ASHER.
El color se fue del rostro de Gwen. Volvió a guardar el teléfono en la bolsa y caminó a la salida, la seguí sin pensarlo, y Camille me siguió a mí.
— ¿Está todo bien? —pregunté, no hubo respuesta, sólo siguió caminando—. ¿Cody está bien?
—Cody tuvo un accidente, lo atropellaron. Déjame ¿Sí? Por favor.
Continuó caminando y me detuve de golpe, chocando con Camille.
—Necesito tu auto.
—Vinimos con Logan —me recordó.
Era verdad, así que volví a salir al jardín y busqué a Logan. Él seguía riéndose de la cara de Di al caer al agua, pero esta vez relataba la anécdota a dos chicos.
—Necesito tu auto.
—Mmm… no dejo que nadie maneje mi camioneta, hermano.
—No seas bebé —le dijo Camille; empezó a buscar por los bolsillos de Logan hasta encontrar las llaves y dármelas—. Ve por t
