me maltrata.

Cuántas veces ya se ha repetido, no lo sé por eso mi sentido del tiempo ha desaparecido completamente se que han pasado como dos días pero no estoy segura.

Aunque eso ya no importa, lo que importa es el estado de ánimo de Jhon hoy, es lo que me preocupa más, aunque ya me estoy acostumbrando a temer por mi vida.

Estoy cocinando , escucho hablar por teléfono en el pasillo.

-Hoy es el funeral, está bien gracias por avisarme.- dice Jhon sonriendo.

Funeral de quién me preguntó a mi misma.

cuando el se acerca dónde mi.

- Escuchando a hurtadillas.- dice Jhon sonriendo.

- Claro que no.- respondo bajando la mirada .

-Te lo diré por qué estoy de buen humor, Ryan Adams está muerto- dice Jhon contento.

Y yo me derrumbo en mis rodillas, mi última esperanza está muerto, si solo pudiera huir, me siento tan impotente de mis ojos brotan lágrimas de dolor y desesperación.

No voy a dejar mi vida en manos de este Mounstro sin sentimientos.

Debo escapar sin duda aunque tengo tanto miedo, no hay forma de que haga eso sin ser atrapada ha pasado todo el día aquí siempre vigilando mis movimientos, no puedo dejar de pensar si escapó y las cosas resultarán mal no puedo sacarmelo de la cabeza, me degollaria igual que a todas sus víctimas.

- Estás bien, fue una noticia muy fuerte creo que deberías descansar.- dice Jhon mientras me ayuda a levantarme.

El me lleva a cuestas , lo observó e imagino en apuñalarlo pero solo de pensarlo y mi corazón se acelera, si no puedo escapar de un modo desapercibido solo hay una forma de hacerlo y es matandolo.

Por eso debo idear un plan y encontrar el momento ideal, incluso cambie mi exprésion como a él le gusta.

Me recuesta en la cama y fingo dormir, el se acuesta a mi lado.

Se queda dormido a las pocas horas, con los ojos cerrados no pareciera un maldito mounstro, ni siquiera sé dónde estoy por qué el no me deja ir a otros lugares de la casa, al parecer vive solo aunque no sé si hay más personas afuera de la residencia.

Me levanto y abro la puerta de la habitación, sintiendome otra vez como siempre, hoy será el día que rompa su rutina, es ahora o nunca.

Si me descubre podría morir pronto pero no me detendré, se que la alarma sonara apenas salga y si fuerzo el brazalete igual sonara así que saldré de la casa y correré lo más rápido que pueda y intentaré quitarmelo fuera en la menor oportunidad.

No puedo dudar , por qué si me atrapa es capaz de amputarme un brazo o una pierna no me sorprendería de este Mounstro.

Salgo corriendo apenas me alejo de la puerta, bajo las escaleras puedo ver la puerta principal, la abro y salgo afuera apenas puse un pie sonó la alarma,empeze a correr como si no hubiera un mañana .

Hay mucho cesped hay una fuente grande y un camino con una verja negra forjada de hierro la residencia está rodeada de un muro grande , un hombre con linterna me sigue , no voy a parar.

Continuo corriendo con todas mis fuerzas, el hombre sigue detrás de mi pero escucho ladridos de un perro, maldición.

Ya estoy cerca del portón cuando salto e intento trepar la verja y el perro muerde mi zapato lo dejó caer y salto al otro lado.

lastimó mis rodillas y manos pero puedo seguir corriendo, no me detengo puedo ver la carretera no hay nadie ni un alma no tránsita ni un solo auto y estoy rodeada de árboles.

Continúe corriendo unos 30 minutos sin parar pero estoy cansada, ya no puedo más debo descansar me siento en el borde de la carretera, busco una roca y golpeó con fuerza contra el brazalete electrónico hasta romperlo aunque a los minutos veo la luz de un automóvil pasar decido detenerlo , siento un gran alivio al ver que no es Jhon el que está al volante.

- Señor, debe ayudarme me tienen secuestrada acabo de escaparme ,por favor llame a la policía inmediatamente.- vocifero nerviosa.

- Tranquilzese señorita.- dice el hombre desconocido.

Enciende la luz del auto e ilumina adentro de los asientos cuando abro mis ojos atónita, al ver mi zapato en su asiento delantero, es el hombre que me estába siguiendo antes.

Me asusto tanto que cuando intento salir huyendo el me inyecta un sedante en el cuello haciéndome desmayar al instante.

POV Jhon

Dónde quedo el ordenado , controlado y efectivo Jhon, como pude perderlo y como lo encuentro de nuevo por culpa de esta mujer.

Necesito limpiar mi mente, está lucha constante conmigo mismo es difícil.

Aunque permanezca en el silencio o la oscuridad aguardando mis secretos, ahora me siento que tan estoy expuesto ante ella reflejando mis sombras como un grotesco espejo de feria y eso realmente me molesta nada permanece escondido ni siquiera mi verdadero yo.

Esa voz interna que me provoca y ruega por ser satisfecha, pero ese susurro que solo sigue aumentando, hasta que llega el momento, siendo la única voz que escucho formando parte de ese ser sombrío que está en mi, cada vez que mató a una persona.

No sé que me pasa , pero Amanda me descontrola haciéndome perder los estribos de mi propia vida, no puedo dejar que me domine así .

No estoy seguro de lo que soy, solo se que hay algo oscuro dentro en mi y lo escondo, ciertamente no hablo al respecto pero está allí siempre que cuando me domina me siento vivo, totalmente lleno de emoción , no lo combato , no quiero, es todo lo que tengo nadie más puede amarme ni siquiera , especialmente yo mismo.

Pero es solo una mentira lo que me dice mi voz interior, por que últimamente hay momentos en los que me siento conectado a algo más a alguien más, siento como si mi máscara se derritiera y por fin pudiera dar un bocado de aliento con cosas y personas que no me han importado ahora empiezan a importarme y eso me asusta mucho.

Sólo si no existiera absolutos de bueno y malo, si juzgaras todos tenemos algo de maldad en el corazón pero para protegerme siempre pensé cerrar la posibilidad de mostrar quien verdaderamente soy pero está mujer me ve, Amanda me ve aunque ella no lo sabe está mirando debajo de la máscara y no está mirando al otro lado, después de estar bajo toda esa presión ella me hace sentir bien , es posible que me este engañando a mi mismo pero estoy dispuesto a tomar el riesgo.

Los ojos son la puerta del alma y el dolor es la barrera que se acentúa en ella solo se vuelve realidad al atravesar esa barrera, me he preparado para esto toda mi vida ahora me encuentro frente a frente con el ser humano que me hace dudar.

Es una extraña sensación estar experimentando a lo que le llaman amor por primera vez en mi vida .

- Despertaste por fin.- digo sonriendo.

- Que pasó.- Amanda se toca la cabeza aún mareada por el sedante.

- Es algo embarazoso en realidad, me quedé dormido y tú intentaste escapar rompiste el brazalete electrónico así que tuve que optar por lo anticuado.- digo levantando la cadena que está sujeta a su tobillo.

- ¡Pero qué!.- exclama Amanda sorprendida.

- Debo asegurarme de que no escapes otra vez, deberías entenderlo no puedes huir de mi.- dice Jhon asintiendo y sonriendo.

Me acerco a ella , está temblando como usualmente lo hace.

- ¿Por que terminaste siendo prostituta?.- Pregunto curioso.

- Necesitaba dinero.- responde Amanda.

- Entonces harías cualquier cosa por dinero, si fingiste estar ciega no creo que habrá problema acostarte con un asesino.- digo viendola con mucho deseó.

- Yo , es que no..

Empiezo a besarla sin dejarla terminar, luego me alejo y tomo de su mano entrelazando nuestros dedos y le digo.

-Me gustaría que tu y yo mezclaramos nuestros cuerpos.- susurro en su oído.

Empiezo a besar su cuello, se está estremeciendo de placer.

- Suéltame , ¡déjame ir.!- exclama Amanda con una voz temblorosa.

- No lo haré, solo déjate llevar.- susurro excitado.

-No, No, No , No. - grita Amanda empujándome.

Me aleja momentáneamente por qué la derribo y me subo encima de ella.

-Con ansiedad y preocupación el cuerpo empieza a reaccionar antes que la cabeza.- digo excitado mientras la veo.

Meto mi mano por debajo de su camisón y siento sus pezones bien erectos, definitivamente está excitada tanto como yo.

- No, No lo hagas .- súplica Amanda.

Pero mi instinto no quiere parar la levanto y la volteó ella forcejea conmigo pero soy más fuerte, le quitó el pantalón, la tengo desnuda sin ropa interior con su trasero al aire.

Mojo mis dos dedos con saliva y acarició la entrada de su coño es tan suave y húmedo, que me calienta aún mas.

- No lo quieres, no te puedes negar.- lo digo con la respiración agitada.

Ella está jadeante y excitada por mi tacto.

- Creí que tú y yo éramos diferentes, pero no es así, solo que ati te cuesta aceptarlo, es muy natural ser fiel a tus instintos.- exclamó.

Su espalda se arquea lo está disfrutando, la volteó y beso y succionó sus pezones tan hermosos .

- Estás hirviendo por dentro, pero estás fingiendo no estarlo verdad.- digo mientras continuo acariciando su clítoris, me moja mis dedos completamente.

Siento que voy a enloquecer, me levanto y me quito mi camisa y pantalones estoy erecto frente a ella, intenta huir tomo ambas piernas y la jaló hacia mi nuevamente abriendola otra vez, parece una linda gatita encogida y asustada.

- Amanda déjame enseñarte el placer, el mejor amor que el cuerpo y la mente ha tenido.- susurro excitado .

Abro sus piernas su coño se ve tan apetitoso, está palpitando con tanta fuerza que me invita a entrar, solo la rozó un poco y ella se sobresalta es tan sensible.

Empiezo a besar sus pezones, y apretarlo con mis manos mientras bajo suavemente a su ombligo.

Su cuerpo se siente tan caliente, debe estar en trance que no recupera sus sentidos, no va a pararlo me estoy aprovechando de ti, tienes que decirlo ahora mismo si quieres que pare.

Date prisa tienes que hablar rápido por qué no podré controlarme si continuo besándote más y más abajo.

Me levanto y la veo directamente ella me voltea el rostro para no tener contacto visual conmigo .

- Puedes aceptar sin decir nada más , pero aunque dices que no lo haga, la verdad es que no lo odias.- Réplico con mi voz cargada de deseo.

Puedo sentir su entrepierna palpitar frenéticamente.

- No quiero hacer esto, !¡Detente!. -Grita Amanda con sus últimas fuerzas en contra del deseo con una fuerza de voluntad.

Me sorprendió y me excito más a la vez, mi pene se puso doblemente duro hacerla mía es lo único que pasa por mi mente en este momento.

Pero me levanto y la dejo empiezo a vestirme, casi pierdo la cabeza sin darme cuenta, soy un asesino no un violador.

Es un poco desafortunado pero aún no, aún no puedo obligarla a estar conmigo.

- Eso es todo por hoy para la próxima espero estés segura, así que piensatelo Amanda.- exclamó serio.

Mientras salgo de la habitación.

Solo puedo morder mis labios y pensar en este hermoso regalo que recibí y con tan linda envoltura.