Jesús mi Salvador

En el principio de mi vida no conocía a Dios andaba en malos pasos, en deseos que con el tiempo esos deseos se intensificaban pero no me satisfacían, hasta el punto de sentirme vacía, me sentía muerta en vida, sin cabeza y eso pasó desde que tengo memoria. Todo empezó cuando yo era niña, vivía con mis mamás, y mi hermano mayor, en dos cuartos pequeños, tenía una vida tranquila no sufría de abuso familiar y puedo decir que tenía amor de mis mamás, sabía que mis mamás salían a trabajar y aveces me quedaba con mis tías, o con la empleada de la casa que tenía que cuidarme o como dicen en otros países una Nana. Mi mamá me enseñó a no mentir ni robar, decía. -Jamás debes alzar nada de una casa ni que esté en el suelo, ni una aguja—Decia mi mamá. Me ayudaba a hacer mis tareas y puedo decir que era "niña de mamá". Y aún los soy. Pero aún así aunque tenía leyes en mi corazón hice cosas malas desde pequeña, cuando me enojaba lastimaba a mis perritos, como patearles, o lastimarlos , oh los votarlos a la calle ya que no quería cuidarlos, Un niño no sabe cuidar a los animales peor cuando se desquita con el animalito y el niño ya sabe que es malo y bueno. El niño no sabe mentir pero aprende por sí solo, un ejemplo. —¿Quién rompió el vaso?—dice la mamá enojada mirando a su hijo. —El niño todo asustado, responde —Yo no fui fue mi hermano. Una madre enseña a no mentir pero por miedo o vergüenza empieza a culpar a otra persona oh a mentir. En la palabra de Dios habla que dentro de nosotros está la semilla de la maldad, ningún humano es perfecto, santo, puro, que todos pecamos seamos niños, jóvenes o adultos. Salmos 51:5 He aquí, yo nací en iniquidad, y en pecado me concibió mi madre. Significa que los niños pueden ser malos y hacer daño si sus padres fueron malos y todo lo que el padre es, el niño igual aprende a ser es su naturaleza, es nuestra naturaleza ser malos. Pero también si tu madre no te enseña desde pequeño andar en el camino de Dios, amarlo, temerlo, descuidaras tu obediencia y harás lo que quieras. Una vida en libre albedrío escogiendo lo malo. Si no lo tenés es difícil hacer las cosas buenas que dice Dios. y por quien recibimos la gracia y el apostolado, para la obediencia a la fe en todas las naciones por amor de su nombre; Romanos 1:5. Yo era una niña caprichosa, rebelde, me gustaba andar en falditas, pintarme, y me enojaba con facilidad con los demás, mi carácter era lo peor, y si me hacían daño me defendía. Dicen que es bueno que un niño sepa defenderse sacar las garras si sucede algo malo, pues déjame decirte que la violencia trae más violencia. El que mata con espada muere con espada. Pero eso no te hará libre ni te ayudará con tu agresor y solo tendrás odio, rencor, y te olvidas de la misericordia, de perdonar.Porque al no perdonar te vuelves una persona sin corazón y rencoroso. Éxodo 21:12 El que hiera de muerte a otro, ciertamente morirá También era una niña depresiva, sufría de bullying de mis maestros ya que no hacía bien mis tareas, tenía amigos pero me enseñaron malas cosas. Cuando mis mamás no estaban quería huir de casa, cuando se hiban yo salía de la casa queriendo irme pero me detenían mi hermano mayor y mi empleada-nana. ¿Porqué razón quería irme? Porqué sentía que era una carga, sentía que no debía nacer, sentía que traía deshonra a mis mamás por no ser estudiosa, y tener malas notas así que mi plan era irme de casa y morir, tenía tan solo 5 o 6 años. Una depresión que duró mucho, mucho tiempo. Mi vida era como andar a ciegas, una vida sin luz, una vida sin ganas de vivir era una niña sin luz. ¿Dónde estaba mi padre? Pues verán mi padre me abandono a mi 1 añito, aveces volvía y de nuevo me abandonaba ya que tenía que estar en sus cosas del mundo. Así que mi mamá era papá y mamá, más mi abuelita que con el tiempo fueron mi sustento y sin mi sustento en este camino. Yo me preguntaba muchas veces por qué mi padre se iva y pues la razón es que no era padre, y el placer de la vida lo llamaba, el enemigo lo agarro muy fuerte y no lo culpo, una niña sin luz aunque lo tenía todo verdad. Pero aún así me sentía vacía por dentro. Padres, un niño no es feliz ni aunque le regales juguetes, o estés a su lado, todos en el mundo cuando no conoces a Dios eres un niño vacío porque no saben de la existencia de Jesús el que llenará ese vacío. Al darle sus gustos al niño solo lo harán niño caprichoso al crecer y querrá ser un hijo con dinero pero sin amor. Cuiden a sus hijos de el mismo. Ayuden a qué conozcan a Dios así no verán tanto las cosas del mundo y al saber que es ser misericordioso y enseñarles las leyes de Dios sabrán que es amarse a sí mismo y así aceptar su cuerpo, su alma, y existir con el pensamiento que Dios les creo así como nacieron, sin Dios no sabrán amarse. Lo digo porque yo era así de niña y por eso cometí otro pecado más o otro error. Mientras sus hijos sepan de Dios de su amor, y orar por ellos Dios los cuidará.