Esteban — Ahora ya tengo algo, es más fácil cuando tienes una base y sabes dónde buscar, cuando conoces a la persona del otro lado del nombre —pase la mano por mi rostro —lo único que ella me dijo era que me había enviado Marc, pensé que me lo estaba haciendo a propósito, ahora creo que está lo suficientemente asustada como para no confiar en nadie y la entiendo, más de lo que me gustaría admitir —mire la casa —Yo no confío en la gente. Así que puedo entender que ella no confíe en mí o en nadie. Inhalo y volvió a observar adentro antes de mirarme. — No es mala, quizás demasiado buena y ese es su mayor problema, la vas a ver ayudando a alguien que necesita comprar un remedio, parándose para ayudar a una viejita a cruzar una calle, puede trabajar de moza en un par de copas y luego man