El Corazón Salvaje

Negocios y Chismes

Gwyn estaba sentada en la esquina de la oficina después de olfatear un poco. Coloqué los archivos en el escritorio de Lucien. Rei colocó vasos y una jarra de agua. Todo el hablar nos podía secar la garganta. Caleb y Cara entraron. Él era nuestro Beta y mi primo por parte de madre. Se parecía a su padre con su cabello rubio dorado y sus ojos avellana. Era alto y musculoso. Todo lo qué Cara podía hablar cuando lo conoció era lo atractivo que era. 

Cara era una de mis dos mejores amigas de la infancia. Era la hermana pequeña del Alfa Jason Moore y nos conocimos cuando el anterior Beta de la manada Daylight Moon me adoptó. Teníamos doce años. Era más alta que yo, con pelo ondulado rubio fresa y ojos azules que siempre tenían un brillo travieso en ellos. Él la llevó suavemente a sus asientos y se aseguró de que estuviera cómoda antes de sentarse a su lado. Me encantaba cómo cuidaba de ella. Eran muy felices juntos. Este era su tercer embarazo. 

—¿Cómo estás esta mañana, Cara? —le pregunté. 

—Estoy bien. No sé por qué hace esto cada vez. Apenas estoy de un mes —suspiró. 

—No sé. Los lobos de manada son así de extraños —respondí con una sonrisa. Lucien solía llevarme a casa desde el hospital cada vez que íbamos a los chequeos del embarazo. Casi lo echaba de menos, pero también era terriblemente embarazoso. Era una de las tonterías que permitía. 

Jean-Claude y Dillon entraron después, seguidos de Lucien. Todos tomaron sus asientos. Dillon era mi otro mejor amigo de la infancia. Me emocioné mucho cuando su pareja resultó ser mi primo por parte de padre, Jean-Claude. 

Ambos hombres tenían alrededor de dos metros de altura y una piel cálida y bronceada, así como habilidades increíbles para pelear. Sus similitudes terminaban ahí. Jean-Claude tenía el pelo color cobrizo y unos ojos marrón miel ricos, mientras que Dillon tenía el pelo rubio oscuro y unos ojos verdes jade. Dillon era un chismoso y Jean-Claude solo compartía sus secretos con su hermano y su pareja.  

Dillon tenía una constitución de un lobo nacido en solitario con músculos y una estructura más compactos. Jean-Claude parecía un guerrero típico de la manada, con una estructura más robusta que lo sugería. Dillon luchaba como un vampiro y Jean-Claude luchaba como un werebear. Eran perfectamente compatibles. Lucien se sentó a mi lado y le serví agua mientras ordenaba sus archivos. Richard llegó tarde. Dilly probablemente lo estaba vinculando para hacerlo apurarse. La obra de los niños comenzaba en tres horas. Lo cual era mucho tiempo, pero Dilly prometió no perderse ni un solo momento de lo que hicieran los niños, por lo que estaba inquieto. 

Richard entró paseando un minuto más tarde de que Lucien hubiera organizado sus papeles. Se detuvo en la puerta y olfateó antes de mirar a la esquina donde estaba Gwyn. Miré también. Ella estaba sentada, mirándolo con la cabeza inclinada. Gwyn olfateó el aire. Agarré la mano de Lucien. 

No se acercaron el uno al otro. En cambio, Richard volvió hacia nosotros y se sentó al lado de Jean-Claude. Me saludó brevemente con un gesto de cabeza. Richard era el hermano gemelo mayor de Jean-Claude. Se parecían, pero Richard llevaba el pelo largo y no era tan corpulento como Jean-Claude. Mi tío, Robert, decía que así funcionaban los gemelos en su familia. 

Mi padre era el hermano gemelo de Robert. Era corpulento y musculoso como Jean-Claude. Había tres hechos universales sobre los hijos primerizos de los Dubois. Primero, siempre eran niños. Segundo, siempre tenían ojos que parecían un rico caramelo. Tercero, el segundo nacido estaba destinado a ser un guerrero. Antes de que nacieran mi padre, Jean-Luc, y Robert, había una cuarta regla. El segundo hijo siempre era gay. Mi padre fue el primero en la historia de nuestra familia que no tenía interés en los hombres. Lo cual fue genial para mí y malo para Lucien. 

La primera compañera de Lucien fue mi madre. Solo tenía dieciocho años y esperó a que mi madre cumpliera diecisiete. Estaba bastante seguro de que ella era su pareja, pero solo se puede confirmar una vez que ambas personas han manifestado su lobo. Ella lo rechazó en favor de mi padre. Lucien los desterró a ambos de su manada en un ataque de rabia. Mi compañero se arrepintió de su decisión precipitada e intentó encontrar a mis padres, pero se habían mudado al otro lado del estado y estaban usando nombres falsos. Murieron cuando yo tenía seis años. Los mataron cazadores liderados por el rey Fuller del Colectivo Limb Torn. 

Él quería que yo fuera compañera de su hijo, Kyle. Esto inició una serie de eventos que me llevaron a mi futuro como Reina del Colectivo Eaten Heart y Luna de Lune Rouge. Pero eso no viene al caso. Por un momento, realmente creí que Richard había encontrado a su compañera. Había estado esperándola durante tanto tiempo. Muchas de las visiones y lecturas de los adivinos que consultamos acerca de la señorita Wolf y la compañera de Richard sonaban similares. Estaba casi segura de que ella era su compañera. 

—¿Estás bien, Richard? Parecías confundido —Lucien dijo. 

—Solo estoy acostumbrándome al nuevo aroma, Alfa. Mis disculpas —respondió él. 

—No te preocupes por eso. Todos, esa es Gwyn. Hablaremos de ella en unos momentos. Primero, Beta, ¿cuál es el estado de la manada después del ataque? —Lucien preguntó. 

—Las personas que resultaron heridas fueron atendidas y ya se han sanado o están casi sanas. Las brujas locales han descontaminado el área y han limpiado la manada en su conjunto —informó Caleb. 

—¿Alguna información sobre cómo logró pasar el sistema de alerta mágico sin activarlo, Dillon?

—Nada. Revisé las cámaras con detección de movimiento alrededor de los terrenos de la manada también. No tengo nada. Los guardias informaron que no vieron nada. Nadie puede entender cómo entró —Dilly dijo en tono frustrado. 

—Le pregunté a todos. Nadie pudo percibir su olor. Si no fuera por Addy jugando en el jardín, ni siquiera habríamos sabido en qué dirección se fue —añadió Jean-Claude. 

La cabeza de Gwyn se levantó y se acercó. Le prestamos atención. Se sentó al lado de Richard y comenzó a golpearse la nariz con la pata. 

—¿Pudiste olerlo? —preguntó Lucien. Ella respondió con un ladrido, luego se acostó y hundió su espalda como si alguien estuviera subiendo sobre ella. Gwyn se levantó y olfateó el suelo como si estuviera siguiendo algo. Se detuvo y se acostó de nuevo con un pequeño gemido, luego se levantó y se volvió hacia nosotros. 

—Siguió su aroma cuando volvía a buscar a Lunette —dijo Richard. 

—Ni siquiera yo pude captar su olor —murmuré. Había pequeñas trazas de él, pero nada lo suficientemente sólido como para rastrearlo muy bien. Un lobo de manada no debería tener un sentido del olfato mejor que un lobo solitario. No tenía sentido. Había algo en ella, pero no podía entenderlo. 

Nunca había visto a un lobo de manada renunciar a su forma humana. Nunca había visto a un lobo, que no fuera un Alfa, que fuera del mismo tamaño que Gwyn. Nunca había conocido a alguien que oliera tanto a lobo. Incluso en su forma de lobo, los hombres lobo olían a hombres lobo. No a lobos naturales. 

—¿Puedes guiarnos hasta donde dejaste su cuerpo? —Lucien preguntó—. Necesitamos recogerlo para que nuestras brujas puedan obtener más información sobre él. Ninguna de nuestras personas puede entender de dónde viniste antes de salir del arroyo cerca de donde te encontramos. 

Gwyn volvió a sentarse al lado de Richard. Asintió. El rincón de la boca de Richard se movió. Hubo un breve momento en el que parecía casi... ¿orgulloso?

—Richard, Jean-Claude, quiero que ustedes dos formen un equipo de guerreros y vengan con Gwyn a recoger el cuerpo —ordenó Lucien. 

—Sí, Alfa —respondieron. 

Continuamos con nuestros asuntos, cubriendo nuevas rotaciones de guardia, actualizaciones de infraestructura para el sitio Swift River, diagnósticos que debían realizarse en nuestro sistema de seguridad, hechos generales sobre Gwyn y revisando la lista de adolescentes que recibirían a sus lobos en la próxima semana. Mientras hablábamos, vi cómo Gwyn ponía su cabeza en el regazo de Richard y Richard acariciaba su pelaje. No pasó desapercibido para los demás, tampoco. No deberían ser compañeros, pero parecía que estaban formando un vínculo. Sin embargo, no lo señalaríamos. A ninguno de los dos les gustaría eso. 

-

Cuando cerramos la puerta y nos acomodamos en el sofá y las sillas, comenzamos a sonreírnos mutuamente. Rei se había acostumbrado rápidamente a ser parte de nuestro círculo. Era observadora de otras maneras y aportaba mucho a nuestro chisme. 

—¿Viste la forma en que Richard la acariciaba? ¿Cómo cerró los ojos y le rascó detrás de las orejas? ¡Fue tan lindo! Casi comienzo a chillar —dijo Cara, abrazándose a sí misma y moviéndose. 

—Ella no dudó en poner su cabeza en su regazo. Él no parecía sorprendido en lo más mínimo. Fue como si siempre lo hubieran hecho. ¿Creen que podría ser su compañera? —preguntó Dilly. 

—No lo sé. Ni él ni ella reaccionaron como si lo fueran. Puedo imaginar que ella lo habría pasado mal —dije—. Cara, Gwyn fue rechazada por su compañero. Indicó que no dejó su manada por eso. Estoy inclinada a creerla. Los pocos lobos que han sido rechazados en la manada generalmente solicitan un traslado si no quieren quedarse. Ninguno se vuelve solitario. Cuanto antes esté sana, mejor. Quiero descubrir de qué manada proviene y llegar al fondo de por qué una loba como ella no pensó que podía trasladarse —les dije.

Y Kara parecía que iba a llorar. Siempre era más emocional cuando estaba embarazada. Dillon asintió solemnemente, recordando lo que les conté en el entrenamiento. Ayer, vino a mi oficina y me dijo cuánto le hacía reír Gwyn. Una vez que se dio cuenta de que no representaba una amenaza, ella actuó molesta con él. Normalmente, la gente era mucho más amable con él después de decir que era mi mejor amigo. Me gustaba eso de Gwyn. La aprobación de los miembros con rango no parecía importarle. Era refrescante. 

—No habría confiado en él tan fácilmente —Dilly dijo—. He visto cuando la gente encuentra su segunda oportunidad después de ser rechazada. Es difícil porque tienen miedo de ser rechazados de nuevo y básicamente que les digan que no son lo suficientemente buenos por la persona que se supone que debe amarlos, dos veces. 

—Richard nunca haría eso, pero ella no sabe nada de él. Eso no es importante. Sería difícil para Gwyn encontrar su segunda oportunidad cuando su otro yo no puede alcanzarse. Patty dijo que se sentía como si estuviera durmiendo. No... no durmiendo. ¿Sabes cómo nacemos con nuestros lobos, pero no se manifiestan hasta que tenemos diecisiete? —asintieron—. Patty dijo que se sentía como una persona que está entre los doce y los diecisiete. Las relaciones mágicas están allí, pero la otra parte es inalcanzable. 

—¿Cómo pudo simplemente dormirse así? Incluso si fuese rechazado, no creo que pudiera hacerlo —Cara dijo. 

—No lo sé, pero la vamos a apoyar. Nos necesita. No quiero que la presionen ustedes ni a Richard. Debemos mantenerlos juntos —les dije. 

—¿Acaso Lucien no te dijo que no hicieras de casamentera con los miembros de la manada? Me parece recordar que te lo dijo hace solo un par de meses —reprendió Cara. 

—No estoy siendo casamentera. Me aseguro de que un m*****o de mi colectivo que puede ser m*****o potencial de esta manada se sane. Cuanto más tiempo pase con Richard, mejor. Ya confía en él. Él podría ser su vínculo para volver. Le es difícil conectar con nosotros porque tenemos su edad y tenemos parejas y familias. Aunque sea una lástima que Richard no tenga compañera, es algo con lo que ella puede identificarse. Odio decirlo, pero es una bendición tenerlo aquí —respondí. 

—¿Qué hay de su olor extraño? —Dilly preguntó—. No lo noté tanto afuera, pero sí en la oficina. 

—Ni idea. Planeo que Silas venga de visita. Su manada es hogar del único hombre lobo en el colectivo. No la he conocido, pero creo que también podría tener algunas ideas. Vamos a resolver todo esto —prometí. 

—Bien. Ahora, necesitamos avanzar con el plan de la conferencia de apareamiento —dijo Cara asintiendo. 

Gruñí. No quería hacer esto. Quería empezar a involucrar a la gente en el misterio de dónde venía Gwyn y qué había pasado. Lucien se encargaba de la situación de la bruja oscura, porque el ataque fue hacia la manada y el cachorro que tomó era el futuro Alfa. Yo ayudaría, pero esta responsabilidad era suya por ahora.